(Minghui.org) Antes de practicar Falun Dafa, tenía mal temperamento y era grosera e irrespetuosa con los demás. Incluso llegué a abofetear a mi suegra y atacar a mi marido con un cuchillo y también con un bastón.

Después de leer Zhuan Falun en agosto de 2005, me sentí atraída por sus principios: “Verdad-Benevolencia-Tolerancia”. Seguí estas enseñanzas y me convertí en una persona mejor. Además, me recuperé de un quiste uterino y una infección de hongos.

Mi marido estaba envenenado por la propaganda difamatoria del régimen contra Falun Dafa y, con frecuencia, me insultaba y golpeaba salvajemente. Cuando yo salía, se emborrachaba y me espiaba. En una ocasión cuando fui a casa de un compañero practicante, intentó pelearse con él y lo amenazó con un cuchillo.

Una noche volvió a casa tarde, me sacó de la cama y me exigió el divorcio. Decía que ya no podía estar más conmigo y me preguntó qué iba a hacer.

Me mantuve muy calmada, esa fue la primera vez que sentí realmente compasión hacia él. Lloré y me preguntó por qué. Le respondí que era porque antes él era muy tolerante conmigo, incluso aunque me comportara salvajemente.

Le dije: “Desde que me volví una practicante, la persecución a Falun Dafa ha ejercido una presión tremenda en ti. Mi Maestro quiere que sea una persona amable y dulce pero he fallado. Fuiste incapaz de ver la grandeza de la práctica por mi culpa. Si quieres el divorcio, lo aceptaré. No quiero ningún dinero tuyo. Deseo que tengas una buena vida y que encuentres a alguien que te guste”.

Entonces, le sugerí que debería dejar de beber y de fumar, que esos eran malos hábitos para él.

Le dije: “Procura también no visitar esos lugares sombríos, porque ejercerán una influencia negativa en los niños”.

Continué: “De todas formas, preferiría seguir casada, si todavía me quieres. Lo que pasó, pasó. Continuaré practicando Falun Dafa porque mi vida carecería de valor si no lo hiciera”.

Era la primera vez que me escuchaba con tranquilidad. Incluso se conmovió hasta las lágrimas. Poco después, dejó de beber en exceso y de fumar.

Acosada por la policía

En mayo del 2015, cinco practicantes de mi localidad demandaron a Jiang Zemin, ex jefe del régimen comunista chino, por iniciar la persecución contra Falun Dafa. La policía arrestó a tres de estas practicantes en agosto y las torturó en uno de los centros de lavado de cerebro. La policía vino a mi casa tres veces para arrestarme, pero yo no me encontraba en casa. Saquearon mi hogar y confiscaron mis libros de Falun Dafa.

Viendo que la policía me acosaba con frecuencia, mi marido y los maridos de las tres practicantes arrestadas fueron a la oficina de los funcionarios de la localidad.

Le dijeron: “Nos han sobornado con bebidas y con dinero cuando querían ser nombrados funcionarios. Ahora, que tienen esa posición, ni siquiera pueden proteger a unas mujeres. Si mi esposa es arrestada y mi vida se volviera miserable, tú tampoco tendrías una vida cómoda. Si quieres vivir cómodamente, asegúrate de que no arresten a mi esposa”.

La policía no volvió a acosarme.

Comprendí que si seguimos los principios que el Maestro nos enseña, esto provocará cambios positivos en la gente que nos rodea y será salvada.