(Minghui.org) Sé que el buen estudio del Fa ayuda verdaderamente a los practicantes de Falun Dafa en su cultivación, pero no tenía un entendimiento profundo de esto hasta hace poco tiempo. Me gustaría compartir la siguiente experiencia acerca de hacer llamadas telefónicas a China.
Muchos chinos han sido engañados por la propaganda de odio presentada en los medios de comunicación estatales de China, por lo que recientemente me uní a otros practicantes de Dafa para hacer llamadas telefónicas a ese país. Le contamos a la gente los hechos sobre Falun Dafa y la persecución, y les pedimos que renuncien a sus membresías del partido comunista chino (PCCh) y de sus organizaciones afiliadas.
El primer día que tomé parte en el proyecto envié fuertes pensamientos rectos, alrededor de veinte minutos antes de hacer las llamadas. Sin embargo al hacerlas, los receptores me colgaron uno tras otro. Dos horas más tarde, solo dos personas estuvieron de acuerdo en renunciar.
Al día siguiente, hice lo mismo. Estudié el Fa, envié fuertes pensamientos rectos e hice las llamadas. También escuché las realizadas por otros practicantes para ver cómo lo hacían, y continué enviando pensamientos rectos a lo largo de las mías. Aunque me sentí bien, el resultado no fue tan bueno. Transcurridas dos horas, solo una persona estuvo de acuerdo en renunciar.
El tercer día fue similar. Envié fuertes pensamientos rectos con anticipación, pero cuando hice las llamadas, difícilmente alguno estaba dispuesto a escuchar. Solo una persona renunció en dos horas. Estaba muy molesta, ya que los demás lo estaban haciendo mucho mejor que yo.
Cuando lo analicé con otra practicante, bromeó diciendo: “Por lo menos tratas todos los días, igual que los demás”. Sí. Estaba haciendo llamadas como los otros, pero los resultados eran diferentes. ¿Qué estaba haciendo mal?
La situación no mejoró en el cuarto día. Aunque estudié el Fa, envié fuertes pensamientos rectos y llamé a China como de costumbre, ninguno renunció al PCCh. Me sentí muy mal.
Al quinto día por la mañana tenía muchas tareas por realizar, y fui por la tarde a hacer las llamadas telefónicas cuando tuve un descanso. Todavía no había estudiado el Fa, por lo que me calmé y leí Zhuan Falun.
No sabía por qué, pero ese día el estudio del Fa había sido muy bueno y mi mente estaba muy enfocada. Aunque leí menos de veinte páginas antes de hacer las llamadas, supe que aquel día de estudio del Fa había sido mucho mejor que en las jornadas previas.
Tan pronto como comencé a hablar por teléfono, sentí que mis palabras tenían energía y mis pensamientos rectos eran fuertes. Supe que esto era el resultado de un buen estudio del Fa.
Ese día cinco personas decidieron renunciar. Un practicante que a menudo me ayudaba me dijo: “Bien hecho. Por favor continúa así”.
A partir de esta situación, aprendí la importancia del buen estudio del Fa. Ahora puedo ayudar a alrededor de diez personas a renunciar por día, y algunas veces pueden ser quince o dieciséis.
Esta es mi experiencia respecto a la importancia de estudiar bien el Fa. El Maestro ha hablado sobre el tema muchas veces, pero yo no lo había entendido hasta ahora.
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Categoría: Mejorándose uno mismo