[Artículo seleccionado] Teniendo fuertes pensamientos rectos durante una inundación

[Minghui Net] La lluvia caía torrencialmente, el nivel del agua seguía subiendo en las calles y el sonido de las sirenas de los carros de policía y los gritos de la gente se entremezclaban. La gente estaba ocupada sacando sus pertenencias. En medio de todo esto mi casa se convirtió en un lugar seguro para otras personas.

El agua estaba solo a 50 centímetros, abajo del punto más alto de mi “isla”. Todos mis vecinos habían empacado sus pertenencias. Ellos venían a preguntarme qué iba a hacer yo. Si yo quería mover mis cosas, tenía que empezar a empacar inmediatamente. Soy dueña de una tienda. Viendo el montón de productos, ¿cómo podía prepararme para sacarlos rápidamente yo sola? Dije, con fuertes pensamientos rectos: “Maestro, por favor ayúdanos y no dejes que suba el agua”. Con este pensamiento firme, el agua no subió más.

Con el Maestro en mente, el agua no subió

Era el 5 de septiembre de 2004 cuando la ciudad de Dazhou quedó gravemente  inundada. La compuerta de la represa no se abrió oportunamente, causando que el nivel del agua creciera drásticamente. La inundación afectó mucho terreno y causó gran daño a las casas y sus pertenencias.

La fábrica textil del distrito de Tongchuan en Dazhou se localizaba en una península de tierra relativamente baja al sur del puente Zhouhe. El lugar en donde estaba la fábrica era uno de los lugares más afectados por la inundación. La fábrica cuenta con 15 edificios para sus 1000 trabajadores. El agua cubrió el primero y segundo piso de 10 edificios. En todo el terreno de la fábrica solo un área de 80 por 30 metros estaba arriba del nivel del agua, formando una “isla”. La parte más alta del terreno estaba sólo 50 centímetros por encima del agua. Mi casa estaba en esa “isla”.

Todo el mundo estaba muy ocupado transportando cosas a terreno más alto. Los vecinos también estaban esperando ver lo que yo iba a hacer. Como mi tienda tenía muchos artículos y yo no disponía de suficiente personal que me ayudara a mover todo, decidí no mover nada. Tuve una creencia firme en el Maestro y en Dafa. Le pedí al Maestro que detuviera la subida del agua. Mi vecina vino y me urgió a sacar todo de ahí. Le dije con fuertes pensamientos rectos: “No voy a sacar nada. El agua no va a subir más alto”. Con este firme pensamiento, el agua dejó de subir. Viendo que yo no sacaba mis cosas, mis vecinos también dejaron de sacar sus cosas. Mucha gente fue testigo del milagro de Dafa en este incidente.

Teniendo en mente Verdad, Compasión y Tolerancia y pensando en los demás

El Maestro dijo en “La naturaleza fo no tienen ningún punto débil”, en Escrituras esenciales para un mayor avance:

También quiero decirles a ustedes que su naturaleza pasada estaba fundada sobre la base del egoísmo e interés personal. De ahora en adelante, cualquier cosa que hagas, deberás primero tener consideración hacia otros, para que así que obtengas la honrada iluminación de desinterés y altruismo. Entonces de ahora en adelante, en cualquier cosa que hagas o digas, ¡deberás tener en consideración a otros, a las generaciones futuras, como también la eterna inalterabilidad de Dafa!

Ese día, un director del departamento industrial del distrito de Tongchuan llevó a dos supervisores a la fábrica para dirigir los esfuerzos de prevención de desastres. Poco después el único camino hacia la fábrica fue cubierto por un metro de agua. No había ningún medio de transporte que pudiera pasar por el agua. Hasta el agua para beber faltaba. Los trabajadores de la fábrica se enfrentaban a grandes dificultades.

Alrededor de las 4 p.m., el personal del departamento industrial se paró frente a mi tienda con aspecto deprimido. Los invité a entrar. Cuando escuché que no habían almorzado, me pregunté qué podía ofrecerles de comer. La sopa de tallarín instantánea y el agua embotellada se había agotado y tomaría tiempo cocerles arroz. Así que tomé los tres últimos paquetes de sopa de tallarín instantánea que mi hijo menor apartó en caso de emergencia. Ellos se conmovieron con este gesto y lo agradecieron.

Cuando terminaron de comer, me preguntaron cuanto era de los tallarines. Les dije que 4.5 yuanes. Quedaron sorprendidos: “¿Por qué tan baratos? Es el precio que cobran en el supermercado. En esta situación extraordinaria no has subido el precio, además, usaste tu agua para cocernos los tallarines. Eres una persona tan buena”.

Les contesté: “Mi familia practica Falun Gong. Es verdad que los precios han subido en algunos lugares, pero yo no lo haría solo porque hay inundación. Esta mañana vendí todos mis productos al precio normal. Es más, podía regalarles una bolsa de sopa instantánea pero mi esposo fue sentenciado a cuatro años de prisión por decirle a la gente la verdad sobre la bondad de Falun Gong. El departamento industrial lo despidió entonces. Ahora tengo que mantener a nuestros tres hijos con el dinero que ganamos en esta tienda de abarrotes.

Por difícil que sea la situación, nosotros escuchamos las palabras de nuestro Maestro de ser una buena persona. En el pasado, el administrador de la fábrica era presionado para sacarnos de este edificio de departamentos, a pesar de que los edificios se construyeron con la aportación de los empleados. Si me hubieran obligado a salirme, ¿quién habría cocido la sopa instantánea para ustedes hoy? Por favor recuerden que Falun Dafa es el Fa recto, los practicantes de Falun Gong son buenas personas, y mi esposo fue sentenciado injustamente”. Ellos me dijeron: “Realmente eres una buena persona. Nosotros conocemos a tu esposo”.

Al caer la noche, la lluvia amainó. Salí a revisar el nivel del agua a las 9 p.m. Vi algunas personas en la calle enfrente de mi tienda. Les pregunté por qué estaban ahí. Me dijeron que no habían encontrado un lugar para quedarse. Sentí pena por ellos, me dí cuenta que si hubiera salido antes, ellos no estarían tristes. Inmediatamente les dije: “Por favor entren a mi casa. Vamos a ver cómo nos acomodamos esta noche”.

Una joven pareja de otro pueblo se conmovió tanto que sus ojos se llenaron de lágrimas. Yo les dije: “Mientras ustedes se sientan a gusto, ustedes pueden quedarse en mi casa”. Mi departamento tiene solo 70 metros cuadrados (630 pies cuadrados) Aparte de la tienda al frente, el área de bodega, la cocina y el baño, solo tenemos dos pequeñas recámaras y una sala. Puse a mis tres hijos en un cuarto, y los cuatro nos apretujamos en una cama. Una familia llamada Feng tomó otro cuarto. La joven pareja durmió en una cama individual en la sala y otra persona durmió en una silla. Nos las arreglamos para  superar las dificultades esa noche. Nunca olvidé que soy un discípulo de Dafa.

Es la primera vez que escribo sobre mi cultivación. La dedico al vigésimo aniversario de la introducción de  Falun Dafa y al Día Mundial de Falun Dafa.

Por favor indiquen cualquier cosa que no esté dentro del Fa.