(Minghui.org) Soy una maestra de 67 años jubilada. Comencé a practicar Falun Dafa en 1998. Después de años cultivándome y mirando hacia dentro, obtuve entendimientos que quisiera compartir.
Mirando hacia dentro para eliminar el veneno de la cultura del PCCh
Establecí un sitio de producción de materiales en mi casa en 2006, cuando la persecución a Falun Gong era muy severa. Mi sitio de producción era el único en el vecindario, así que tenía que abastecer de materiales a 40-50 practicantes locales.
Cada semana producía más de 20 copias de Minghui Semanal como también una cantidad siempre en aumento de volantes y folletos. También ayudaba a los practicantes a subir las declaraciones de renuncia de las personas que renunciaban al PCCh. A veces la lista incluía varios centenares de personas. En ese momento, todavía tenía trabajo de tiempo completo, así que tenía que trabajar por las noches en estos proyectos.
Yan, una practicante, me envió una lista de personas que renunciaron al PCCh. Ella tenía una discapacidad parcial y caminaba con dificultad. Solo había ido a la escuela dos años, no obstante persuadía a mucha gente a renunciar al PCCh.
Yan era muy diligente. Salía temprano por la mañana y regresaba tarde por la noche. Los practicantes la admiraban porque lo hacía muy bien al aclarar la verdad. Su lista de nombre para renunciar al PCCh era desordenada, las palabras estaban con rayones por todos lados. Tenía que adivinar qué escribió en el papel. Le daba sobrenombres muy vagos a la gente que aceptaba renunciar al PCCh pero no quería usar sus nombres reales, como por ejemplo “bien bendecido”, “buena fortuna”, “Niña mayor”, y “Pequeño segundo”.
Ella tiene un año más que yo, así que la llamo hermana mayor. Una vez compartí: “Hermana mayor, los nombres tienen que estar bien escritos. No hay problema si los caracteres no están propiamente deletreados, porque yo puedo escribirlos como corresponde. Pero es algo serio cuando les pones sobrenombres a los seres conscientes. Si no eres seria con esto, generarás una impresión negativa hacia Dafa”.
Ella sonrió, pero no dijo nada. Después de eso, escogió mejores sobrenombres, pero su escritura no era buena aún. Gastaba tanto tiempo, era como resolver un acertijo de palabras.
Un día vino a verme de nuevo, le dije: “Hermana mayor, ¿podrías por favor escribir más claras las palabras? Me lleva tanto tiempo resolver tus acertijos de palabras”.
Se puso descontenta y me apuntó: “No puedo escribir bien. ¿Acaso no eres maestra? Si no puedes descifrar las palabras, quizás tu nivel no sea suficiente”.
Sus palabras me sorprendieron. Me preguntaba cómo alguien así podía ser practicante. No lo hizo bien pero empujar la responsabilidad sobre mí.
Me enojé, la miré fijo y le dije: “Mi nivel no es suficiente ¿simplemente porque no puedo resolver tus acertijos de palabras? ¿Necesitas una maestra para resolver tur acertijos de palabras? Como mi nivel no es suficiente, no te molestes en traerme tu lista la semana que viene. Eso me ahorrará un montón de problemas”.
No dijo nada. Simplemente se quedó allí un rato, y luego se fue con lágrimas en sus ojos. No le dije nada, ni siquiera adiós.
Me calmé gradualmente después que Yan se fue. Recordé lo que había pasado entre nosotras. Sus palabras no eran amigables, ¿pero las mías? ¿Eran palabras acordes a un cultivador? Cuanto más pensaba sobre ello, peor me sentía. Me calmé para estudiar el Fa.
Shifu dijo:
“Es así, los conflictos con los que te topas, cualquier asunto con el que te topas está probando tu corazón humano, ¿cómo haces para que concuerde con el de un cultivador?, ¿cómo haces para ser digno de ser un Dafa dizi? ¿Entonces eso no es justamente xiulian? ¿Acaso la gente común puede actuar y pensar de esta manera? Cuando te topas con conflictos, no importa si estás en lo correcto o estás equivocado, sabes pensar en ti mismo: ¿dónde me equivoqué en este asunto? ¿Verdaderamente surge de mí algo que no es correcto? Que todos piensen de esta forma, en el primer pensamiento piensen en sí mismos y piensen en el problema; quien no lo hace así, no es un cultivador verdadero de Dafa.” (Qué es un Dafa dizi)
Las palabras de Shifu me estremecieron. ¿Se estaba refiriendo a mí? Nada es accidental. ¿Por qué no tomé este incidente como una oportunidad para cultivarme a mí misma e identificar mi problema? No es una cosa menor si “quien no lo hace así, no es un cultivador verdadero de Dafa.” Tenía que realmente mirar hacia dentro para pensar sobre mí misma.
Después de reflexionar seriamente, me di cuenta que olvidé cómo manejarme como practicante. No trataba a otros practicantes sinceramente, compasivamente o pacientemente. Le hablé como si fuera su superior y le estuviera dando una tarea. La traté como mi estudiante. No me cultivé a mí misma en este aspect y la traté pobremente. Mis palabras hacia Yan eran tan sarcásticas y duras que se largó a llorar y se fue de mi casa.
