Si entendemos el Fa podemos abandonar fácilmente los apegos

(Minghui.org) A lo largo de los 10 años que he practicado Falun Dafa, han surgido mis apegos humanos comunes, y en ocasiones han resultado ser muy prominentes. Debido a que no entendía profundamente las enseñanzas, a menudo descuidaba mi cultivación y usaba el pensamiento común para enfrentarme a las dificultades o desafíos. Por ejemplo, me costó mucho dejar de lado el resentimiento y los celos.

Estaba celosa y resentida por la forma en que mi suegra trataba a su hijo menor y a su nuera; obviamente, era mucho más amable con ellos que con mi esposo y conmigo. Aunque pude eliminar muchos apegos y mantenía una buena relación con mis suegros, nunca soltaba completamente el resentimiento y la envidia. En la superficie, parecía que nuestra familia era armoniosa. Pero, debido a que aportábamos y contribuíamos más en los asuntos familiares que los demás parientes, a veces sentía que era injusto.

A mi esposo lo crió un pariente hasta que tuvo la edad suficiente para ir a la escuela. Mis suegros siempre favorecieron a su hermano menor. Después de que los dos hijos crecieron y se casaron, sus padres continuaron favoreciendo a la familia del hijo menor. Incluso los vecinos notaban la diferencia, y sentían que la forma en que nos trataban era injusta.

El Maestro Li Hongzhi enseñó en Zhuan Falun:

"El igualitarismo absoluto del pasado sostenía que todos los seres humanos son iguales al nacer y que son las vidas postnatales las que hacen cambiar a la gente. Yo digo que esa afirmación es demasiado absoluta, y cualquier cosa demasiado absoluta es incorrecta".

"Vemos desde niveles altos que la vida humana entera que existe en otros espacios está puesta allí, ¿pueden ser iguales? Todos desean ser iguales, pero si esa vida humana suya no lo tiene, ¿cómo pueden ser iguales? No son iguales" (Séptima Lección, Zhuan Falun).

El Maestro Li también explicó:

"Estando en la ilusión, al hombre le resulta fácil hacer cosas malas; en la religión budista esto se llama el círculo de la retribución del yeli. Por eso, cuando algunas personas tienen una tribulación o les pasa algo desagradable, en realidad están todos pagando su ye en la retribución circular del yeli" (Segunda Lección, Zhuan Falun).

De repente me di cuenta de que la razón por la que no podía dejar de lado completamente el sentimiento de injusticia era que estaba utilizando la definición de "justicia" de la gente común para medir la situación. No recordaba que esta tribulación era un "pago" del yeli (karma).

Cuando conseguí llegar a ese entendimiento, cada vez que me encontraba en una situación "injusta", rechazaba el concepto ordinario de "justicia" y pasaba fácilmente la prueba. Ahora, trato bien al hermano de mi esposo desde el fondo de mi corazón y pongo los intereses de su familia en primer lugar. ¡Realmente me siento desinteresada y altruista!

Creo que nos hemos aferrado a muchos de nuestros vínculos humanos porque no evaluamos completamente los desafíos que encontramos desde el punto de vista del Fa.

Por ejemplo, siempre pensé que el tiempo era limitado cuando trataba de seguir los requerimientos del Maestro Li. Me ponía ansiosa y sentía presión porque comprendía que teníamos una responsabilidad histórica como discípulos de Dafa y debíamos ayudar a la hora de ofrecer salvación a la gente. Después de estudiar el Fa con tranquilidad, caí en la cuenta de que no sentía tal preocupación si estudiaba bien e interiorizaba las enseñanzas.

El estado de un cultivador debe ser pacífico y compasivo. Me convierto en una persona normal cuando me pongo ansiosa o me siento presionada. Si estoy en ese estado, mis pensamientos no están en el Fa, y puedo encontrar rechazo e insultos cuando reparto volantes de Dafa a la gente.

De hecho, detrás de ese sentimiento de ansiedad se esconde el apego de perseguir. Quiero hacerlo bien, quiero estudiar el Fa y practicar bien, y quiero salvar a más gente. Así se manifiesta el apego de perseguir. No importa cuán ajustado sea nuestro tiempo o cuántas cosas tengamos que tratar, debemos hacerlo. Mi entendimiento es que si abandonamos la búsqueda, el Maestro arreglará todo para nosotros.