Forjando mi carácter al cultivarme en Dafa

(Minghui.org) ¡Saludos Shifu! ¡Saludos compañeros practicantes!

Escribir me costó mucho, no estoy acostumbrada a hacerlo, y considero que no poseo esa capacidad. Sé que es parte de las nociones que tengo, y hasta ahora me habían impedido hacerlo.

Me llevó mucho tiempo escribir, y en unas pocas líneas trataré de compartir con ustedes algunas de las experiencias de mis catorce años de cultivación, que si bien son muchas me doy cuenta que no los he aprovechado como debía para haber elevado mi xinxing y tener el estándar que se requiere para este momento de la rectificación del Fa.

La envidia

Una manifestación de la envidia es el corazón de injusticia.

Desde pequeña me enseñaron que justicia es dar a cada uno lo que le corresponde. Esto quedó muy grabado en mí a tal punto que en la escuela primaria, en tercer grado, había preparado un tema y estudiado de 3 libros, la maestra me dijo que me ponía un 10.

Cuando me dio el boletín no estaba el 10. Consideré que era una injusticia porque ese 10 me pertenecía, era mío, así que rompí el boletín.

En Zhuan Falun – Lección Séptima - Corazón de envidia, dice:

“…si algo te pertenece, no lo perderás, y si algo no es tuyo, no vendrá por más que luches...”.

“…a veces piensas que esa cosa es tuya, e incluso los demás te dicen que esta cosa es tuya, pero en realidad no lo es…”.

Viéndolo desde el FA, a esa edad, ya tenía muy marcada la envidia. Al 10 la maestra se lo puso a una chica cuyo padre tenía almacén y le llevaba los productos que en esa época escaseaban.

En principio la maestra pensó que el 10 era mío, pero en realidad no lo era, así que no me lo dio.

Fui creciendo y con los años defendía lo que consideraba que era mío.

Siempre he tenido un carácter muy fuerte y ha sido uno de los factores en producir conflictos interpersonales.

Mi corazón de contender era muy pesado, siempre tenía la última palabra.

Shifu dijo:

“…y cuando no se elimina el corazón de contender, también se produce fácilmente el corazón de envidia”. (Zhuan Falun – Lección Séptima - Corazón de envidia)

Pasó el tiempo y esto se fue acentuando, entonces ya no era solamente pelear.

Cada cosa que no me gustaba me producía enojo, entonces gritaba primero para gritar dos veces, al principio y al final, pensado que así tenía razón.

Después esto no me alcanzaba así que maltrataba a la gente. He herido a muchas personas a lo largo de mi vida.

Cuando terminaba todo me quedaba mal y además resentida.

En la Lección Novena de Zhuan Falun dice:

“…Apenas abren las bocas para insultarlo, un pedazo de de se lanza hacia él. Cuando le sacas ventaja a otro, perteneces al lado ganador, entonces tienes que perder”.

Y sí, lamentablemente he perdido mucho de en el transcurso de mi vida.

Después el enojo se transformó en ira. Cuando algo no me gustaba explotaba, tenía estallidos de ira. Eso es algo terrible. Mentalmente sufría mucho por esta manifestación.

Sentía la ira como un ácido que me quemaba y carcomía por dentro. Era tan terrible vivir así. Más de una vez consulté a un médico por esta reacción. Me recomendaban que viera a un psicólogo, pero eso tampoco funcionó.

Cuando esto sucedía sentía que dentro de mi cuerpo algunas partes se iban muriendo quemadas por esa sustancia que se desparramaba adentro. Después de un estallido quedaba en un estado muy lamentable tanto física como emocionalmente. Eso se había transformado en algo que cuando comenzaba no podía parar de ninguna manera. Esa cosa me manejaba de tal modo que hasta llegaba a sucederme cuando estaba sola y sin relacionarme con nadie, mi cuerpo estaba totalmente lleno de esa materia.

Estaba manejada completamente por esa materia, sentía esto dentro de mi cuerpo y en ocasiones llegaba a impedirme hablar, era como algo que se agrandaba dentro de mi garganta y me asfixiaba. La envidia había echado tantas y tan fuertes raíces en mí que todo estaba impregnado por esta.

Se manifestaba no solo contendiendo sino también en la cultivación del habla. Mis palabras estaban llenas de enojo, críticas y descalificación.

También era muy reticente a cambiar mi manera de pensar, exigía que los demás hicieran las cosas como yo decía que debían hacerse.

