[Minghui Net] ¡Saludos, reverenciado Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Comencé a practicar Falun Dafa en 1996, sin embargo, no supe cómo mirar hacia dentro por más de diez años. Parecía ser diligente en la superficie. Durante el período de cultivación personal, antes que el partido comunista chino (PCCh) comenzara a perseguir a Falun Gong, hacía los ejercicios, estudiaba y recitaba el Fa diariamente e intentaba aprovechar cada minuto. Sin embargo, no cultivé bien mi xinxing y no supe cómo mirar hacia dentro. A menudo luego de hacer los ejercicios, si alguien me decía palabras irritantes, explotaba con mal temperamento. Me sentía perturbada; ¿Por qué no podía mantener mi xinxing? Me prometía controlarme la próxima vez, pero era lo mismo cuando me topaba con otro problema.

Ya no era diligente en la cultivación en los últimos años. Tenía menos contacto con otros practicantes, no hacía los ejercicios o estudiaba el Fa todos los días, y tampoco esclarecía mucho la verdad cara a cara. Tenía un gran ego y miedo a ser criticada por otros, por lo que no hablé mucho con los demás. Tenía más y más nociones humanas desde que aflojé en el estudio del Fa, pero en lo profundo de mi corazón, tuve la sensación de urgencia y de vacío. Sabía que Dafa estaba profundamente arraigado en mi corazón y que no podía vivir sin Dafa. Este sentimiento se hizo más y más fuerte. A finales de 2011, Me di cuenta que el Maestro me estaba dando pistas. Fui a ver a los practicantes que conocía y me uní al estudio del Fa en grupo. Inmediatamente luego de leer el Fa, ellos se metieron en sus autos y usaron los teléfonos celulares (sentados en el auto) para llamar a personas y aconsejarles renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Bajo tal clase de arreglo del Maestro y con la ayuda de los compañeros practicantes, empecé a utilizar un teléfono celular para esclarecer la verdad y ayudar a la gente a renunciar al PCCh.

El proceso de aconsejar a las personas a renunciar al PCCh implica mirar dentro y elevar nuestro propio xinxing. Podemos encontrarnos con toda clase de personas en el proceso. Por ejemplo, alguna gente renunciaba al PCCh inmediatamente luego de escuchar la verdad; otras nos maldecían, otros colgaban, y otros incluso intentaban denunciarnos a la policía. Debemos estudiar bien el Fa, mantener fuertes pensamientos rectos y corazones puros, y tener gran benevolencia, entonces podremos ayudar a la gente a renunciar al PCCh.

En mi segundo día de llamadas, una persona empezó a maldecirme en voz alta justo después de empezar a explicarle por qué la gente necesita renunciar al PCCh. No sabía qué hacer ya que no había anticipado esto. La persona colgó después de insultarme. Muchos apegos salieron a la superficie; tenía un gran ego y mis años de cultivación no lo habían eliminado completamente. No quería que otros dijeran cosas malas sobre mí, ni hablar de ser insultada de esta manera. Fui a casa y me acosté en la cama, sin apetito para cenar. Le dije a mi marido, que también es practicante: “Lo llamaré de nuevo mañana”. Viendo que estaba inmersa en fuertes emociones, mi marido sugirió: “Por favor, mira hacia dentro primero. ¿Es tu apego a la competencia provocado por esa persona?”. Me calmé y estudié el Fa. El Fa de Shifu resolvió mis quejas y resentimiento. Miré hacia dentro, me medí con el Fa, y luego descubrí que no me había cultivado bien. No lo hice con tolerancia, ni mencionar benevolencia.

Me di cuenta de que la gran misericordia y compasión de Shifu nos ha dado la oportunidad de hoy para salvar seres conscientes. Mi mente se expandió y mi cuerpo se sintió ligero. Sabía que Shifu había removido las malas sustancias de mi cuerpo, soportó eso por mí, y me empujó hacia adelante. De ahí en más estudié el Fa cada día, y leí los Nueve comentarios sobre el Partido Comunista y otros materiales de aclaración de la verdad. Bajo el fortalecimiento de Shifu y el apoyo de los compañeros practicantes, ahora soy capaz de seguir esclareciendo la verdad al oyente hasta que esté de acuerdo en renunciar al PCCh, siempre y cuando no cuelgue. A veces, una persona que renuncia al PCCh ayudará también a su familia a renunciar.

