(Minghui.org)

¡Saludos venerable Maestro!

¡Saludos compañeros practicantes!

Compartiré con vosotros mis experiencias de aclaración de la verdad a turistas chinos en los últimos años.

Abandoné China y me fui a Tailandia en 2006. Lo aprecié realmente cuando aclaré los hechos por primera vez a la gente en Tailandia ya que nunca lo había hecho fuera de China antes. Lo encontré emocionante y un privilegio poder llevar los hechos a aquellos turistas chinos en una sociedad libre de persecución. Estaba con mi hermana mayor pero no pudimos ir juntas a aclarar la verdad porque una de nosotras tenía que quedarse en casa, ya que no podíamos permitirnos el precio del autobús para dos personas. Podía sentir que el Maestro estaba a mi lado ayudándome en mi aclaración de la verdad mientras sentía que estaba rodeada por una fuerte energía que me protegía del sol abrasador de Tailandia y me mantenía fresca.

Más tarde nos mudamos a un barrio en las afueras debido al alto coste de vivir en la ciudad. Para ahorrar dinero planeé hacer la aclaración de la verdad en Internet y pedí a mi hermana que aclarara ella la verdad a los turistas cara a cara. Una noche tuve un sueño muy realista en el que una de mis compañeras del colegio vino hacia mí y me dijo: “Nunca entenderás los hechos sobre Falun Gong si no sales afuera”. Entonces me desperté. Hablando francamente, nunca hubiera pensado en esta compañera si no hubiera sido por este sueño, ya que todos mis recuerdos sobre ella se habían desvanecido. Entendí el sueño como una pista del Maestro de que esos turistas chinos estaban aquí para escuchar mi aclaración de la verdad y que yo no debería defraudarles. Entonces cambié de opinión y decidí ir hablar con ellos cara a cara. Mi tarea se hizo mucho más fácil ya que empezó a circular una línea de autobús gratuita, que me hizo ahorrar mucho dinero. Sabía que el Maestro estaba pavimentando un camino para mi aclaración de la verdad.

Después de venir a Finlandia seguí yendo a sitios turísticos para aclarar la verdad. Esto se interrumpió cuando participé en un proyecto de los medios, que me mantuvo ocupada y podía ir a sitios turísticos sólo en mi tiempo libre. En seguida mi ordenador e Internet dejaron de funcionar y ya no pude trabajar más en el proyecto de los medios. Miré dentro para encontrar una solución. En seguida me di cuenta de que podía ser una pista del Maestro de que debería ir a los sitios turísticos como hacía antes. El Maestro arregló que muchos chinos que tenían alguna relación predestinada sutil conmigo conocieran los hechos de Falun Gong a través de mí.

 

1. Transmitiendo los hechos de Falun Gong con un altavoz

Un compañero practicante finlandés me dijo más tarde que hay una atracción turística en Helsinki que es una visita obligada para todos los turistas chinos. Junto con mi hermana, fuimos allí y echamos un vistazo, y  encontramos un buen sitio para aclarar la verdad. Es un parque público, por lo que podíamos mostrar los ejercicios de Falun Gong allí. Comenzamos nuestro trabajo allí desde ese día en adelante. Distribuimos materiales de aclaración de la verdad, demostramos los ejercicios y pedimos a los turistas chinos que hicieran las tres renuncias. Colocamos algunas pancartas sobre las sustracciones de órganos del PCCh de practicantes vivos. Muchos turistas no chinos se quedaron estupefactos al ver el mensaje y vinieron a firmar nuestra petición por su propia iniciativa. Más tarde se me unieron varios practicantes finlandeses y chinos. Ya que no sabían chino, los practicantes finlandeses hicieron los ejercicios. Muchos turistas chinos se quedaron sorprendidos al ver a occidentales haciendo Falun Gong y vinieron a tomar nuestros materiales. Pude ver su expresión anonadada, especialmente cuando había muchos practicantes haciendo los ejercicios.

