(Minghui.org) La práctica de la cultivación nos requiere mantener un corazón puro para poder retornar a nuestro origen. Esto significa cultivar la benevolencia, tolerancia y no estar apegados a las cosas del mundo terrenal.

A través del estudio de los principios del Fa, llegué a entender que a la formación de  nuestra existencia y estado de fruto en otras dimensiones los completa el Maestro. Eso significa, que debemos tener una profunda fe en Él. Mientras creamos que nuestro ser verdadero es puro y compasivo, seremos capaces constantemente de mejorar en nuestra cultivación.

Examinándonos en cualquier circunstancia y momento, podremos asimilarnos a nuestro ser verdadero actuando acorde con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Todo el sentimentalismo y los deseos a los cuales están apegados los humanos, en nosotros, no deberían existir.

Es decir, que necesitamos reconocer todos nuestros apegos y dejarlos ir.

La práctica de  cultivación es simple si sabemos de dónde venimos, qué estamos haciendo y hacia dónde vamos.