Visto en otra dimensión al estudiar el Fa

(Minghui.org) Shifu nos ha dicho una y otra vez que estudiemos el Fa. Antes de la persecución, Shifu dijo:

“Les digo a todos, deben leer más el libro, lean más el libro, y lean más el libro; deben leer mucho el libro”. (Exponiendo el Fa en el Fahui de Suiza)

Después de comenzada la persecución, Shifu nos recordó:

“Les digo a todos que estudien más el Fa, ah… estudien el Fa, estudien el Fa, estudien el Fa”. (Exponiendo el Fa en el Fahui de Chicago, 2004)

Debemos realmente calmar nuestras mentes cuando estudiamos el Fa. Solo al estudiar el fa con una mente calma estamos verdaderamente obteniendo el Fa. Y cuando eso sucede es algo realmente maravilloso; lo he vivido muchas veces.

Estudiando Zhuan Falun

He visto muchas escenas hermosas al estudiar Zhuan Falun, como las que cuento a continuación:

1. Seres divinos detrás de cada palabra

Una vez, mientras estudiaba el Fa, vi a seres divinos detrás de cada palabra. Mientras continuaba observando las palabras, me di cuenta que cada trazo estaba hecho de seres divinos que sostenían varias herramientas.

A medida que mi mente se volvía más calma, vi algunos párrafos que mostraban imágenes de Fo y otros párrafos que mostraban imágenes de Daos. En otra oportunidad, vi una página entera llena de una inmensurable cantidad de Fo, Dao, y dioses.

2. Paraísos celestiales

A veces mientras estudio el Fa aparece un Falun que se expande instantáneamente para volverse tan grande como u universo. Una vez, de repente encontré que el espacio entre cada carácter chino se ampliaba, y me llevó un tiempo ir de una letra a la otra. Sentí que no leía cada palabra, sino más bien, que observaba a un universo tras otro, y a la estructura y seres dentro.

En otra oportunidad vi algo magnificente —palacios majestuosos y encumbrados, y seres celestiales tranquilos. Un niño poniendo frutas en una mesa, y un Dao saludándome, invitándome a probar las frutas, se sienta a comer luego de que yo haga un suave gesto con la cabeza declinando su oferta.

Otra vez cuando vi que las palabras gradualmente se tornaban en racimos de energía transparentes. Estos racimos de energía se combinaron para convertirse en una corriente de energía. Los rayos de las corrientes confortaron mis ojos al leer.

Las corrientes a veces conformaban pequeños ríos con árboles a ambos lados.

Una vez, un monje bajó volando desde un árbol y me saludó, mientras un fénix se elevó volando desde el río para tocar el xiao, la flauta china. También vi un Pegaso dorado y un elefante dorado sonriéndome. Compañeros practicantes me dijeron que yo podría estar viendo escenas en mi paraíso celestial.

3. Palabras que cambian de colores

Cuando estudio el Fa, a veces el libro mismo parece ser de diferentes colores. Al mirar a otros practicantes, me doy cuenta que sus libros también son de diferentes colores. Los colores cambian cada vez que estudiamos el Fa.

Una vez, cada página de Zhuan Falun comenzó a cambiar de colores a medida que leía. Los colores cambiaron cinco o seis veces al terminar cada lección.

4. Sentada en una cascara de huevo

En otra oportunidad, vi a un joven monje saliendo de las palabras del libro y estirándose como “Mile shenyao” (Mile estira la cintura) del primer ejercicio. La inocencia de su gesto me conmovió.

Otra vez, sentí que estaba sentada en una cascara de huevo y todo a mi alrededor estaba detenido. Cuando logro calmar mi mente para estudiar el Fa, los seres divinos y los milagros detrás de las palabras se despliegan.

Estudiar el Fa también me da distintas sensaciones físicas. A medida que leía, en otra oportunidad me di cuenta que las palabras se habían alienado y caminaban en dirección a mis oídos —estaba usando mis oídos para estudiar el Fa. Otra vez, las palabras ingresaron a mi cuerpo por mi mano y mi corazón. Y otra vez sentí que mi cabeza estaba vacía, como si hubiese desaparecido.

Estudiando Hong Yin los dibujos cobran vida

Estudio Hong Yin seguido. Después de leer cada poema miro los dibujos y veo escenas maravillosas en ellos. Vi seres iluminados portando instrumentos del Fa, y supe innatamente los nombres de estos seres y el propósito de los instrumentos del Fa.

Hay un dibujo de una flor en el libro. Mientras estudiaba, la flor cobró vida y perdió sus pétalos para revelar otra flor aun mas bella.

La flor sonrió y me dijo: “¡Mira nuevamente!”. Y reveló otra espiral de pétalos. Repitió esto tres o cuatro veces y pude ver un paraíso celestial.

En Hong Yin II un ser celestial estaba eliminando el mal mientras yo enviaba pensamientos rectos.