Cuando leí en la Lección Primera de Zhuan Falun:

“El proceso de cultivación-refinamiento es justamente para quitar toda clase de cosas no buenas guardadas en el cuerpo humano, sólo entonces se te puede hacer ascender, y esta característica del universo produce precisamente este tipo de efecto. Si no cultivas y refinas tu xinxing, no elevas tu estándar moral y no descartas los pensamientos malos y las materias malas, esta característica no te permite ascender…“.

Justamente me vi reflejada porque me di cuenta que tenía muchas cosas malas guardadas dentro de mi cuerpo. Tomé conciencia que debía eliminarlas. Muchos años me ha llevado poder ir eliminando estas materias, aunque todavía existen algunas manifestaciones.

He logrado avanzar a través de la lectura del Fa todos los días. Muchas veces he sentido el Fa como una medicina que necesito diariamente para poder limpiarme.

El trabajo es arduo pero se logran buenos resultados.

Cuando comencé a leer Zhuan Falun me di cuenta que Benevolencia y Tolerancia eran principios que jamás se habían cruzado en mi vida.

Al principio de mi cultivación, un día antes de la práctica, me encontré con una practicante, tuvimos una discusión y regresé a mi casa. Cuando fui la próxima vez a la práctica la coordinadora me preguntó por qué había faltado, le dije que había discutido con esa practicante y me fui a mi casa porque me quedé mal y no estaba en condiciones de hacer la práctica. Ella me dijo algo que lo recordé a menudo: “¿cómo vas a elevar tu xinxing si te quedas sola en tu casa?”.

Desde el principio de mi cultivación he puesto mucho esfuerzo para eliminar las distintas manifestaciones de la envidia.

La falta de tolerancia me ha llevado a situaciones conflictivas con los practicantes. Cuando me marcaban un apego, el apego se ponía loco, quería eliminarlos a todos los practicantes, quería desaparecer, que me tragara la tierra, no me acordaba de nada más y menos me daba cuenta de que era una prueba para atravesar. Después, al día siguiente o más tarde, pensaba en lo que me dijo la coordinadora al principio y terminaba siendo racional, y entendía que debía cultivarme dentro del grupo, así que no faltaba a las reuniones, ni siquiera percibiendo que iban a tratar un tema relacionado con mis apegos.

No me ha sido fácil, pero ha sido posible porque pensaba que si otros lo lograron yo también podía lograrlo.

Por eso, y de acuerdo a mi experiencia, no se alejen del grupo porque les marcan apegos, es la gran oportunidad para mejorar y eliminar esas cosas malas, para elevar el xinxing y poder ascender.

Sé que debo seguir esforzándome para eliminar completamente todos los apegos.

Shifu dijo:

“Siendo nosotros personas que refinan gong, repentinamente se pueden producir conflictos. ¿Cómo hacemos? Si mantienes en todo momento un corazón misericordioso y una actitud serena y pacífica, al encontrarte con un problema podrás actuar bien, porque eso da espacio para amortiguar. Si siempre eres misericordioso, tratas a los demás benevolentemente, consideras a los demás al hacer cualquier cosa y, cuando se presenta un problema, piensas primero si los demás podrán aguantar o no y si dañas a otros o no, entonces no surgirá ningún problema. Por consiguiente, debes refinar gong exigiéndote según estándares altos, estándares aun más altos”. (Zhuan Falun – Lección Cuarta – Elevar el xinxing)

Estudiar en grupo nos brinda la posibilidad de que nuestros apegos sean expuestos, lo que permite que nos ayudemos entre nosotros para poder eliminarlos.

“Estudiar el Fa juntos es algo dejado por mí a todos, refinar el gong juntos es algo dejado por mí; …todas las regiones afuera de China continental tienen que hacerlo de esta manera”., así dice en el Fahui de Nueva York 2016.

Viendo claramente la manifestación del egoísmo

La semana pasada mientras leía el Fa, de repente fue como si se abriera mi mente y me di cuenta de cuán egoísta he sido.

Comenzaron a rodar mis lágrimas y sentí un gran dolor.

No he podido ayudar a los demás, me he ocupado de hacer mis cosas sin tener en cuenta la necesidad de los que me rodearon.

Hacía mi trabajo perfecto, era el orgullo de mis empleadores. Podía enseñar a quien quisiera aprender cómo se hacía mi trabajo, no ocultaba nada y lo tenía disponible para quien quisiera continuarlo. Consideraba que lo que hacía era importante y no podía perder tiempo con los demás.

Pero, era incapaz de dejar de lado lo mío para dedicarle tiempo a otros y ayudarlos a encontrar el camino más directo para lo que necesitaban hacer.

