(Minghui.org) La Conferencia de intercambio de experiencias en Canadá se llevó a cabo en el Salón de la Convocatoria en el campus de la Universidad de Toronto el 22 de julio de 2017. Más de mil doscientos practicantes a lo largo de Canadá y de Estados Unidos asistieron al evento. Veinte practicantes hablaron sobre cómo siguen los principios de Falun Dafa en su vida diaria y trabajo.
La Conferencia de intercambio de experiencias en Canadá tuvo lugar el 22 de julio.
Coordinando
La Sra. Liu de Toronto compartió cómo contactó a teatros en Toronto para las actuaciones de Shen Yun en la temporada pasada. Dijo: “Cuando me reuní por primera vez con los representantes de los teatros, no estaba contenta con cómo otros practicantes presentaban a Shen Yun”. Como resultado se quejaba y tenía algunos sentimientos negativos. Poco después, miró dentro y supo que tenía que apoyar a los demás con pensamientos rectos.
“A partir de entonces, aprendí a coordinar con otros incondicionalmente, ya sea interactuando con el teatro (o representantes de los teatros) o promoviendo Shen Yun a la sociedad principal. Suceden milagros y muchas cosas que parecen imposibles se vuelven realidad”. Está muy agradecida con la ayuda compasiva del Maestro y el apoyo de practicantes.
Altruismo
La Sra. Lu de Ottawa a menudo ayudaba con las actuaciones de Shen Yun en Canadá así como en otras ciudades cerca en los Estados Unidos. Con el tiempo, se encontraba muy ocupada ayudando con Shen Yun o superando conflictos de xinxing. Dijo: “A pesar de que conozco bastante bien a Shen Yun y a veces veía escenas sagradas en otras dimensiones, noté que mi reacción al programa no era tan conmovedora y sincera como la de los miembros de la audiencia”. Sabiendo que esto no era correcto, comenzó a mirar hacia adentro, y se dio cuenta de la causa de su egoísmo.
Continuó: “Cuando hice algunas cosas, incluyendo aquellas relacionadas con Dafa, a menudo pensé en cómo mejorarme, o lo que podría lograr”. Ahora ella sabe que el Maestro la ha salvado y la ha guiado a lo largo del camino. “El único pensamiento que tengo ahora es atesorar realmente esta oportunidad y hacer las cosas lo mejor que pueda con un corazón puro”.
Veinte practicantes compartieron su experiencia durante la conferencia.
La historia de un banquero
El señor Zhang escuchó por primera vez sobre Falun Dafa en 1994, pero no se volvió practicante hasta que llegó a Canadá en 2006. En 2011 fue reubicado en otra posición en el banco en el que trabajaba. Estaba feliz en tomar esta nueva posición, pensando que le sería posible expandir el negocio al mercado chino. Sin embargo, para ayudar a otro banquero, el gerente de la región le dijo que podría trabajar sin el mercado chino.
Considerándose como un practicante supo que eso no fue accidental. Pensó: “Esto me ayudaría a estar en contacto con nuevos clientes de alto nivel”. Trabajó muy duro para preparar cada presentación y seriamente con cada cliente, incluso si era una firma de abogados, una firma contable, u otras agencias. Poco a poco, con su bondad y honestidad se ganó la confianza de compañeros de trabajo y clientes. Sus clientes entonces lo refirieron a él con sus amigos.
En la industria bancaria, las redes de trabajo sociales son muy importantes. El señor Zhang y su esposa están comprometidos estrechamente con los clientes, y les habló sobre Falun Dafa. El Sr. Zhang dijo: “Para el quinto año, mi crecimiento de nuevos negocios fue el máximo en todo el país en mi empresa. Realmente aprecio la ayuda del Maestro”.
Haciendo llamadas telefónicas a China
La señora Jiang comenzó a practicar Falun Dafa en 2013, y vino a Canadá al año siguiente. Sabiendo que muchos chinos habían sido engañados por la propaganda difamatoria del régimen comunista chino, decidió llamar a la gente en China regularmente para clarificar los hechos.
Al principio usaba diálogos de otros practicantes. “Pero luego de leer los diálogos esa persona estaba aún escuchando y no sabía qué decir”, dijo. Luego de hablarlo con otros practicantes, aprendió la importancia de dar un paso adelante y hablarle a la gente usando sus propias palabras.
Dijo “Hacer llamadas telefónicas a China es también una oportunidad para mejorar el xinxing, porque mucha gente cuelga el teléfono o me insulta”. Al estudiar Zhuan Falun, la Sra. Jiang se dio cuenta de que aquellos que le lanzaban malas palabras no sólo estaban perdiendo de (virtud), sino también arriesgando su propio futuro”. Así que ya no estaba molesta, y planeó hacer todo lo posible para salvarlos”.
La conferencia concluyó a las seis de la tarde. Los participantes dijeron que habían aprendido mucho de las experiencias compartidas.
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