Un dibujo en Hong Yin III reveló una enorme flor de loto dorada luego de que desapareciera el ser iluminado que estaba sentado sobre ella. La gigantesca flor se convirtió en miles de flores pequeñas. Volaban a una velocidad increíble y desaparecían también. Luego de eso, apareció el paraíso celestial del mundo de un Fo.

Desde una montaña fluía agua dorada, y peces dorados saltaban del agua. Falun de varios tamaños giraban en el aire. Vi un trono esplendoroso que estaba vacío, rodeado de guardias del Fa.

Me miraron con los ojos brillosos. Un guardia envió un pensamiento: “¡Hemos esperado mucho tiempo por ti!”. Casi se me caen las lágrimas al escuchar esto.

Luego de la publicación de Hong Yin IV, cada persona en cada dibujo parecía estar bailando con muchas personas. Parecía como si yo estuviese observando un espectáculo al leer.

Cuando leí los poemas escritos por Shifu a la clase de danza de Shen Yun, estos practicantes aparecieron frente a mi. Vi sus sonrisas puras y hermosas. Aquellas letras que no tienen dibujo tienen a un ser divino que canta parado detrás de las letras.

Los saludos de los practicantes reflejan sus verdaderas imágenes

Cuando estudio otras lecciones y leo los saludos enviados por practicantes por todo el mundo, veo las imágenes humanas de estos practicantes. Al mirar más, las imágenes se transforman en distintos seres divinos –con la apariencia de dioses tanto asiáticos como occidentales, y las imágenes verdaderas de los practicantes.

Una mente errante no debe tomarse con ligereza

Vi que cuando los practicantes se distraen o se duermen durante el estudio del Fa, los seres divinos toman notas; no es un asunto menor.

Shifu dijo:

“Todos ustedes saben el estado mental que debe tener una persona para poder ver los principios del Fa; ustedes lo saben sin que tenga que decirles mucho. Cuando sus ojos leen el Fa, pero su mente no está en el Fa, piénsenlo: ¿no están leyendo en vano? ¿Para quién están leyendo? Ustedes mismos no están aprendiendo el Fa. ¿No les he dicho que deben asegurarse de obtener verdaderamente el gong ustedes mismos? Por lo tanto, si sus pensamientos no están en el Fa mientras estudian el Fa, ¿para quién la estudian? No les digo esto para criticarlos; sólo les estoy diciendo que ésta es realmente una situación muy seria. Así que no importa cuán ocupados estén, cuando estudien el Fa, deben poner a un lado todos los demás pensamientos. No piensen en otras cosas en absoluto; únicamente estudien el Fa. Tal vez mientras estudian el Fa, todos los asuntos en que han estado pensando se resuelvan, ya que detrás de cada palabra hay fo, dao y dioses. ¿Cómo creen que ellos no puedan saber exactamente lo que desean ustedes resolver y lo que ansían realizar en ese momento? Entonces, ¿cómo no van a decírselo? Pero hay algo más: ustedes deben alcanzar el estado de estudiar el Fa sin el apego a la búsqueda. Ustedes ya entendieron esto hace mucho tiempo; no pueden leer el Fa con el apego de resolver sus problemas. Sólo léanlo con calma y el efecto seguramente será excelente. Por eso, cuando estudian el Fa no lo hagan de forma automática. Al leerlo, tienen que estar en calma y estudiarlo verdaderamente. No permitan que el pensamiento deambule; una vez que el pensamiento deambula, están estudiando en vano. Si miramos esto desde otra perspectiva, mientras estudian el Fa y no están en lo que están, no solamente es un problema de hacerlo de forma automática, sino también de que la persona que está estudiando el Fa en realidad no le está mostrando mucho respeto. ¿Cómo entonces podría revelarse el Fa? Así que desde esta perspectiva, pienso que todos deben estar en calma cuando estudian el Fa, y cuando están ocupados durante el período de estudio, recuerden que deben mantener el pensamiento firme...” (“Exponiendo el Fa en el Fahui de Florida, Estados Unidos”)

En mi grupo de estudio del Fa, me doy cuenta que algunos practicantes no tienen la mente en el Fa: algunos leen rápido, otros están pensando en sus tareas hogareñas, y otros están pensando en qué verduras tienen que comprar.

Hay otros que esperan terminar rápido la lectura para poder irse. Estos practicantes se ponen ansiosos cuando otros leen lento y no quieren dejarlos leer.

Algunos practicantes piensan sobre cómo discutir con las personas cuando se enfrentan ante conflictos. Otros, leen con acentos o inflexiones exageradas, porque quieren demostrar que leen bien el Fa.

También hay practicantes que piensan: “Este párrafo habla sobre aquel practicante”. Pero estudiar el Fa y cultivarse debiera ayudarnos a mirarnos internamente, y no compararnos con otros.

Compañeros practicantes, debemos atesorar Dafa y escuchar las palabras de Shifu; calmemos nuestras mentes y estudiemos el Fa más diligentemente.