[Minghui Net] Soy practicante de Falun Gong en la ciudad de Harbin, provincia de Heilongjiang. Mi sobrina, Pequeña Yang cumple 29 años este año. Hace siete años empezó a sufrir un profuso sangrado uterino. Después de estar hospitalizada durante seis meses, su estado de salud empeoró.

Solo cuando fue trasladada al hospital de Ha Yi, los doctores descubrieron que tenía un raro caso de cáncer uterino en último estadio. Los doctores le hicieron una histerectomía y le dijeron que solo le quedaban unos tres meses de vida.

Cuando le dije a mi marido que me gustaría tener a Pequeña Yan en nuestra casa, dijo: “¡Eres realmente valiente! ¿Puedes encargarte?”, le contesté: “Dafa es divino. Si practica los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, se pondrá bien”.

Le puse las lecciones de Shifu en audio y le comenté que dijera: “Falun Dafa es bueno”. Desde el primer día que llegó, empezó a cultivarse conmigo. Tres años después, sigue cultivándose.

Actualmente, Pequeña Yan está casada y tiene una familia maravillosa. Sus parientes vieron el poder de Dafa y agradecieron a Shifu su benevolencia. Ahora su familia le dice a todo el mundo que ve: “¡Falun Dafa es bueno!”.