(Minghui.org) He notado que está creciendo el número de personas interesadas en leer los materiales informativos de Falun Dafa que distribuyen los practicantes. Me gustaría compartir algunas experiencias personales.

Los distribuí en cada vivienda de un pequeño vecindario. Cuando pasé al día siguiente vi varias personas mayores sentadas bajo un árbol leyéndolos. Le dieron un volante a un señor que pasaba y le dijeron: “Venga a leer esto”.

En otra zona de muchas unidades residenciales, llevé materiales para distribuir. Antes de finalizar de repartirlos, una mujer salió del pasillo leyendo un folleto. Continuó haciéndolo mientras caminaba hacia una clínica llena de gente.

En otra ocasión, alguien tomó un volante que recién había dejado en un mercado abarrotado de personas.

Repartiendo materiales algunos residentes me saludaron o dijeron  palabras amables, mientras  otros me agradecieron manifestando: “Has estado trabajando duro”.

Recientemente mi hija fue a la casa de una compañera de clase y vio una copia del Semanario Minghui sobre su escritorio. La estudiante le contó que realmente había disfrutado leerlo.

Mi hija le explicó la importancia de renunciar al partido comunista chino y a sus organizaciones juveniles. La ayudó a renunciar y le aconsejó que no se afiliara nuevamente.