Pronto descubrí que la mayor parte de los turistas venían al parque temprano por la mañana, venían al menos cuatro grupos cada hora. Podía haber 20 autobuses de turistas esperando en línea, haciendo que estuviéramos muy ocupados repartiendo materiales y haciendo las tres renuncias. Debido a que éramos pocos, pensamos en una solución para comunicarnos con esos grandes grupos de turistas. Pensé en transmitirles los mensajes de aclaración de la verdad con un altavoz. Otro compañero practicante había hecho esto durante muchos años en otros sitios turísticos. Él me dio el altavoz cuando se lo pedí. Pensé que era alentador que él pudiera prestarme el aparato. Recibí una respuesta considerablemente positiva de los turistas chinos. Muchos  habían sido advertidos por sus guías de no arriesgarse a tomar nada de nosotros y que nos pagaban por hacer esto. Aún así, muchos oyendo lo que decía, vinieron a recibir nuestros materiales. Algunos incluso se olvidaron de hacer fotos y se quedaron allí escuchando. Algunos escuchaban tímidamente mientras simulaban que hacían fotos.

 

2. Creando un ambiente para la aclaración de la verdad y templando mi corazón

Mientras recibía una buena respuesta en la salvación de seres conscientes a través del altavoz, cultivé cada aspecto mío. Los europeos detestan el ruido y les irritaba oír la transmisión por el altavoz en chino, la cual no podían entender. Recibí muchas quejas de ellos. Miré dentro para descubrir si había hecho algo impropio. Me pregunté: “¿hay algo que he fallado en hacer bien y que necesito mejorar? ¿Hablo demasiado alto por el altavoz?”. Algunas personas incluso me gritaban cuando hablaba por el altavoz, lo cual me frustraba mucho y me hacía reacia a volver al día siguiente. La gente escuchaba atentamente y venía por los materiales por su propia iniciativa. Algunos hablaban conmigo y hacían sus preguntas. Yo les contestaba pacientemente, sabiendo que el Maestro me estaba animando. Un turista chino me reprendió un día. Al día siguiente encendí el altavoz con un estado mental decaído con apenas suficiente pensamiento recto, cuando una compañera practicante de China vino hacia mí y me abrazó. Estaba emocionada de verme diciendo: “¡Me alegro de verte, al fin!”. Me dio un billete con palabras de aclaración de la verdad escritas en él antes de irse. Lo guardé bien como algo valioso porque sabía que el Maestro la había enviado para animarme y desvanecer mis frustraciones y continuar salvando seres conscientes. En mi difusión con el altavoz detecté mi apego a tener miedo, como que la gente consideraría mi difusión como una intrusión a su privacidad.

Refiné mis estrategias de difusión a medida que avanzaban los días. Aprendí gradualmente a encenderlo en el lugar y la ocasión correcta, para evitar a los turistas no chinos, a ajustar el volumen correctamente e incluso encontré un modo de optimizar los efectos de sonido cuando había viento. Lo primero que hacía cuando llegaba al parque por la mañana era comprobar el sonido con otros practicantes. También empleé muchos esfuerzos mejorando la calidad de los materiales que transmitía para hacerlo más atractivo e interesante para los turistas chinos. Pedí a una compañera practicante que transcribiera todo lo que planeaba transmitir. Ella mencionó que la Radio Minghui hace audios para emitir en sitios turísticos. También compartí mis audios de emisión con los compañeros practicantes de todo el mundo en la plataforma de Minghui. La plataforma de aclaración de la verdad europea de Minghui hizo materiales según mis necesidades y los pusieron a mi disposición. Estamos trabajando juntos como un cuerpo.   

Como resultado el ambiente cambió gradualmente a nuestro favor. Los guías turísticos de grupos no chinos ya no se quejaron más cuando entendieron que estábamos hablando sólo a los turistas chinos. Algunos residentes locales, que solían oponerse a nuestras difusiones, entendieron lo que estábamos haciendo después de que un practicante hablara con ellos. A un hombre mayor irlandés no le caímos bien antes. Después de que le aclaramos la verdad nos saludaba cada vez que pasaba con su perro. Algunas veces nos daba caramelos. A un guía turístico chino que había vivido muchos años en Finlandia no le gustaban nuestras difusiones, aunque no mostraba oposición a Falun Gong. Trajo a un grupo de turistas al parque una mañana cuando estaba lloviendo fuertemente. Había muchos grupos de chinos que vinieron en más de 20 autobuses. Pude poner el altavoz más alto de lo normal porque no había ningún grupo de no-chinos. El guía se quedó muy sorprendido al oír la emisión. “Pensé que no vendrías hoy debido a la gran lluvia. Además, es tan temprano”. Cuando se fue dijo: “¡Ni siquiera el mal tiempo los detiene!”. Le dije seriamente: “Sé que tú vendrás haga como haga, así que yo vengo por ti haga como haga”. Desde entonces no mostró más oposición a nuestras emisiones e incluso se paraba a escuchar atentamente.

