(Minghui.org) Abrí una pastelería en 2003. Para llevar adelante mi negocio, me baso en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, los principios de Falun Dafa. Comencé a practicar en 1997. A través de la práctica entendí el significado de la vida, y que existen relaciones predestinadas entre las personas.

Me aseguro de que todos los productos de mi negocio sean de la mejor calidad. Vendo mis pasteles al menor precio posible. No adultero mis productos ni engaño a mis clientes. Mi negocio de pasteles se ha convertido en el mejor en mi ciudad. Muchos clientes saben que mis pasteles son superiores a las marcas conocidas que se venden en grandes cadenas de negocios, y que mis precios son más bajos.

Siempre encargo yo mismo la materia prima y luego les explico los hechos sobre Falun Dafa y la persecución a la gente que la entrega. La mayoría entiende la verdad luego de hablar conmigo y quieren renunciar a su membresía al partido comunista chino (PCCh).

Una pareja de casados a menudo vienen a entregarme cajas para los pasteles. En los diez años que he estado con mi negocio, la esposa ha hecho mal los cálculos de mi cuenta muchas veces cobrándome muy poco. Cuando descubro los errores le devuelvo el dinero.

Una vez pedí cajas grandes, pero ella me cobró el precio de las pequeñas. Descubrí su error cuando chequeé el inventario. Le pagué la diferencia cuando vino nuevamente. Ella me dijo sonriendo: “Quédatelo, porque la partida ya está completa. No me había dado cuenta del error”.

Yo le dije: “El Maestro Li (fundador de Falun Dafa) nos pide que seamos buenas personas y que pensemos primero en los demás. No es mi dinero, así que no puedo quedármelo”.

Me cobró menos en otra oportunidad cuando se salteó una caja de materia prima en mi factura. Le pagué por ella cuando vino a hacer la entrega la siguiente vez. Me dijo sonriendo: “¿Quién es como usted hoy en día? La mayoría de la gente quiere obtener dinero sin hacer esfuerzos. Deberías quedarte con el dinero”.

Le dije: “Pero, ¿con qué cara voy a mirar al Maestro Li si me quedo con su dinero?”. Ella dijo: “¡El Maestro Li es grandioso!”.

Su marido dijo: “Es tan difícil encontrar una persona tan buena hoy en día. Hemos estado en la industria del reparto durante más de 10 años. Probablemente hemos cometido muchos errores en nuestras facturas, sin embargo, usted ha sido el único que nos ha devuelto el dinero”.

La esposa luego me contó una anécdota. “Un repartidor recientemente me cobró 40 yuanes por ítemes que valían 400 yuanes. Me di cuenta del error y le pagué el dinero, y el hombre dijo: 'Debería habérselo quedado. ¿Por qué me lo da a mi?'. Yo le dije: 'Creo en Falun Dafa, así que no puedo quedarme con su dinero'”.

Me conmoví mucho cuando escuché esto. Realmente entiendo que solo cuando me cultivo bien puedo influenciar a más personas.

Esta pareja también le cuenta a sus amigos los hechos sobre la persecución a Falun Dafa y los anima a renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.