(Minghui.org) Más de 200.000 practicantes de Falun Gong han presentado demandas criminales contra Jiang Zemin desde mayo de 2015, requiriendo que el alto tribunal de China declare al anterior dictador chino responsable por comenzar la brutal persecución a Falun Gong. En los últimos 17 años, estos ciudadanos respetuosos con la ley han sido gravemente perseguidos por sus creencias, constantemente sometidos a abusos, incluidos arrestos arbitrarios, detención y tortura.

Más de un millón de personas no practicantes también han firmado peticiones apoyando la demanda contra Jiang.

Desde el pasado año a este mes de junio, más de 6120 personas de tres ciudades han firmado las peticiones. Los apoyos incluyen 2086 residentes de la ciudad de Chengde, provincia de Hebei; 2300 de la ciudad de Qixia, provincia de Shandong; y 1734 de la ciudad de Mianyang, provincia de Sichuan. Estos números son sorprendentemente, del entorno de represión de China continental.

Mucha gente describía a Jiang como una persona “que no había hecho nunca nada bueno”. Pensaban que debía haber sido arrestado hace mucho tiempo.

Las enfermedades crónicas de una mujer desaparecieron meses después de comenzar ha realizar los ejercicios de Falun Gong. “Jiang prohibió una gran práctica y persiguió a estas maravillosas personas. Debemos denunciarle”. Dijo.

Un profesor retirado coincidía: “Persigue a buenas personas y ha ocasionado un daño irreparable a nuestro país".