Una vez, marqué un número de teléfono y la persona colgó justo después de empezar a explicarle los hechos sobre Falun Gong. Llamé de nuevo, y el contestó: “¿Sabes qué es lo que hago?”. Le dije calmadamente: “Realmente no importa lo que hagas. Cualquier cosa que haces es para servir a la gente. ¿Estoy en lo correcto?”. Él se calmó un poco: “Soy el director del xxx Buró”. Le contesté: “Ya que puedo hablar contigo, esto significa que tenemos una buena relación predestinada. Espero que aprecies esta relación y también aprecies tu vida”. Luego le expliqué por qué la gente debe renunciar al PCCh, de qué se trata Falun Gong y lo maravilloso que es Dafa. Le hablé sobre la corrupción del PCCh, la verdad sobre el caso de Wang Lijun, la naturaleza del PCCh de abandonar a la gente que ya no le sirve más, y la ley de la retribución del yeli. Seguí hablando por más de veinte minutos y sabía que Shifu me había fortalecido. El continuó diciendo: “Sí, sí, lo sé, lo sé”. Al final, le dije: “Déjame crearte un seudónimo para renunciar al PCCh. ¿Qué tal ‘Defu’ (obteniendo buena suerte)? Tomando una sabia decisión hoy, obtendrá un futuro maravilloso”. Él estuvo de acuerdo.

En otra ocasión, después de mencionar sobre renunciar al PCCh, la persona empezó a maldecirme violentamente. Mi primer pensamiento fue que no debería ser movida por su actitud. Le dije calmadamente y con dignidad: “Señor, por favor cálmese. Hay un dicho: ‘Si quieres que otros te respeten, primero necesitas respetar a los demás’. Si su hijo está cerca suyo, ¿cómo lo afectarán sus insultos a él? Incluso  los niños de jardín de infantes saben que deben ser educados al hablar, ¿cierto?”. Mis palabras lo afectaron y se calmó. Le dije calmadamente y con benevolencia: “Señor, hice esta llamada con el fin de explicarle cómo salvar su vida cuando venga la catástrofe”. Le proporcioné detalles sobre la ley de retribución del yeli, por qué el Cielo quiere eliminar al PCCh, las palabras escondidas en la piedra, la persecución del PCCh a Falun Gong, y la corrupción del PCCh.

Mi voz temblaba cuando le hablé sobre los chicos en zonas rurales, áreas pobres que no pueden darse el lujo de ir a la escuela. De repente preguntó: “¿Qué edad tienes?”. Le contesté: “Tengo sesenta años”. En el pasado, los oyentes a veces preguntaban mi edad, y no podían creer que tuviera sesenta, porque mi voz suena joven. Él dijo: “¿De verdad?”. Le respondí: “Yo cultivo Verdad-Benevolencia-Tolerancia. No te diré mentiras”. Luego le expliqué que los practicantes de Falun Dafa no solo se vuelven saludables y en forma, también encuentran paz interior. Nuestro Maestro nos dijo que debemos ser considerados con los demás en todo y cultivarnos en seres iluminados altruistas, que son mejores que los héroes ordinarios. De repente, él dijo: “Hermana mayor, ¿puedo hacerte algunas preguntas?”. Me conmovió su cambio a un término respetuoso: “Seguro”. Contesté sus preguntas pacientemente. Estaba muy satisfecho y dijo sinceramente aunque lamentándose: “Hermana mayor, soy un miembro del PCCh. Quiero renunciar”. Luego me pidió que lo llame cuando tenga tiempo. “Seguro”, le contesté. Esta conversación duró 30 minutos.

Este llamado telefónico me hizo pensar sobre muchas cosas. De insultarme al principio, a llamarme “hermana mayor” después y no querer colgar, el cambio fue impactante para mí. Me di cuenta que sólo explicando la verdad sobre Falun Dafa no era suficiente. Necesitamos usar nuestra sabiduría para desatar los nudos en los corazones de las personas y tener gran benevolencia y tolerancia para enfrentar insultos repentinos y ataques personales, por lo que no vamos a ser movidos por otros, salvándolos, en lugar de ello.

Ahora, mantengo la calma no importa con quién hable por teléfono. Para aquellos que difaman Dafa, les aclaro la verdad con firmeza y rectitud para traerlos de vuelta. Mantengo la mentalidad de un practicante, sigo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia para hablarle al lado que sabe, ayudarle a cambiar sus nociones, comprender la verdad y renunciar al PCCh. He preparado muchos materiales de aclaración de la verdad, y uso diferentes materiales según la persona. Además, el tono de voz es importante. De mi experiencia en conversación telefónica, encuentro que es más efectivo usar tonos diferentes cuando hablo con gente de diferente carácter. Por ejemplo, si compruebo que la persona es de mente abierta, mi voz es más extrovertida; si la persona es más seria, entonces mi tono es más solemne; si la persona es una mujer audaz y decidida, mi voz se vuelve un poco aguda con alegría; si la persona es una mujer delicada y gentil, hablo con una voz tranquila y baja. Por supuesto, la clave más importante es vivir con el estándar de los practicantes y estudiar bien el Fa, con el fin de tener pensamientos rectos más fuertes y el gran poder del Fa en nuestras palabras. Muchos compañeros practicantes sienten lo mismo, todo es hecho por Shifu; sólo tenemos el deseo de salvar gente.

