Una conversación inesperada con una señora en Shanghái

[Minghui Net] Un desconocido me dio su teléfono móvil para que hablara con una mujer china en Shanghái cuando me encontraba en la Plaza del Milenio, cerca de la biblioteca central en Leeds, en Inglaterra. Hablé con ella y la ayudé a renunciar a las organizaciones comunistas chinas.

Fue bastante sorprendente como ese occidental nos conectó a la señora de Shanghái y a mí, y cómo su teléfono móvil sirvió como un puente para que ella tomara una decisión tan importante.

Este interesante encuentro sucedió el 16 de septiembre de 2014. Yo estaba en la plaza concientizando a la gente sobre la sustracción forzada de órganos perpetrada por el gobierno de China, cuando noté que un caballero que estaba cerca de mí se puso a hablar por celular. No quise interferir en su conversación, así que me alejé de él.

Se dio cuenta de lo que estaba haciendo. Así que me dijo con una gran sonrisa: “Chino, chino”.  Me entregó su teléfono y me pidió que hable.

Tomé el teléfono y dije en chino: “¡Hola!”. “¡Hola!” fue la respuesta. "¿Dónde estás?", le pregunté. “Shanghái”, me dijo. "Esto es interesante. Yo estoy en el Reino Unido. El caballero que acaba de hablar con usted me dio su teléfono para que pudiéramos charlar. Él tiene una gran sonrisa en su rostro”. La señora en el teléfono se rió.

Nos dijimos algunas palabras, y luego pensé que ya que estaba teniendo un encuentro tan interesante con esta señora, debería aprovechar la oportunidad para ayudarla a renunciar al partido comunista chino (PCCh).

Como practicante de Falun Gong, entiendo que como el PCCh ha cometido tantos crímenes en su persecución a Falun Gong y va a tener su retribución de yeli. A los chinos que todavía son miembros de sus organizaciones, los alentamos a que renuncien al PCCh para que no sean encontrados culpables por asociación.

"¿Te uniste a los jóvenes pioneros cuando estabas en la escuela primaria?", le pregunté.

"Sí, eso fue hace 20 o 30 años”. “¿Qué hay de la liga de la juventud comunista?”. “Sí. Pero no me uní al partido comunista”.

"Yo estoy transitando mis 60 años, soy mayor que tú", le dije. "Ya he renunciado al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Mis familiares y amigos también renunciaron. En China, más de 170 millones de personas han renunciado a sus membresías. Lo hicieron a través de Internet”.

"¿Sabes por qué la gente está renunciando al PCCh? [El ex líder del PCCh] Jiang Zemin utilizó al PCCh para perseguir a los practicantes de Falun Gong que viven según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. El partido también autoriza la sustracción de órganos de practicantes vivos con el fin de obtener beneficios”.

"Jiang y el PCCh son culpables de muchos crímenes más. Ustedes, la gente de Shanghái, están muy conscientes de esto ya que él es de Shanghái. Sus crímenes darán lugar a la desintegración del PCCh. Debes renunciar a la liga de la juventud y a las organizaciones de jóvenes pioneros por tu propio bien.

"Puedes usar un seudónimo para hacer la renuncia por Internet. No sé tu nombre, así que ¿qué tal si sólo te llamo 'Meili' (Bella) y te ayudo a hacer la renuncia?". "Claro", asintió. Luego me dijo “¡gracias!".

Le devolví el teléfono al caballero, y él siguió hablando con ella.

Esta fue realmente una llamada telefónica increíble. Un hombre en el Reino Unido hablaba por teléfono  con una señora china que estaba en Shanghái. En medio de la conversación, yo, un desconocido para los dos, ayudé a la señora a renunciar a las organizaciones comunistas. ¡Que arreglo tan extraordinario!

 

http://en.minghui.org/html/articles/2014/9/30/3511.html