(Minghui.org) Empecé a practicar Falun Gong en 1995. Soy una practicante veterana, pero no he sido diligente. Siento que he sido interferida a menudo.
Quería ser diligente, pero me sentía abrumada por mis obligaciones cotidianas. Estaba interferida cuando enviaba pensamientos rectos. El teléfono sonaba o alguien golpeaba a la puerta. Además de tener un trabajo de tiempo completo, cocinaba tres comidas al día, dejaba a mi hijo en la escuela y lo recogía, hacía las tareas domésticas y cuidaba de mis padres ancianos.
Cuando no pude hacer bien las tres cosas, naturalmente comencé a culpar a otros. "Mi marido no me ayuda con las tareas". "Yo soy la única que se preocupa por mis padres y ninguno de mis hermanos ayuda".
Miré hacia adentro para encontrar mis deficiencias y descubrí que guardaba rencores y necesitaba practicar la tolerancia. Sabía que tenía que eliminar estos apegos. Sin embargo, sólo obligándome a soltarlos no ayudaba mucho, porque todavía no estaba motivada para hacer las tres cosas.
Cuando intenté enviar mensajes de texto para aclarar la verdad, mi teléfono dejó de funcionar después de un tiempo. Traté de hablar con la gente sobre Falun Dafa y la persecución, cara a cara, pero el resultado no fue bueno. Los compañeros practicantes me pidieron que ayudara a imprimir calendarios de aclaración de la verdad, pero mi impresora de repente dejó de funcionar. Aún más, mi hijo se enojaba a menudo y desahogaba su furia conmigo. Sabía que debía ser más tolerante, solo que no podía alcanzar el nivel necesario para lograr lo que sabía que tenía que hacer. ¿En dónde fallaba?
Desde el día en que comencé a practicar Falun Dafa, quería ser una buena persona y tenía la esperanza de que los demás lo notarían y dirían: "Mírenla, es tan amable. Los practicantes de Falun Dafa son buenas personas".
De repente, me di cuenta de que mis motivos estaban equivocados. Me había enfocado demasiado en cómo ser una buena persona. Por ejemplo, hacía todas las tareas, cuidaba bien de mi hijo y de mi suegra. Cocinaba alimentos nutritivos para cada comida que le ofrecía a mi esposo y hacía lo mejor que podía para cuidar de mis padres y hermanos.
En mi lugar de trabajo, soy la trabajadora más dedicada. Los demás comentaban a menudo que era como una niñera para todo el mundo. Estaba cansada. Después de todo, una buena persona sigue siendo una persona que no tiene poderes sobrenaturales.
Me iluminé a que el propósito de mi vida era ser una practicante y asistir a Shifu para ayudar a que la gente despierte y entienda Falun Dafa. Ser una buena persona en la sociedad de la gente común es simplemente una manifestación de un practicante que sigue los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Sin embargo, no es el propósito principal de un practicante en este mundo humano.
Mi corazón se iluminó de repente y entendí verdaderamente la magnificencia de ser un practicante. Los conflictos con los demás parecían tan insignificantes. Por fin he encontrado la raíz de mi apego.
Milagrosamente, mi impresora empezó a trabajar. Mi hijo estudia tranquilamente, sin la necesidad de que le tenga que recordar. Me di cuenta de que realmente necesito leer los artículos más recientes de Shifu y entender las responsabilidades de un practicante.
Por favor, señalen cualquier deficiencia en mi entendimiento.
Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2014/10/15/146389.html
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Categoría: Mejorándose uno mismo