(Minghui.org) Un médico de la ciudad de Sanhe, provincia de Hebei, que aún está con libertad condicional por su fe, acusa al ex dictador chino Jiang Zemin de organizar la persecución de Falun Gong, la que resultó en repetidos arrestos a él y a su esposa.

El 22 de agosto de 2014, el doctor Kang Jingtai fue detenido junto con otras tres personas, por enviar mensajes de texto grupales detallando la persecución a Falun Gong. Más tarde lo condenaron a tres años de prisión con tres años de libertad condicional, lo que significa que ser encarcelado por tres años si viola la libertad condicional.

Su madre, desvastada, murió 10 días después del arresto.

Doctor Kang Jingtai.

En 2000, antes de su última detención, lo condenaron a dos años de trabajo forzado, pocas semanas después que la esposa, la señora Fang Chunyan, diera a luz a su hijo. La mujer, una maestra de escuela y también practicante de Falun Gong, fue hostigada repetidamente durante la licencia por maternidad. Más tarde la detuvieron en varias ocasiones por negarse a renunciar a su fe.

Hacia fines de 2001, cuando fue liberado, se encontró con que lo habían despedido del Hospital de Medicina China de la ciudad de Sanhe. Debido a que los potenciales empleadores evitaban tomar practicantes por temor a ser implicados, abrió su propia clínica.

El 27 de octubre de 2013 su padre anciano falleció, al no poder superar la preocupación por las detenciones y arrestos ilegales a su hijo.

El médico de 43 años, la esposa e hijo adolescente siguen viviendo en el terror, preguntándose cuándo pueden ser detenidos nuevamente.

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Antecedentes

En 1999, Jiang Zemin, como jefe del partido comunista chino, ignoró a otros miembros permanentes del comité del politburó y lanzó la violenta represión a Falun Gong.

La persecución ha llevado a la muerte a muchos practicantes de Falun Gong en los últimos 16 años. Muchos más han sido torturados por su creencia e incluso asesinados por sus órganos. Jiang Zemin es directamente responsable por el comienzo y continuidad de la brutal persecución.

Bajo su dirección personal, el partido comunista chino estableció un órgano ilegal de seguridad, la “oficina 610”, el 10 de junio de 1999. La organización ignora las fuerzas policiales y el sistema judicial al llevar adelante las directivas sobre Falun Gong: arruinar su reputación, cortar sus recursos financieros, y destruirlos físicamente.

La ley china permite a los ciudadanos ser demandantes en causas penales, y muchos practicantes están ahora ejerciendo ese derecho presentando demandas penales contra el ex dictador.