[Minghui Net] Tenía la impresión de que ya había eliminado mis apegos de fama y al dinero en mi cultivación, pero me di cuenta de que, en realidad, no lo había hecho. Muchos apegos permanecen escondidos y a través de mi diligencia en la cultivación, salen a la superficie. Recientemente, leí la nueva conferencia de Shifu, “20 años enseñando el Fa”, y llegué a la conclusión de que todavía tengo el apego a la codicia. En el pasado Shifu habló sobre la estructura del universo y sus muchos niveles y de este modo se expandía nuestro horizonte. Shifu también mencionó que los Dafa dizi procedían de niveles altos. Al escuchar esto, me sentí satisfecho. Me preguntaba de qué nivel elevado venía. Shifu una vez dijo que los niveles por debajo nuestro son claros como cristal para nosotros de un vistazo, pero los que están por encima de nosotros siguen siendo un misterio. Como mi mente estaba pasando por este proceso, me sentía perdido y apesadumbrado, pensando que incluso aunque fuera más alto, lo que está por encima de mí sigue siendo un enigma. A menos que yo sea el firmamento colosal del que Shifu estaba hablando, entonces todo dentro es claro como cristal para mi de un vistazo. Sin embargo, Shifu también dijo que más allá de este firmamento colosal hay aún muchos más firmamentos colosales que son distintos del que habitamos. Entonces, ¿cómo son estos firmamentos colosales? Siempre he tenido este pensamiento irracional, curiosidad y deseo de saber.
En “20 años enseñando el Fa”, Shifu explicó nuevamente la enormidad del universo. El universo es simplemente demasiado grande para abarcar. Sin embargo, incluso tal universo es aún una mota de polvo en un universo mayor. El universo es simplemente ilimitado, tan vasto que mi imaginación nunca puede comprenderlo. Me siento lleno del apego al “deseo” que tenía en el pasado. ¿De dónde venía este apego? ¿Por qué no lo reconocía antes? Sé que este apego deriva del egoísmo. Es una noción establecida. A muy temprana edad, fui adoctrinado por la cultura del partido y me dejaba llevar por la búsqueda de fama y dinero. Cuando acababa de entrar a la escuela primaria, ya estaba pensando en ir a la universidad. Eso fue durante la Revolución Cultural. Mis notas en la escuela era buenas, pero no estaba destinado a ir a la universidad. El malvado partido promueve: “Un soldado que no quiere ser el mariscal no es un buen soldado”, “un atleta que no quiere ser un campeón no es un buen atleta”. La cultura del partido, de hecho, ha inflado la envidia, los deseos y la lucha de la gente. De hecho, la vida de la gente está predestinada. Es arreglada por los dioses. Las vidas tienen niveles. Todas las profesiones tienen jerarquías. Todo el mundo tiene su posición en la sociedad. Solo hay un rey en una nación, un comandante en un ejército, un campeón en una competición. Si uno insiste en luchar incansablemente por algo, esto fomentará la codicia y el deseo, e inconscientemente corrompe la mente de la gente. ¿Por qué hay tantos funcionarios corruptos? Todo es causado por la codicia y el deseo. La cultura tradicional hacía hincapié en el auto-control, la aceptación, la armonía entre hombre y naturaleza, siguiendo el curso de la naturaleza, etc, y la codicia y el deseo de la gente eran relativamente pequeños. Durante mi cultivación, aunque mi codicia por cosas comunes es bastante pequeña e insignificante, esta codicia ha cambiado hacia perseguir niveles de cultivación más elevados. Sé que debo rigurosamente eliminar este apego.
A través de las conferencias de Shifu, entiendo que más allá de “los tres reinos”, todas las vidas se sienten bien consigo mismas. Los dioses no tienen el apego de sentir descontento como la gente común. No tienen codicia ni deseo. No podemos usar la mentalidad humana para pensar en los dioses. Shifu dijo en el pasado que el foco de los dioses está en volver a sus hogares, sin importarles cuan bajo o alto sea su nivel. El pensamiento caprichoso o la fantasía son ilusiones falsas y llevan a la codicia y el deseo, que son apegos humanos. ¿Cómo podemos llevarnos “codicia” y “deseo” a los cielos? No podemos entrar al paraíso sin eliminarlos. Solo cuando tomemos las enseñanzas de Shifu en nuestros corazones, hagamos lo que se supone que tenemos que hacer, salvemos a quienes se supone que tenemos que salvar, cumplamos con nuestras misiones y responsabilidades, y nos cultivemos sólidamente bien seremos capaces de volver al hogar con Shifu.
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Categoría: Mejorándose uno mismo