Si hubiera estado tranquila, me hubiera considerado una practicante, y la trataba amigablemente, compasivamente, esto no hubiera pasado. Era verdad que su escritura no era buena, pero no era que ella quería hacerlo así, ni tampoco era algo que se podía cambiar de un día para otro.
Trabajaba tan duro, no tenía miedo de la persecución, caminaba con gran dificultad y salía todos los días a aclarar la verdad. ¿No son estas cualidades preciosas? Tendría que ser tolerante, cooperar con ella y apoyarla. Cuando pensé sobre esto, me di cuenta que era yo quien estaba equivocada, no ella. En ese momento no me consideré practicante, lastimé a otra practicante e intensifiqué el problema.
¿Por qué no me di cuenta en ese momento? La cultura del PCCh es realmente venenosa. Me engañé sin siquiera darme cuenta. Es realmente un obstáculo en el xiulian. Era la raíz del conflicto entre Yan y yo, y me determiné a eliminarlo.
Cuando pensé sobre esto, me sentí avergonzada. Vi mis fallas en el xiulian y me sentí culpable. Estaba avergonzada de que no era una verdadera cultivadora de Dafa.
Pasó otra semana. Estaba esperando a Yan y vino. Compartí con ella sinceramente. Me disculpé y ella habló de sus fallas.
Finalmente llegamos a un acuerdo: cuando me diera la lista con los nombres de las personas para renunciar, se quedaría conmigo para revisar uno por uno. Ingresaríamos los nombres en la web cuando ella estuviera conmigo. De esta manera, no habría problemas con los nombres.
Yan estaba contenta. Yo también estaba contenta. Compensé el haber lastimado a otra practicante. Eliminé la cultura del PCCh de mí, identifiqué mis fallas y me discipliné a mí misma en base a los principios del Fa.
Mirando hacia dentro – las cosas menores no son menores
Una mañana Li me trajo dos pedazos de pan y dos pepinos. Le pregunté por qué me había traído vegetales en un día tan frío. Dijo que eran las sobras de ayer. Yo dije: “Es tan poco. Quédatelos y cómelos tú. La comida no la compré solo yo. Por tu manera de hacer las cosas, ¿no debería llevarle la comida yo a alguien más? ¿Vale la pena el esfuerzo?”
Li dijo: “No pude comer todas las sobras. En tu lugar hay más gente que puede comerlas”.
Después de irse, me di cuenta que mi actitud y mi tono no eran buenos, pero lo dejé ir sin pensar mucho más. Dos días después, Li me llamó y dijo que venía.
Estaba enojada. “No lo puedo soportar. Hablemos seriamente. ¿Por qué tuviste esa actitud el otro día? Dime: ¿qué hay de malo conmigo? También te voy a decir qué tienes de malo tú”.
Podía ver que estaba enojada. Me arrepentí por no haberme disculpado. Me advertí a mí misma una y otra vez: “No hagas peor el conflicto, déjala terminar”.
Sonreí y dije: “Está bien, está bien, anda. Te escucharé”.
Ella dijo: “Eres tan egocéntrica. Nunca consideras los sentimientos de las personas. Tienes tu propia forma de hacer las cosas. Atraes a los practicantes con talentos y los usas para lo que quieres. Mei es la practicante que yo te presenté, pero te has olvidado de mí”.
Las palabras de Li me confundieron porque no entendía de qué estaba hablando, pero no di ninguna explicación. Solo estaba consciente de que hice algo mal. Si no daba por sentado las cosas y usaba mis propias nociones para juzgar todo y pedía cosas de otros, no habría invitado este problema. No estaba alineada con el Fa y mis palabras no eran bondadosas.
Ahora me di cuenta que Li estaba alineada con el Fa porque ella podía disciplinarse incluso en cosas pequeñas. Debería haber aprendido de ella, pero no me di cuenta cuando vino a mi casa ese día. No me cultivé a mí misma; al contrario, pensé que ella estaba haciendo lío de cosas innecesarias. Tal vez esta era una brecha en mi xiulian.
Me di cuenta verdaderamente de la seriedad de la cultivación. Cada cosa menor es seria. Aparentemente ninguna cosa menor es realmente menor. Todo manifiesta el reino de un practicante. No podemos ignorar las cosas menores o tomarlas ligeramente. Me determiné a tomarme la cultivación seriamente y rectificarme a mí misma para estar en línea con el Fa.
El conflicto se resolvió. Regresamos a nuestra manera normal de interactuar y hacer lo que teníamos que hacer.
Los incidentes de arriba son menores, pero he identificado mis propias fallas como también mi brecha con los practicantes y los requisitos de Dafa.
Estas cosas menores ocurren mientras validamos el Fa. Durante los conflictos, si no podemos mejorar nuestro xinxing o cooperar bien, afectaremos negativamente o demoraremos la salvación de la gente y causaremos pérdidas al cuerpo. El mal se aprovechará de nuestras brechas.
Tenemos que hacer buen uso de la herramienta mágica de “mirar hacia dentro” que Shifu nos dio, cultivarnos y purificarnos, y alcanzar el reino de “desinterés y altruismo” (La naturaleza fo no tienen ningún punto débil – Escrituras Esenciales para Mayor Avance)
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Categoría: Mejorándose uno mismo