(Minghui.org) Soy un practicante de 15 años que ha estado practicando Falun Dafa durante los últimos dos años. Me gustaría compartir algunas de mis experiencias en la cultivación.

Siendo testigo de la recuperación de mi abuela

Mi abuela también es practicante de Falun Dafa. Un día, hace dos años, cayó del borde de la ventana mientras limpiaba las ventanas de cristal. Fue enviada al hospital y nos dijeron que tenía fracturas óseas. Se comportó como una practicante y regresó a casa sin ningún tratamiento médico.

Luego de hacer los ejercicios y leer el Fa todos los días, se recuperó. A diferencia de otras personas, mi abuela tampoco sufrió mucho dolor. Personalmente, fui testigo de lo milagroso que es Dafa y decidí ser un practicante.

Siendo diligente en la cultivación

Poco después de comenzar la práctica, se publicó un nuevo Lunyu. Mi abuela me animó a memorizar esta nueva publicación del Maestro Li (el fundador de Falun Dafa). Me tomó dos noches recordar las enseñanzas de memoria. Ahora estoy memorizando Zhuan Falun cada vez que tengo tiempo. Un compañero practicante me dijo: “Si puedes memorizar todo el libro, será muy admirable”. Quiero ser una persona que sea capaz de hacerlo.

Mi abuela tiene un grupo de estudio de Falun Dafa en su casa. Muchos practicantes se reúnen para leer por la noche y me uno a ellos. Fui muy diligente cuando me quedé con mi abuela. Miré para adentro cada vez que me encontraba con problemas y era estricto conmigo mismo en seguir los principios de Dafa.

Mejorando mi xinxing

Una vez alguien me golpeó muy fuerte en la escuela. No tomé represalias. Mis compañeros estaban sorprendidos. En el pasado me habría enojado si alguien me golpeaba, pero ahora soy un practicante. El Maestro nos enseña a no pelear cuando nos golpean o insultan. Luego les sonreí a mis compañeros de clase y les dije que había cambiado y que ahora practico Falun Dafa.

En otra ocasión, una amiga cercana de repente perdió la paciencia conmigo. Me quedé perplejo porque no hice nada para molestarla. Luego fui indiferente con ella. En casa mientras leía Zhuan Falun, me encontré con este párrafo:

“Si él no te creara un ambiente como este, ¿adónde irías a elevar tu xinxing? Tú eres bueno y yo también soy bueno, y el gong crece con solo sentarnos allí en armonía, ¿dónde hay tal cosa? Es justamente porque él te crea un conflicto como este que surge una oportunidad así para elevar el xinxing; si puedes desde ahí elevar tu propio xinxing, ¿acaso este xinxing tuyo no se eleva?”.

Me di cuenta de que mi respuesta a mi amiga estaba mal, y que tenía apegos humanos como la envidia, la competencia, ostentación y resentimiento. Me decidí a deshacerme de ellos. Pensé: Soy un practicante de Dafa y debo hacer las pases con mi amiga mañana.

A la mañana siguiente, justo cuando iba a buscarla, se acercó a mí sonriendo. Y se disculpó por perder la paciencia y me pidió que la perdonara. Me dije: “Debo agradecerle por darme una oportunidad para mejorar mi xinxing”.

Shifu me ayudó en mis sueños

Al regresar a la casa de mis padres, perdí el ambiente de cultivación. Me relajé, vi programas de televisión y jugué a los juegos de la computadora. Sin embargo, Shifu no se rindió en ayudarme. Una y otra vez, lo vi en mis sueños. Yo sabía que Shifu me estaba animando a ser diligente.

En un sueño, vi a Shifu observándome mientras hacía los ejercicios. Mi postura estaba equivocada y él alzó ligeramente mis brazos. Oí el ruido de mis huesos quebrándose. Me sentí muy ligero y relajado. ¡Las palabras no pueden describir lo maravilloso que me sentía!

Durante otro sueño alguien me llamó para que vaya a una habitación, pero estaba cerrada y no pude entrar. Después de hacer varios intentos de entrar, la persona finalmente abrió la puerta con un palillo filoso. Al entrar, vi al Maestro y a los practicantes sentados adentro. Había un lugar al lado del Maestro. Él me miró e hizo un gesto para que me sentara en el lugar vacío. Me desperté del sueño y estaba muy agradecido a Shifu por su compasión.

Yo no era capaz de entrar en la habitación inicialmente, pero Shifu abrió la puerta y me ofreció la salvación al igual que a muchos practicantes. Él no quiere renunciar a nadie, pero si no puedes dejar de lado los apegos humanos, ¿cómo puede Él llevarte a casa? Estaba llorando cuando pensé en esto.

Tuve otro sueño donde fui perseguido por un grupo de personas. Me subí encima de un muro y vi un automóvil negro conducir hacia mí. El automóvil se detuvo y fui capturado. Yo estaba muy asustado y gritaba pidiéndole ayuda a Shifu para que me ayudara. En ese momento, una ráfaga de viento me sacó del auto y me salvé.

Yo sé que Shifu está constantemente vigilando a sus practicantes. Nos ha dado demasiadas cosas y la mejor manera de devolverle sería hacer lo que Él nos dice.

Aunque soy un joven practicante, siento que no debo perder la oportunidad de hablar con la gente sobre Dafa. Una vez un practicante me preguntó si quería ir con ellos para entregar folletos de Dafa. Le dije que sí, pero estaba lloviendo. Envíe pensamientos rectos para que cesara la lluvia y, al final, no llovió esa noche. Entregamos todos los volantes y le explicamos a la gente la verdad sobre Falun Dafa.