Aprendiendo a escuchar

[Minghui Net]

Me estaba sufriendo yeli de enfermedad hasta que un día me encontré con el practicante A. Le conté sobre mi yeli de enfermedad con la esperanza de que pudiera ayudarme a encontrar la causa fundamental.

“Me ha estado doliendo el brazo por varios días y ya casi no puedo hacer el segundo ejercicio. Todavía no he entendido cuál es mi problema, y tú quieres que te ayude”, respondió el practicante A.

Al día siguiente me encontré con la practicante B y le pedí que me ayudara. Me respondió: “Mi estado de cultivación no es muy bueno últimamente, te iba a pedir que me ayudaras tú a mi”.

Me sentía decepcionada que no pudieran ayudarme, pero al mismo tiempo pensé: “¿Por qué ingnoraron mis preguntas y hablaron sobre ellos? ¿Pero es que acaso yo no hice lo mismo? ¿No es esto una señal de egoismo?

Razonando mis faltas

Recuerdo que cuando los practicantes encontraban pruebas de xinxing y querían compartir conmigo, yo no les escuchaba, no me ponía en su lugar y compartía con ellos en base al Fa para que pudieran superar la tribulación. En cambio, les interrumpía antes que pudieran terminar, decía lo que quería decir primero, e ignoraba sus preguntas.

Cuando algunos practicantes sufrían yeli de enfermedad y me pedían que les ayudara les decía: “He estado experimentando las mismas pruebas por varios días y tampoco he podido superar la situación”. Así que ellos terminaban ayudándome a mi.

A veces cuando mi estado de cultivación no era bueno, no era comprensiva ni simpatizaba con los practicantes que estaban pasando por tribulaciones. Por el contrario, no les hablaba de manera condescendiente y los criticaba en voz alta. Los cuestionaba a la vez que trataba de hacer que cumplieran con los principios del Fa.

Les decía cosas como: “Has estado practicando por largo tiempo, ¿Cómo es que eres capaz de cometer esos errores de esa manera? Eso es inaceptable”. No los ayudaba y probablemente empeoraba las cosas para ellos. Me di cuenta que en el proceso de ayudar a los practicantes, nosotros también nos estamos cultivando. ¿Estamos realmente pensando en los demás? ¿O es que meramente estamos usando la oportunidad para hablar sobre nosotros e ignorar sus problemas? Una vida en el nuevo universo no debería comportarse de la manera en la que yo lo hice.

Dejando ir el egoismo

Un practicante me contó una historia: “Había una practicante de la tercera edad en nuestro grupo de estudio del Fa. Todo el mundo pensaba que ella se cultivaba bien. Tenía un muy buen cutis y se veía tan joven. Hace poco, luego del estudio del Fa grupal, dijo que su visión era borrosa. Le pidió a todo el mundo que le ayudara a encontrar donde se estaba equivocando. Pidió ayuda muchas veces, pero nosotros sólo la ignorábamos y seguíamos hablando sobre nosotros mismos. A veces discutíamos en voz alta. Todo el mundo solía ignorar a esa practicante porque hablaba muy lento. Al final, dejó de hablar y se sentó sola en una esquina. A veces se iba sin decirle a nadie. Un día escuchamos que había sido hospitalizada. Un par de días después, escuchamos que había dejado la práctica”.

No fue sino hasta ese momento que nos dimos cuenta de lo egoistas que fuimos. La practicante anciana había mencionado que su visión era borrosa muchas veces, pero ¿A quién realmente le preocupaba lo que a ella le sucediera? ¿Quién realmente la ayudó y compartió con ella en base a los principios del Fa? Luego del estudio del Fa grupal, todo el mundo quería hablar. A la practicante le costaba expresarse bien. Cuando otros la ignoraban, ella pensaba que no se estaba cultivando bien porque no podía romper con el yeli de enfermedad. Los elementos malignos vieron claramente la situación, intensificaron la persecución y la sacaron del grupo.

Sea que estemos compartiendo en un grupo o entre nosotros, no deberíamos poner mucha importancia en nosotros, o pensar en nosotros e ignorar a los demás. Eso es ser egoísta. Cuando los practicantes plantean problemas con respecto a proyectos de Dafa o yeli de enfermedad y piden ayuda, deberíamos escucharles en silencio, pensar en tranquilidad y no interrumpirles o apurarnos a hablar. Si realmente podemos lograr eso, sin importar cuanta ayuda podamos ofrecerles, estamos siendo menos egoistas.

Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2013/10/24/142874.html