(Minghui.org) Hay un problema que se ha hecho más evidente entre algunos practicantes. Estos practicantes constantemente aclaran la verdad sobre Falun Dafa a la gente. Pero se olvidan de cultivarse diligentemente.

En tiempos de conflictos en casa o el trabajo, no miran adentro para encontrar sus propias falencias, sino que señalan a otros. Esto empeora el estado de su entorno social. Por momentos, sus quejas sobre otros aumentan desenfrenadamente.

Este es especialmente el asunto con practicantes que ya han sido arrestados y detenidos. No miran dentro de sí para encontrar los apegos que los llevaron a ser perseguidos. Estos practicantes aún tienen apegos como rencor, competitividad, y envidia. Dichos apegos crean muchos problemas para su cultivación y en las actividades de rectificación del Fa.

Actitud dañina

Mi ambiente de trabajo ha apoyado bastante mi práctica de Dafa ya que continuamente hablo con mis colegas y supervisores sobre la persecución.

Otra practicante fue contratada hace casi un año, pero la mayoría de los colegas no saben que practica Dafa. Hubo algunos problemas con sus métodos de trabajo y resultados. No acepta la crítica constructiva, e insiste en hacer las cosas a su manera. Considera que tiene la razón, es mandona y se niega a cooperar. Algunos colegas incluso derraman lágrimas al trabajar con ella. Otros temen hablar con ella cuando tienen una opinión diferente. Además, a menudo llega tarde al trabajo y siempre tiene excusas varias. Su comportamiento ha traído como resultado una impresión negativa entre sus compañeros de trabajo.

Intenté hablar con ella varias veces, pero siempre fracasé. Su ego es muy fuerte. Se defiende criticando a otros si opinan diferente. Pero también me di cuenta de que tenía una actitud agresiva. Por lo tanto, mi intento por hablar con ella terminaba en una discusión entre ambos.

Ignorando el comportamiento caprichoso de los practicantes

“Desde el comienzo supe que esa señora tenía tu misma creencia”, dijo mi supervisor. “Sólo por esto, he estado esperando que mejore. Si fuera una persona común la habría despedido hace tiempo. No la he denunciado tampoco porque quiero protegerla”.

Sus palabras me hicieron llorar. Me conmovió que él, una persona común, tuviera pensamientos tan rectos hacia Dafa. Pero también tenía vergüenza de que una persona común quedara al servicio de un practicante de Dafa.

Continuó: “Tú también eres terco a veces, pero puedes reflexionar. Probablemente reflexionas mucho antes que ella. Ustedes, los practicantes son francos y directos. Así es como debería ser la gente. Pero a veces pienso, si la gente con tu creencia tienen todos una fuerte voluntad o no”.

Le dije que era consciente de mi agresividad y mi fuerte ego, pero que no me encontraba entre los practicantes que se cultivaban bien.

“Es como un maestro que tiene 1.000 estudiantes, y 998 son excelentes, pero 2 no lo son”, dijo. “Usted se ha encontrado con estos dos estudiantes que no son tan diligentes, y la impresión del Maestro no debe verse afectada por estos dos estudiantes. La fortaleza de mi conciencia me ha ayudado a soportar la presión de la persecución, pero también parece que ha tenido un impacto negativo entre la gente común”.

Me respondió: “No, mi entendimiento de vuestra fe no está afectada por esas cosas. Le dije: “Tu eres un hombre sabio. Probablemente entrarás en la cultivación de Dafa también”.

Un buen ambiente trae la peor consecuencia

Todos mis colegas apoyan y son amables conmigo y con mi creencia, gracias al poder de Dafa. Pero a veces me pregunto si mis colegas habrían practicado si me hubiera cultivado mejor y hubiera sido un mejor ejemplo de lo que es un practicante de Dafa.

Por la impresión y el entendimiento positivo de mi supervisor hacia Dafa, varios practicantes han sido contratados en mi lugar de trabajo con los años.

Lamentablemente, algunos practicantes eran tercos, insistían en sus propias opiniones, discutían con los supervisores y colegas sobre asuntos laborales, y creían que hacían lo correcto al pelear con las autoridades. Su comportamiento no sólo causaba problemas en el trabajo, sino que también creaban obstáculos para aclarar la verdad sobre Dafa a la gente común.

Según mi opinión, este tipo de practicante a menudo hacía un mejor trabajo en un ambiente destructivo en donde varias formas de persecución tenían lugar pero en un buen ambiente, donde apoyan a Dafa, parecían olvidarse de auto disciplinarse. A veces, un buen ambiente puede resultar engañoso de algún modo.

Es imperioso cambiar el comportamiento

Antes de practicar Dafa era arrogante, egocéntrico, y me enojaba con facilidad. Aunque estos rasgos se han suavizado, aún no los he cultivado y eliminado por completo.

Hace unos años, cuando estuve encarcelado en un campo de trabajo forzado, no podía enojarme. Pensaba solamente en el Fa y en salvar seres conscientes, y mi compasión se volvió tan enorme y fuerte que sólo pensaba en salvar a los agentes y prisioneros que habían sido engañados por la propaganda del régimen comunista.

Poco a poco, aprendí a pensar en otros primero ante cualquier circunstancia, incluyendo cuando estaba en grandes peligros. “Dafa es la inteligencia y la sabiduría del Creador” (“Lunyu”, de Zhuan Falun), no tenía palabras para describir mi asombro, gratitud, respeto y alegría hacia Dafa.

Espero que otros practicantes como yo, que son egocéntricos, agresivos, y testarudos, se cultiven verdadera y diligentemente en Dafa, mirando hacia adentro para poder cumplir mejor con nuestra responsabilidad de salvar seres conscientes.