Shifu dijo:

“Siendo ustedes Dafa dizi, cuanto más está llegando el fin, más deben caminar bien vuestro camino, aférrense bien al tiempo para cultivarse bien a ustedes mismos. Han hecho montón de cosas, pero mirando atrás, todas se hicieron con corazones humanos. El humano hace cosas humanas, pero no utiliza pensamientos rectos, adentro no contiene la poderosa virtud de los Dafa dizi. Diciéndolo de otra forma, a los ojos de los dioses, simplemente están haciendo embrollos, no es virtud poderosa, tampoco es xiulian; entonces, aunque lo hiciste, dime, ¿no lo has hecho en vano? Tienen que estudiar bien el Fa, esa es la garantía básica para regresar a vuestra posición” (Los Dafa dizi tienen que estudiar el Fa, 2011).

Sigo el Fa de Shifu para cultivarme y mirar hacia dentro continuamente. Ahora siento que mirar hacia dentro es algo muy provechoso. Además, los compañeros practicantes son espejos para nosotros para mejorar. Tengo contacto sólo con practicantes de nuestro estudio del Fa grupal. Todos tienen partes que han sido bien cultivadas. Muchas veces, encuentro que sus puntos fuertes son exactamente mis debilidades, lo que me ayuda a encontrar mis apegos y deshacerme de ellos. Espero que los compañeros practicantes aprovechen esta oportunidad plenamente para mejorarse, para observar mejor las cosas buenas de otros practicantes, encontrar las brechas propias, cultivarse bien, y mirar hacia dentro cuando ocurren problemas. Cuando un conflicto llega, incluso si parece que estamos en lo correcto, debe haber apegos para que nosotros eliminemos.

Por ejemplo, un domingo lluvioso, le dije a mi hijo: “Vamos a llamar a la gente para que renuncie al PCCh” (él manejaba mientras yo hacía los llamados). El contestó: “Estoy ocupado esta mañana, ¿qué tal esta tarde?”. Le contesté: “¿No sabes que tengo estudio del Fa grupal esta tarde?”. Contestó, “Entonces podemos hacerlo esta noche”. Le pregunté: “¿Por qué no tienes el sentido de urgencia? Hoy es domingo y está lloviendo. La gente seguramente tendrá tiempo para escucharnos ahora”. Sin embargo, mi hijo insistía que estaba ocupado esa mañana. Yo estaba enojada. Justo en ese instante, un poema de Shifu apareció en mi mente:

“Cultivador practicante

Busca tú mismo los errores

Elimina todo tipo de corazones humanos

No te quedes atrás en grandes pruebas, pequeñas pruebas, no pienses en caer

El que tiene la razón es él

El que está equivocado soy yo

¿Por qué contienden?”

(“Quién tiene razón, quién no”, de Hong Yin III)

 

Pensé que debía haber algún apego mío para eliminar, de lo contrario esto no habría sucedido. Miré hacia dentro, y desde diferentes perspectivas, pero todavía sentía que estaba en lo correcto, porque buscaba salvar a la gente. Por más importante que la actividad de mi hijo haya sido, no podía ser más importante que salvar seres conscientes. Finalmente, encontré mi apego. Ya que mi hijo estaba ocupado, ¿por qué quería obligarlo a ir conmigo?, ¿pensé en los demás primero, como Shifu nos dijo de hacer? ¿No era egoísta pensar sólo sobre lo que era bueno para mí y no considerar sus sentimientos? Después de identificar estos apegos, me calmé y sentí que estaba siendo elevada mientras estos apegos estaban siendo eliminados.

Hoy, compartí mis experiencias con respecto a mirar hacia dentro. No estoy diciendo que me he cultivado bien. Comparado con esos practicantes que se han cultivado bien, me siento muy por detrás. Acabo de empezar con la verdadera práctica de cultivación de mirar hacia dentro y todavía tengo muchos apegos que eliminar. Voy a estudiar más el Fa y aprovechar cada minuto para cultivarme diligentemente, y hacer bien las tres cosas que Shifu nos dijo que hiciéramos.

¡Gracias misericordioso Shifu por darme todo! Todo lo que puedo hacer es ser diligente, diligente, ¡y más diligente!

Junto ambas manos para heshi, y me inclino hacia Shifu.

Estuve un poco apresurada en escribir este artículo ya que lo comencé tarde. ¡Por favor, señalen mis brechas!

Categoría: Referencias