(Minghui.org) 3150 ciudadanos de la ciudad de Ningde en la provincia de Fujian firmaron denuncias contra el ex líder chino Jiang Zemin por lanzar la brutal persecución de Falun Gong, causando severos daños y pérdidas a millones de ciudadanos respetuosos de la ley.

Ciudadanos de Ningde firmaron denuncias contra Jiang Zemin

A continuación algunos comentarios de individuos que firmaron las denuncias contra Jiang.

“Mi hija se benefició mucho después de practicar Falun Gong, pero la llevaron a un campo de trabajo forzado por distribuir materiales de información de la práctica. Jiang Zemin destruyó su familia. Debe ser llevado a la justicia”, dijo el señor Xu.

“Jiang Zemin es detestable. Engañó a muchas personas haciendo que  estén en contra de Falun Gong”, comentó la señora Ye.

“El fraude de la “auto-inmolación” en la Plaza Tiananmen embaucó a mucha gente. Resultó una puesta en escena”, manifestó la señora Xu.

“Muchos persiguieron a ciegas a Falun Gong después de ser engañados por Jiang Zemin. Él es peor que una bestia ", dijo la señora Xiao.

“Sufrí hambre durante los años de gobierno del partido comunista. Luego fui forzado a pagar más de un millón de yuanes a los funcionarios después de ganar algún dinero. Jiang fue el líder del PCCh. Todos deberían demandarlo”, contó el señor Qian, un hombre de 82 años.

Las cuatro generaciones de la familia del señor Xu firmaron una denuncia contra Jiang Zemin. “Toda la sociedad se corrompió bajo su poder. Ladrones, bandidos y matones estaban por todos lados”, agregó el señor Xu.

Antecedentes

En 1999, Jiang Zemin, como jefe del partido comunista chino, ignoró a otros miembros permanentes del comité del politburó y lanzó la violenta represión a Falun Gong.

La persecución ha llevado a la muerte a muchos practicantes de Falun Gong en los últimos 16 años. Muchos más han sido torturados por su creencia e incluso asesinados por sus órganos. Jiang Zemin es directamente responsable por el comienzo y continuidad de la brutal persecución.

Bajo su dirección personal, el partido comunista chino estableció un órgano ilegal de seguridad, la “oficina 610”, el 10 de junio de 1999. La organización ignora las fuerzas policiales y el sistema judicial al llevar adelante las directivas sobre Falun Gong: arruinar su reputación, cortar sus recursos financieros, y destruirlos físicamente.

La ley china permite a los ciudadanos ser demandantes en causas penales, y muchos practicantes están ahora ejerciendo ese derecho presentando demandas penales contra el ex dictador.