(Minghui.org) Cuando empecé a practicar Falun Dafa en 1995, mi esposo me apoyó mucho. Dijo que era bueno practicar la cultivación y mantener la salud. A menudo me recordaba que hiciera los ejercicios, estudiara los libros de Falun Dafa y enviara pensamientos rectos. Además, a menudo me ayudó a distribuir materiales para aclarar la verdad. Mi esposo nunca se quejó del dinero que gasté para hacer los materiales que entregamos.

Sin embargo, no creía que la cultivación pudiera permitirle a uno alcanzar la consumación. Los otros practicantes y yo tratamos de explicárselo muchas veces, pero siempre decía: "Si pueden volar tan solo una pulgada del suelo, les creeré".

Por lo tanto, lo traté como una persona con baja calidad de iluminación.

Un día de octubre de 2007, alguien me denunció a las autoridades por hablar con un estudiante sobre Falun Dafa. Unos ocho oficiales llegaron a mi casa para arrestarme. Me encerré en la cocina y me negué a que me llevaran. No pudieron entrar y amenazaron con arrestar a mi madre y a mi esposo. Mi esposo estaba tan traumatizado que no pudo concentrarse después del incidente. Estaba distraído y no podía trabajar.

A pesar de que mi esposo estaba en una condición frágil, el oficial de policía Liu Dongsheng a menudo lo amenazaba y lo extorsionó con dinero. Liu le advirtió que me detendrían si denunciaba el chantaje y acoso de él. Para cuando me enteré de esto, mi esposo ya le había dado dos mil yuanes.

Durante un examen hospitalario en 2013, descubrimos que mi esposo tenía algunos problemas de salud. Los resultados mostraron que tenía muchos problemas crónicos, como presión arterial alta, hígado graso, infarto lacunar e hidrocefalia. También tenía una hernia de disco lumbar, que es por lo que inicialmente fuimos al hospital para revisarlo.

Tuvo un derrame cerebral en mayo de 2016 y la mitad de su cuerpo quedó paralizado. Además, su hidrocefalia causó atrofia cerebral y desarrolló demencia. A menudo se rascaba el cuero cabelludo con los dedos, y el cuero cabelludo sangraba constantemente. Aunque su apoplejía estaba bajo control, su hidrocefalia no pudo curarse.

Se cayó el 13 de diciembre de 2016 y se fracturó una vértebra. Después de estar acostado en la cama durante dos meses, pudo sentarse. Luego, se cayó de la cama y se lesionó otras áreas de la columna vertebral. Después de estar de nuevo postrado en cama durante dos meses, pudo caminar solo. Un par de practicantes y yo lo vimos y nos alegramos por él. Sin embargo, de repente se cayó frente a nosotros y se lastimó otra vértebra. Lo llevamos al hospital, y el doctor dijo que no había esperanzas para él y que quedaría postrado en cama el resto de su vida.

Uno de los practicantes me dijo: "Es la primera vez que vengo a tu casa y se cayó. ¡Parece que todavía tengo problemas en mi cultivación!".

Me sorprendió lo que dijo. Entonces recordé que el Maestro dijo en Exponiendo el Fa en el Fahui de Australia:

“…cuando una persona práctica, toda la familia se beneficia…”.

Pensé: "Lo que dijo tiene sentido". Por lo tanto, le dije al practicante: "Si tienes algunas deficiencias, las mías son mucho más grandes que las tuyas".

Reflexionando sobre las enfermedades y heridas de mi esposo, comprendí claramente que tenía muchos problemas en mi cultivación. Con la ayuda de otros practicantes, empecé a estudiar diligentemente el Fa y encontré muchas lagunas, que habían sido peligrosas al ignorarlas durante tanto tiempo.

Me alarmé al ver que tenía tantas deficiencias. ¿Cómo se podría beneficiar cualquier miembro de la familia si yo no me cultivo bien? Me sentía realmente apenada con el Maestro y con mi marido.

Le dije a mi esposo: "Tú has sufrido mucho porque no me he cultivado bien. Pidamos juntos perdón del Maestro”.

Por lo tanto, juntamos ambas manos frente a nuestros pechos (Heshi) y pedimos el perdón y la salvación del Maestro.

El 17 de junio de 2017, mi esposo se volvió a caer.

Cuatro días después, se sentó en la cama y quiso levantarse. Le tomé las manos y lo ayudé a ponerse de pie. Fue un milagro. Empezó a caminar. Seguí recitando:"¡Gracias, Maestro! ¡Gracias Maestro!".

Mi esposo gritó: "Falun Dafa es bueno"“Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno! ¡Gracias, Maestro!".

Mi esposo entonces tiró a la basura más de 10 tipos de medicamentos que solía tomar. Empezó a practicar Falun Dafa, clarificó la verdad a la gente, y envió pensamientos rectos. Hasta ahora, ha ayudado a tres personas a renunciar al partido comunista chino y a sus asociaciones afiliadas.

Hace unos días, a mi marido le hicieron un examen físico. Su hígado graso había desaparecido, su presión arterial era normal, y la hernia de disco lumbar había desaparecido; todo sin tomar ningún medicamento.

Su salud ha vuelto a la normalidad ahora, excepto que camina un poco lento. Mi esposo experimentó la naturaleza milagrosa de Falun Dafa.