(Minghui.org) Decenas de miles de personas en China y el resto del mundo han presentado querellas penales contra Jiang Zemin recientemente. Pero al hacerlo, algunos han sido detenidos y han sufrido más persecución.

El Sr. Xu Changhong de 48 años, de la ciudad de Xianning, provincia de Hebei, y farmacéutico de la Facultad de Farmacia de Tongjixianning, fue arrestado el 22 de julio, un mes después de que presentó su querella penal contra Jiang Zemin. Agentes de la oficina local 610 lo arrestaron en el trabajo. Lo llevaron a un centro de lavado de cerebro, donde fue torturado por 50 días.

La policía emitió una orden recién después de arrestarlo y luego lo transfirió al centro de detención del distrito de Xianning, donde aún permanece.

El Sr. Xu ha sido perseguido desde el inicio de la persecución a Falun Gong. Él y su esposa Su Xiaolian fueron detenidos varias veces. El Sr. Xu fue arrestado en octubre de 1999 y detenido en un campo de trabajo forzado por un año. Estuvo cuatro meses retenido en el centro de detención de Tongshan en 2002. Fue arrestado nuevamente en 2005 y sentenciado a tres años en prisión.

Su esposa fue arrestada en agosto de 2002 y retenida en el centro de rehabilitación de drogas de mujeres de Tongshan por dos años.

La pareja fue nuevamente arrestada en 2014 y trasladada al centro de lavado de cerebro. Su niño tuvo que vivir con otros familiares.

El domicilio del Sr. Xu fue saqueado en 2005, 2014 y 2015, pero la policía se negó a dar la lista de objetos confiscados.

Antecedentes

En 1999, Jiang Zemin, como jefe del partido comunista chino, ignoró a otros miembros permanentes del comité del politburó y lanzó la violenta represión a Falun Gong.

La persecución ha llevado a la muerte a muchos practicantes de Falun Gong en los últimos 16 años. Muchos más han sido torturados por su creencia e incluso asesinados por sus órganos. Jiang Zemin es directamente responsable por el comienzo y continuidad de la brutal persecución.

Bajo su dirección personal, el partido comunista chino estableció un órgano ilegal de seguridad, la “oficina 610”, el 10 de junio de 1999. La organización ignora las fuerzas policiales y el sistema judicial al llevar adelante las directivas sobre Falun Gong: arruinar su reputación, cortar sus recursos financieros, y destruirlos físicamente.

La ley china permite a los ciudadanos ser demandantes en causas penales, y muchos practicantes están ahora ejerciendo ese derecho presentando demandas penales contra el ex dictador.