“Paz interior, salud y felicidad. Estas son las cosas que me dio Falun Gong”

(Minghui.org) El mes pasado, mi amiga Ann me preguntó si estaba dispuesto a compartir mi historia en el sitio web Minghui. Es un placer y un honor hacerlo. Quiero que más gente sepa sobre Falun Gong. Cuando estaba en el punto más bajo de vida, mi mejor amiga Ann me presentó Falun Gong. Cambió mi vida fundamentalmente y me mostró un camino brillante.

En 2012 me diagnosticaron cáncer de vejiga en la etapa inicial. Entré en shock y no pude aceptarlo. No había palabras para expresar mi preocupación. Sentí que caí en una oscuridad sin fondo. Me negué a hablar con la gente, hasta que un día Ann me llamó. Colapsé en el teléfono y lloré incontrolablemente.

Vino a toda prisa a mi casa. Lloró conmigo, y luego me dijo: “Es mi culpa. Si lo hubiera hecho mejor, no tendrías que sufrir así”. Mi mente estaba caótica y no le presté mucha atención a lo que dijo, porque no entendí a qué se refería.

Durante ese periodo, corté mis comunicaciones con casi todos, excepto con mis familiares cercanos y Ann. No quería hacer nada. Mi corazón estaba irritable. Ann venía a menudo, y me hablaba sobre Falun Gong. Cada vez que venía, me contaba historias de personas que se habían beneficiado de practicar Falun Gong. Mirando su radiante y pacífico rostro, me conmoví y pensé en practicarlo.

Ann me trajo los libros de Falun gong y la música de los ejercicios. Pero como estaba ansioso, no logré leer los libros calmadamente. Busqué otras terapias e intenté todo tipo de tratamientos, los cuales no ayudaron. Me puse más irritable.

Ann me dijo: “¿Por qué no pruebas con los ejercicios? Tal vez no solo mejora tu salud, sino que también te calman”. Intenté y mi situación cambió gradualmente.

Cuando pude sentir los cambios que los ejercicios y la meditación me estaba trayendo, mi humor también cambió para mejor. Desarrollé confianza de que me podía mejorar. También les dije a otros sobre los beneficios de la meditación.

Ann me trajo la grabación de audio con las enseñanzas del Maestro Li Hongzhi (el fundador de Falun Dafa). Escuché las enseñanzas una y otra vez. Fui ahí cuando entendí por qué tanta gente se niega a renunciar a Falun Gong, incluso bajo tan severa persecución en China. Los principios de Falun Gong son Verdad-Benevolencia-Tolerancia, enseña a sus practicantes cómo vivir según esos principios y cómo ser una buena persona. Ser una buena persona no te hace perder nada. En vez, las recompensas son inconmensurables.

Aprendí que, durante los conflictos con otras personas, siempre tenemos que mirar nuestras propias fallas, y siempre tenemos que considerar a otros. También aprendí que tenemos que manejar nuestras vidas siguiendo el curso de la naturaleza, y no tener muchas búsquedas. Me di cuenta de que si entendemos lo que es la verdadera felicidad, seremos capaces de dejar de lado nuestros apegos a la reputación y ganancia material.

Después de llegar a estos entendimientos en Falun Gong, intenté cambiar mi corazón. Mi corazón está cada vez más calmado. Finalmente, el cáncer desapareció y me recuperé completamente.

Ahora, tengo un entendimiento diferente de la vida. Muchas veces comparto mis entendimientos con mis amigos, y todos están de acuerdo que soy una persona diferente.

De hecho, toda mi familia se ha beneficiado también, así que ellos también aprecian las enseñanzas de Falun Gong. Estoy tan agradecido con el Maestro Li Hongzhi por esta práctica tan maravillosa.

Me he beneficiado directamente de Falun Gong. Mirando alrededor, veo tanta gente sufriendo física y mentalmente, mucho de lo cual es causado por ellos mismos. Quiero que más gente sea afortunada como yo –que aprendan las enseñanzas de Falun Gong y encuentren el significado real de la vida. A medida que pasa el tiempo, este pensamiento se ha fortalecido.

Aunque aún no soy un practicante real de Falun Gong, he aprendido los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Seguiré estos principios, y creo que nunca más estaré perdido. Ahora, tengo paz interior, salud y soy feliz. Estas son las cosas que me dio Falun Gong. Agradezco profunda y sinceramente al Maestro Li Hongzhi.

Mi nombre significa “flores de ciruelo” en chino. Soy una flor de ciruelo que ha luchado en el severo invierno. Bajo la densa capa de nieve, pensé que nunca más saldría de allí. Pero tuve la suerte de encontrar Falun Gong. Con la guía de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, he atravesado el invierno. Mi enfermedad fue una bendición disfrazada. Estoy transitando la primavera de una nueva vida.