 

3. Estudiando bien el Fa y mejorando en la cultivación

Encontré que la respuesta de los turistas a mi difusión dependía mucho de mi estado de ánimo. Ellos mostraban más atención cuando mi estado mental era más pacífico mientras que se mostraban más hostiles cuando mi mente estaba incontrolada. Para obtener el mejor resultado de las emisiones hice grandes esfuerzos para mantener un estado de cultivación adecuado. Traté de hacer los ejercicios tan pronto como era posible por la mañana. Solía quedarme levantanda hasta altas horas de la madrugada y me levantaba tarde por la mañana cuando trabajaba en el proyecto de los medios. Encontré duro levantarme pronto por la mañana, así que iba a la cama más temprano, pero seguía sin poder levantarme a las 5 de la mañana. Ahora hago los ejercicios a las 4:15, aunque no siempre. Comparado con algunos compañeros practicantes mayores no lo estoy haciendo muy bien en este aspecto. Después de los ejercicios desayunaba y me iba a aclarar la verdad. Después de eso iba a casa a estudiar el Fa.

He sido bastante afectada por mi yeli de pensamiento desde 1997, lo cual me hacía incapaz de concentrarme en mi estudio del Fa o al hacer otras cosas. Para que pudiera entender realmente el Fa comencé a recitarlo. Progresé muy lentamente pero obtuve resultados bastante buenos. Podía aplacar mi pensamiento desenfrenado recitando una frase corta del Fa o un verso de Hong Yin. Para mí era duro no ser capaz de concentrarme en el estudio del Fa, especialmente cuando mi apego humano se enfurecía, lo cual me hacía incapaz de mirar dentro cuando estaba en desacuerdo con los compañeros practicantes.

“Dizi: Un Dafa dizi de Changchun me pidió que le haga una pregunta a Shifu de parte suya. Él dice que observó que aunque muchos compañeros cultivadores son realmente activos en la validación del Fa, durante largo tiempo han sido incapaces de estudiar bien el Fa o refinar bien el gong. Él siente que este es un problema serio. Yo estuve en esa situación durante un tiempo. El efecto es que cuando trabajamos en nuestros proyectos para validar el Fa, las cosas no son sagradas, y es difícil alcanzar el impacto que deseamos. Y los conflictos entre practicantes también son el resultado de no estudiar bien el Fa, causando que ellos no lo hagan bien al mirar hacia adentro y cooperar entre sí.

Shifu: Sí, es cierto. Yo siento lo mismo. Espero que los Dafa dizi en todas las regiones de China continental –no solo los de Changchun– puedan hacer las tres cosas bien al mismo tiempo. Solo haciéndolo así podrán lograr verdaderamente lo que deben, y solo entonces estarán avanzando diligentemente como Dafa dizi”. (Enseñando el Fa en el Fahui internacional de Gran nueva York 2009)

