[Minghui Net] Empecé a cultivarme en Falun Dafa con mi madre cuando iba a 5.º grado. Sabía que Falun Dafa era bueno y a menudo lloraba de gratitud cuando leía Zhuan Falun. Podía seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, pero no era diligente en la cultivación. Me pasaba el tiempo jugando y haciendo los deberes del colegio.

Cuando estaba en 7.º grado, dos compañeros de clase y yo íbamos en bici por la carretera de camino a casa. Volvíamos tarde de una clase. Eran cerca de las 21 h, en un día de diciembre. De repente un taxi conducía hacia mí. Me quedé estupefacto y grité: “¡Shifu ayúdame!”.

El taxi me dio de lleno. La bici, mi mochila, la bolsa de la merienda y todo saltó por los aires. Luego, otro camión me golpeó antes de que aterrizara. Caí delante de él.

Desaparecieron mis guantes, mis botas y tenía las manos cubiertas de sangre. El parabrisas estaba hecho añicos. Mi bici limó todo un lado del camión y voló 20 metros.

Durante el accidente, sentí una energía por encima de mí. Sabía que Shifu me protegió y sufrió por mí. De lo contrario, al haber sido golpeado dos veces con semejante fuerza, no hubiera podido sobrevivir.

Mis compañeros de clase encontraron mis botas y la bici. La bici estaba rota, las ruedas no giraban libremente, y los cordones de las botas estaban rotos. Los dos conductores preguntaron si quería llamar a la policía o aceptar una compensación. Les dije: “Si no quieres que te arregle el coche, entonces puedes marcharte”.

Mis compañeros estaba asombrados y dijeron: “¿Has perdido el juicio? ¿Cómo puedes dejarlos marchar?”. Anotaron las matriculas de los dos coches.

Milagrosamente pude montar mi bici hacia casa.

En casa, mi madre agarró el papel con la matrícula y miró hacia abajo. Dijo: “Creemos en Shifu y el Fa. No buscamos a los conductores. Si todo está bien, agradecemos profundamente a Shifu; si las cosas no salen bien, entonces tenemos que saldar nuestra deuda”.

Después de lavarme las manos, aunque pensaba que había perdido mucha sangre, descubrí que solo tenía las yemas de los dedos ligeramente cortadas.  Mi madre me examinó muy cuidadosamente, pero las heridas eran pequeñas y no requerían vendaje. Cuando me cambió la ropa, vio trozos de cristal en el pelo. Mi bufanda estaba rota en muchos trozos, pero no tenía heridas ni en la cara ni en la cabeza.

A la mañana siguiente, encontré que el lado interior de mi rodilla izquierda estaba hinchado. Mi padre se preocupó y me llevó al hospital. Los médicos no encontraron ninguna herida significante y dijo que solo estaba magullada.

Mientras descansaba el domingo, mi madre descubrió que no andaban los pedales de la bici, puesto que el metal que los cubre estaba saltado y faltaban algunos tornillos. Tuvo que llevar la bici a reparar. Solo necesitó varios tornillos y solamente gastó dos yuanes. Mi madre me preguntó cómo llevé la bici a casa después del accidente. Le dije que cuando mis compañeros y yo lo intentamos, nadie podía, sin embargo, después que dejé marcharse a los conductores, pude volver a pedalear la bici.

Al día siguiente, monté mi bici hacia la escuela y todo volvió a la normalidad.

Mi tío, que es policía, me dijo que nunca antes había escuchado de semejante accidente. Le pareció increíble que sobreviviera.

Mi madre y yo estamos profundamente agradecidos a Shifu.

La ley celestial está justo delante de ti. Si quieres iluminarte a ello y ser salvado es cosa tuya. ¡Me siento muy afortunado de poder cultivarme en Dafa!

¡Estoy eternamente agradecido por la gracia de Shifu!