[Minghui Net] En 1997 sufría de uremia, que empeoraba gradualmente a pesar de los distintos tratamientos. Mi cuerpo se hinchó por todas partes y era difícil mover los pies o ponerme los zapatos. Mis hinchados riñones tenían que ser cubiertos por ropa. Mi cara hinchada reducía mi visión a una linea, y no podía ver nada con claridad. No podía sentarme o tumbarme más que en una posición, y tenía que evacuar con la ayuda de medicina. Realmente no podía encontrar palabras para expresar mi pesar. En una palabra, me estaba muriendo.

Fui enviada al hospital de Shenynag, que estaba especializado en uremia. Durante el tratamiento, sufrí un embolia arterial. Más tarde, mis familiares me ingresaron en el centro de rehabilitación de Liaoning para ser tratada por el Doctor Xue, un famoso especialista de riñón. Pasé varios meses mantenida con vida por medicina cara, pero aún así mi enfermedad empeoraba.

Volví a Fushun en mayo de 1997 y me quedé en casa de mi hermana. A la mañana siguiente, mi hermana y mi cuñado me llevaron a dar una vuelta por la plaza Tianfeng. Escuché una bella música y vi a muchas personas haciendo algo pero no estaba segura de qué era. Mi cuñado dijo que estaban haciendo ejercicios. Cuando dije que quería hacer los ejercicios, él contestó: “¿Cómo vas a poder hacer los ejercicios estando tan enferma? ¡Pues hazlos!”. El grupo estaba practicando el segundo ejercicio en ese momento, y me uní. Después de 20 minutos, de repente me senté en el suelo. Otros querían levantarme, pero yo no me movía. Un joven vino y me preguntó: “¿Qué pasa? ¿Estás enferma? Te pondrás bien. Mi Shifu está purificando tu cuerpo. Estarás mejor pronto”. En ese momento, sentí algo bajo las nalgas. Entonces, pude levantarme yo misma, algo que antes no podía hacer. Sentía dolor en el estómago y me fui deprisa al baño de la casa de mi hermana, donde evacué líquido durante más de veinte minutos. Mi hermana, preocupada, llamaba a la puerta para comprobar que estaba bien. Yo respondí débilmente: “¡No te preocupes, estoy bien!”. Después de un rato, me levanté lentamente y me fui del baño.

Varios minutos después, ¡me sentía tan relajada! Estaba perpleja y preguntaba qué clase de medicina había tomado. Mi hermana dijo: “No tomaste ninguna medicina. Dijiste que te morías y que las medicinas serían inútiles, así que las tiraste”. Todo el mundo a mi alrededor estaba atónito y maravillado. Recordaba al joven diciendo que alguien había purificado mi cuerpo. Simplemente levanté los brazos para practicar un rato ¿y funcionó? En realidad, ahora sé que debido a que quería practicar Falun Dafa, Shifu me ayudó a eliminar mi enfermedad. Debido a que no había sido capaz de comer durante un tiempo, agarré con hambre algo de cerdo y comencé a comer. La gente que visitaba a la familia de mi hermana en ese momento me vio y exclamó: “¡Es un milagro!  Se estaba muriendo y de repente  parece recuperada y ahora puede comer comida. ¿No se ha recuperado?”. Cuando volví a la plaza Tianfeng a la mañana siguiente, un practicante de unos cuarenta años me dijo: “Eso es Falun Gong. Falun Gong puede ayudar a la gente a eliminar las enfermedades. Si lees Zhuan Falun, entenderás totalmente por qué”.

Leí Zhuan Falun esa noche. Fue mágico; vi cada palabra brillando y girando como una bombilla. Atónita, pedí a otras personas que echaran un vistazo, pero no veían nada y pensaban que mi visión estaba empeorando debido a la edad. Contesté: “No, no debería ser así. Es realmente así”. Al tercer día, fui a la plaza Tianfeng otra vez y les conté mi experiencia a otros practicantes. Ellos dijeron: “Tienes una relación predestinada con Falun Gong. ¡Estudia diligentemente!. ¡Shifu ya está cuidando de ti! Cuando les pedí que me dieran un Falun, todos los practicantes rieron. Uno dijo: “No podemos hacer eso. Solo Shifu puede hacer eso. Shifu te ayudará, y necesitas estudiar Zhuan Falun y así sabrás”. Me dieron un juego de música de ejercicios grabada y un emblema de Falun. Desde ese día en adelante, creía firmemente en Dafa y estudiaba Zhuan Falun diligentemente. Dos días después, aprendí el ejercicio sentado. Empecé a cultivarme verdaderamente en Dafa y hacía lo posible para asegurar que mis actividades diarias se conformaran con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, considerar a los demás primero y ser una buena persona fuera donde fuera. Apreciaba realmente mi fortuna al haber encontrado tal práctica de cultivación de alto nivel.

El 20 de julio de 1999, Jiang Zemin lideró al partido comunista chino (PCCh) para comenzar a perseguir a Falun Gong. Su propaganda y difamación contra Dafa provocó que mucha gente predestinada perdiera su oportunidad de practicar y beneficiarse de Dafa.

En los días turbulentos, mi fe en Dafa nunca se tambaleó. Aclaraba los hechos sobre Dafa al público y en los siguientes 13 años no he necesitado ninguna medicina, y mi cuerpo es muy saludable y vital. ¡Fue Shifu quien me dio una segunda vida! ¡Agradezco sinceramente a Shifu por su benevolente gracia!