Estaba consciente de esta deficiencia en mi cultivación desde antes, y el Maestro lo había puesto aún más claro en su respuesta a la pregunta, pero seguía sin poder sacar el máximo partido a mi estudio del Fa y seguía cometiendo los mismos errores. Este año cuando aclaré la verdad en el parque una practicante occidental estaba en desacuerdo conmigo. Pensaba que estaba imponiendo mis puntos de vista a otros con el altavoz y que el volumen estaba demasiado alto. En ese momento estaba hablando a los turistas chinos, y muchos de ellos escuchaban atentamente, pero ella me dijo que me alejara de ellos y que me quedara en un sitio, sin moverme por todas partes. Me dijo que bajara el volumen, tan bajo que nadie más que yo pudiera oírlo. Estaba algo agitada y no pude mantener mi xinxing. Pensé que era una distracción de una compañera practicante que debilita el ambiente que hemos creado con tanto esfuerzo. Mi corazón estaba lleno de aflicción y quejas. Más tarde llamé a la coordinadora china y le presenté mis quejas. Los dos días siguientes elegí hablar en el otro lado del parque para que ella no pudiera verme u oírme. Pero el problema de xinxing persistía. Otros practicantes occidentales también expresaron la misma opinión, e incluso me dijeron que no hablara más por el altavoz. Lo encontré difícil de soportar y no miré dentro, lo cual cortó el camino para una solución verdadera. Cuanto más pensaba en ello, más quejas tenía hacia ellos. Me sentía exhausta físicamente y no pude sobrellevarlo, aunque sabía que tenía que atravesarlo como cultivadora. Sentía la habitación de nuestro estudio del Fa rutinario de los viernes tan calurosa que apenas podía respirar, así que salí a estudiar el Fa sola.

El Maestro apuntó directamente a mi corazón:

“Habiendo dicho todo esto, me gustaría volver atrás y hablar de algo más. Como Dafa dizi, ustedes tienen un pasado extraordinario, y también deberían tener un presente extraordinario. A veces, mientras validan el Fa, haciendo trabajos de Dafa en general, o en vuestras propias cultivaciones, realmente existen muchas cosas insatisfactorias. El mayor problema y el más notable, que no se ha resuelto durante un largo tiempo, es también lo que los dioses han estado murmurando en mis oídos, algo que más los perturba. Pero nunca lo enfaticé, y no lo expuse con palabras fuertes. ¿Por qué? Es porque los Dafa dizi necesitaban un poco de coraje humano mientras andaban validando hoy el Fa. Por eso es que no hablé de ello. Quería guardar esa discusión para el tiempo final –quise hablar de ello más tarde, cuando el momento fuera más oportuno. ¿Qué es, entonces? Cuando los Dafa dizi cometen errores, no les gusta que los critiquen. Nadie puede criticarlos, y cuando alguien lo hace, estallan. Cuando tienen razón, no les gusta que otros mencionen cosas en las que pueden mejorar; cuando están equivocados, no quieren ser criticados. Se enojan apenas alguien los critica. Este problema se está haciendo muy grave”. (Aplausos)

“La cultivación se trata de mirar dentro de uno. Sea que tengas razón o no, debes examinarte a ti mismo. La cultivación se trata de deshacerse de los apegos humanos. Si siempre rechazas los reproches y las críticas, ¿es eso cultivación? ¿Cómo sería eso cultivación? Te has acostumbrado a enfocarte en las deficiencias de los otros, y nunca tomas en serio el examinarte a ti mismo. Cuando la cultivación de los otros un día tenga éxito, ¿qué será de ti? ¿Acaso Shifu no está esperando que te cultives bien? ¿Por qué no aceptas las críticas, y sigues enfocándote en otras personas? ¿Por qué no te cultivas para adentro y examinas tu propio ser? ¿Por qué te agitas cuando se te critica? ¿Cuántos de ustedes aquí sentados pueden permanecer tranquilos cuando alguien los señala inesperadamente y los regaña? ¿Cuántos de ustedes pueden permanecer serenos y buscar la razón de su parte cuando se enfrentan con la crítica y el reto de otros?”.

(Exponiendo el Fa en la ciudad de Los Ángeles)

El Fa restableció la paz de mi corazón de inmediato. He tenido este problema de xinxing desde hace mucho. Parecía despreocupada en la superficie pero realmente me importaba lo que otros pensaban de mí, una señal evidente de búsqueda de fama y beneficio. Pensaba que lo había hecho lo suficientemente bien en la aclaración de la verdad en los últimos meses y que mi esfuerzo había dado sus frutos, ya que había creado un ambiente nuevo para la aclaración de la verdad. Con tal pensamiento me relajé y me volví engreída. Todo esto, añadido a mi fracaso en estudiar bien el Fa, dio un acceso al mal para socavar mi cultivación. Me sentí realmente apenada después de encontrar esto.