Cuán egoísta he sido, ver esto me produjo mucho dolor, porque se desplegó ante mí muy claramente la manifestación de la naturaleza del viejo cosmos.

Shifu dijo:

“También quiero decirles a ustedes que su naturaleza pasada estaba fundada sobre la base del egoísmo e interés personal. De ahora en adelante, cualquier cosa que hagas, deberás primero tener consideración hacia otros, para que así obtengas la honrada iluminación de desinterés y altruismo. Entonces de ahora en adelante, en cualquier cosa que hagas o digas, ¡deberás tener en consideración a otros, a las generaciones futuras, como también la eterna inalterabilidad de Dafa!”. (La naturaleza fo no tiene ningún punto débil de Escrituras esenciales para mayor avance).

Llegué a Dafa buscando salir de la rueda de la reencarnación. Pensaba que no importaba cuánto tuviera que pagar, lo pagaría para no volver.

Pero al ir leyendo el Fa me di cuenta que pagar no eran tan fácil como me parecía y cultivarme era un proceso que me requería mucho tiempo y dejar de pensar con las nociones adquiridas.

Pero no vine para eso, vine para ser Dafa dizi del periodo de la rectificación del Fa, entonces no es ´me voy y no vuelvo más´, porque eso es otra manifestación de la naturaleza del viejo cosmos, es egoísmo.

Shifu dijo:

“… salvar a la gente es la manifestación de la misericordia de los cultivadores, y cuando las multitudes de seres están en peligro, es una responsabilidad”. (Saludos al Fahui europeo)

Haber conseguido un cuerpo humano en este periodo es realmente para agradecer, porque esperamos miles de años para llegar a este momento y obtener el FA.

Shifu dijo:

“¡qué difícil es obtener un cuerpo humano! Cuando uno verdaderamente puede obtener Dafa, esta persona es simplemente la más afortunada. Un cuerpo humano es muy difícil de obtener; les expongo esta razón”. (Zhuan Falun)

No puedo desperdiciar ningún momento de mi vida, debo estudiar más el Fa para poder cumplir con mis votos.

Shifu dijo:

“El xiulian no es cultivarse para Dafa, salvar a la gente tampoco es salvar para Dafa. Xiulian es la garantía para que las vidas avancen hacia la Perfección…”. (Saludos al Fahui europeo)

Dedicando el tiempo a un proyecto

El proyecto más importante en el cual participo es Shen Yun.

Cada vez que nos informan que está confirmado que viene a la Argentina, siento una gran responsabilidad porque a pesar de no tener el estándar que se requiere, Shifu sigue viniendo, Él es muy misericordioso y nos sigue dando más oportunidades para salvar a los seres conscientes.

No solo siento responsabilidad, cuando comienzo a hacer la primera tarea, también me siento enormemente bendecida y agradezco a Shifu por poder participar.

La primera vez que vino Shen Yun fue en 2009. Ninguno aquí tenía experiencia en cómo debíamos manejarnos en todo lo que se necesitaba hacer. La embajada china presionaba para que no dieran las visas a los artistas.

Cada vez que iba a la Cancillería una empleada me trataba tan mal, tenía que hacer continuamente pensamientos rectos para eliminar la maldad.

En la primera función, de repente, en una escena vi que todas las bailarinas eran iguales, bellísimas. Sé que son los dioses que están ayudando en el escenario.

Mirando hacia atrás me di cuenta que cada vez que está por venir Shen Yun, más o menos un mes antes, se me presentan situaciones para probar mi decisión de dedicarme por completo. A veces en la forma de tribulaciones físicas, otras veces con pruebas con mi familia. En esas ocasiones, aumento mis esfuerzos en todos los aspectos, e intento poner todo en manos de Shifu y le pido ayuda para poder hacer todo lo que tengo que hacer.

Haré un mayor esfuerzo para ser una practicante diligente y hacer bien las tres cosas que Shifu nos dijo que debemos hacer.

Agradezco a Shifu por haber abierto la puerta tan grande por la cual pude entrar a la cultivación y también por todas las veces que vino con Shen Yun aquí para salvar a los seres conscientes.

Agradezco a mis compañeros practicantes por el cuerpo que hemos formado y nos ayudamos para avanzar.

¡Gracias Shifu!

¡Gracias compañeros practicantes!

Por favor señalen cualquier cosa que consideren incorrecta.

(Leída en la Conferencia de Intercambio de Experiencias de Argentina 2016)