(Minghui.org) Un compañero practicante recientemente me sugirió que fuéramos al cuartel general de la policía y les habláramos sobre Falun Dafa. Junto a otros practicantes hablaríamos con la policía directamente, más practicantes serian necesarios para enviar fuertes pensamientos rectos en el exterior del edificio para garantizar un resultado satisfactorio.

El coordinador lo notificó a los practicantes de nuestra área, y el día establecido para la visita. Era una buena oportunidad para que nuestro grupo trabajara como un equipo: seis practicantes, incluyéndome a mi, estaríamos enviando pensamientos rectos cerca del cuartel de la policía para eliminar la interferencia y mejorar nuestros esfuerzos generales.

Un nuevo entendimiento de compasión

Llegamos en dos coches y aparcamos a una corta distancia del edificio. Comenzamos a enviar pensamientos rectos para eliminar todos los elementos malvados que manipulaban a la policía para perseguir a Falun Gong.

Después de un corto tiempo, el otro coche se movió y aparcó cerca de la puerta trasera de la comisaria. El conductor en mi coche estaba conmovido y rápidamente estacionó nuestro coche a la derecha de la entrada principal. Me di cuenta que el xinxing de los conductores había mejorado.

Frente a varias docenas de ventanas y muchos policías en la entrada, Me mantuve enviando fuertes pensamientos rectos mientras repetía en mi mente, “¡Seres conscientes, Dafa dizis han venido a rescataros hoy. Os ofrecemos a todos la oportunidad de saber la verdad y ser salvados. Por favor no pierdan esta oportunidad!”

Has cometido muchos pecados contra los discípulos de Falun Gong. ¿Cómo podrás pagarlo alguna vez? ¿Qué harás cuando el Fa rectifique el mundo humano?, por favor, trata a los discípulos amablemente y dar un cambio para pagar vuestro karma!”

Teniendo este pensamiento experimenté por primera vez una simpatía real por la policía. Me sentí triste por el trágico futuro que les esperaba si no podía salvarlos.

Me mantuve enviando pensamientos rectos y sentí como mi corazón cambiaba. Me di cuenta que los policías no eran nada más que seres conscientes que habían jugado un papel negativo persiguiéndonos todos estos años. ¿Porque?¡Porque no nos cultivábamos bien!¡No los vimos como nuestros propios seres conscientes! En su lugar los tratamos como nuestros enemigos y los evitamos con miedo, odio y nociones humanas para protegernos.

Si esa comisaría de policía era eliminada por la rectificación del Fa, era porque no lo habíamos hecho bien para salvarlos. Me sentía muy triste, al mismo tiempo, sentía como se estaba expandiendo el alcance de mi compasión y podía salvar a todas las personas del edificio. No eran policías o mala gente ninguno, eran seres conscientes que necesitaban ser salvados.

En medio de esta experiencia recordé el título de una experiencia de cultivación de un practicante, “Estoy dispuesto a llevar a los seres conscientes en la palma de mi mano”.

Me caían lagrimas, y dije al Maestro en mi mente, “Estaba equivocado. Por favor danos una oportunidad más y dales una oportunidad más a estos seres conscientes para ser salvados. Son nuestros seres conscientes; debemos llevarlos a sus hogares”.

Mis nociones humanas se disolvieron, lloré por ellos. En mi corazón, sabía que podía salvarlos, y deseé salvarles obteniendo un profundo entendimiento y verdadera comprensión.

Estar siempre en el Fa

Recientemente, compartí mi experiencia con otros practicantes. Me ayudo a entender mejor un principio: ¡Pensamos que somos parte del Fa, pero no ponemos al Fa en primer lugar y siempre nos encontramos con tribulaciones! ¿Somos verdaderamente responsables hacia el Fa y hacia todos los seres consientes? Debemos como un solo cuerpo, estar enfocados en el Fa para verdaderamente ser efectivos en hacer las tres cosas.

El Maestro nos dijo,

“…¿qué es un fo? “Rulai” es lo que los humanos llaman a alguien que ha venido con la verdad y el poder de hacer lo que quiera, mientras que los verdaderos fo son guardianes del cosmos y son responsables de todos los elementos rectos en el cosmos”. (“Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de los Estados Unidos”)

Me pregunté, ¿”Estaba siendo verdaderamente responsable por los elementos rectos en el cosmos?¿Me deje llevar cuando nuestro equipo necesitaba mi cooperación? Me ofrecí para armonizar a nuestro equipo de negocios?¿Hice los ejercicios de la mañana?

Muchas veces, elegía dormir primero, preparar las tareas diarias, y me protegía cuando enfrentaba la persecución. Encontraba muchas excusas para retrasar la salvación de la gente.

El Maestro dijo:

“¿Sabes que para salvarte el Fo una vez mendigo por comida entre la gente común? Hoy día, una vez más he abierto la gran puerta y les enseño este Dafa para salvarles de nuevo. Nunca he sentido amargura por las incontables adversidades que he padecido. Entonces, ¿qué tienes que aún no puedes renunciar? ¿Podrás llevarte contigo al reino del Cielo las cosas que en lo profundo de tu corazón no puedes renunciar?” (“Cultivación genuina” de Escrituras esenciales para mayor avance”)

El Maestro nos concedió el más sagrado título en el cosmos- Discípulos de Dafa del periodo de la rectificación del Fa. Muchas veces mantuve mis nociones humanas y no pude abandonarlas. No valoré está valiosa oportunidad de cultivación. Al pensar sobre todas estas personas que no he ayudado a salvar, me siento triste y avergonzado ante el Maestro.

Escribí esto con la sincera esperanza que los compañeros practicantes puedan ser más diligentes y mas cuidadosos sobre como andamos los últimos pasos de nuestro camino de cultivación. Un practicante no debe comportarse como yo, perdiendo así tantas oportunidades antes de finalmente decidir mirar dentro.

El Maestro nos dijo que examináramos en que nos quedábamos cortos una y otra vez. No podemos permitirnos olvidar que debemos hacer las tres cosas bien y ser verdaderos en nuestra cultivación y con el Maestro.