Seguí con la aclaración de la verdad en el parque todos los días, muchos practicantes se unieron los sábados. Nuestra cooperación hizo la aclaración de la verdad mucho más convincente que cuando estaba sola. Una mañana un turista chino, atraído por el altavoz, se acercó a mí diciendo que quería practicar Falun Gong y me pidió el libro de Zhuan Falun. Ese día muchas personas vinieron a recibir materiales. Un practicante sueco intentó hablar a un chino en inglés. El practicante me pidió que hablara con él porque su inglés no era bueno. Con poco esfuerzo aceptó hacer las tres renuncias.

La misma queja me llegó otra vez no mucho después, cuando una compañera practicante me dijo que no siguiera a los turistas para hablarles con el altavoz y que debería colocar el altavoz en un sitio fijo. No la refuté en el momento, sino que le expliqué que les seguía porque no podía comunicarme con tantos turistas yo sola, así que tenía que seguirles. Antes de que pudiera terminar la explicación otro grupo de turistas llegó. Fui hacia ellos para hablarles con el altavoz, cuando uno de ellos me insultó y dijo muchas difamaciones contra Falun Gong. Me mantuve tranquila, pero sentía lástima de que no hubiera sido salvado. Compartí mi experiencia con otra compañera practicante del norte de Finlandia cuando volví a casa. Ella admitió que estaba en un estado mental impropio en la aclaración de la verdad ese día porque no pudo soportar lo que había hecho una practicante. Le contesté con aprobación ya que yo también sentía que la compañera practicante se había apresurado demasiado al hablar a los turistas y estaba como forzando su propia opinión sobre otros. Peor aún, ella tenía su propio punto de demostración en frente de la estatua visitada por todos los turistas, lo cual ponía muy furiosos a los guías. Ciertamente no podíamos cooperar bien cuando estábamos en desacuerdo unos con otros. Decidí tomar un descanso del trabajo en el parque por unos días, y pedí a otros practicantes que ocuparan mi lugar. Aproveché la oportunidad para mirar dentro y encontré que había estado equivocada al pensar de esa manera y que deberíamos trabajar juntos como un solo cuerpo bajo cualquier circunstancia.

El Maestro dijo: “En realidad, ¿sabían que en los Cielos, esos grandes seres iluminados tienen muchas cosas que también necesitan coordinar y hablar entre ellos?”. (Exponiendo el Fa en el Fahui de Filadelfia)

Entonces elegí hacer concesiones en lo concerniente al modo de nuestra difusión. Después de consultar a una practicante intenté hablar desde un punto fijo. “Veamos cómo funciona. Ciertamente necesitamos trabajar juntos o fracasaremos”. Ella estuvo de acuerdo. Un compañero practicante que es dueño de una cafetería vino a hablar por el altavoz durante casi 90 minutos antes de abrir su cafetería. La respuesta de los turistas fue bastante buena. Algunas personas vinieron a escuchar en frente de mí, mientras que otras se sentaron en la silla al lado del altavoz y escucharon atentamente. Ese día un turista incluso fue hacia un practicante por iniciativa propia e hizo las tres renuncias.

Pude percibir la magnificencia de abandonar el egoísmo y cooperar incondicionalmente con otros. Puedo ser omnipotente cuando estoy sola para validar el Fa y seré parte de un cuerpo entero formidable cuando trabajo junto a otros practicantes, como requiere el Maestro. Nuestra cooperación maximiza nuestro poder.

Mis historias no son en absoluto excepcionales, ya que el Maestro señaló hace mucho en el Fa todos estos problemas que podemos tener en nuestra cultivación. No hay duda de que en el Fa encontraremos las respuestas a todos nuestros problemas, por lo que lo único que tenemos que hacer es estudiar el Fa con más dedicación, ya que es la piedra angular para nuestra cultivación y salvación de seres conscientes.

Soy muy consciente de que aún tengo mucho que rectificar y mejorar en mi futura cultivación y salvación de seres conscientes. Gracias Maestro por crear para mí un ambiente tan precioso de salvación de seres conscientes. Lo atesoraré.

¡Gracias Maestro! ¡Gracias compañeros practicantes!

Por favor señalen cualquier cosa inapropiada.

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