[Minghui Net] El pasado año cuando mi familia se estaba construyendo una nueva casa, me encontré con algunos problemas. Cuando había un problema, miraba dentro y me cultivaba para eliminar mis apegos humanos. Fue terriblemente doloroso cuando no podía abandonar los apegos. Luego estudiaba el Fa más y enviaba pensamientos rectos con más frecuencia. Cuando seguía sin poder eliminar los apegos, le pedía ayuda a Shifu. Después de eliminar el apego, miraba atrás y me daba cuenta de que realmente no había sido nada.

Cuando no podía eliminar el apego al interés personal, recitaba repetidamente la enseñanza de Shifu, “Cultivación genuina”:

“Mis discípulos que se cultivan genuinamente, lo que les he enseñado es el Fa para la cultivación del fo y para la cultivación del dao. No obstante, ustedes me exponen sus quejas por haber sufrido pérdidas en sus intereses personales, en vez de sentirse angustiados por no poder dejar sus apegos entre la gente común. ¿Se le puede llamar a esto xiulian? En cuanto a si puedes dejar la mentalidad de una persona común o no, es un paso crítico para convertirte en un ser realmente extraordinario. Cada discípulo que cultiva genuinamente tiene que pasarlo, porque esto es la línea de demarcación entre un cultivador y una persona común”.

(“Cultivación genuina”, Escrituras esenciales para mayor avance)

Seguí recitándolo, me determiné para eliminar el apego al interés personal. De forma espontanea la sustancia mala se eliminó y me sentí de nuevo alegre.

Mi marido no es practicante. Viendo que nuestro vecino había construido una nueva casa quería hacer lo mismo. Traté de convencerle para que no lo hiciera, pero insistió y finalmente tuvimos que hacer lo que él deseaba. Esto realmente me entristeció y me hizo llorar varias veces. Me di cuenta de que algo iba mal dentro de mí. ¿A qué estaba apegada? ¿Por qué estaba triste? Shifu dijo:

“De hecho, cuando consideras que tu reputación, intereses personales y sentimientos están siendo perjudicados entre la gente común y sientes angustia, esto significa que todavía te aferras a los apegos de la gente común. Deben recordar esto: la cultivación en sí misma no es tan dolorosa; el punto clave es poder dejar los apegos de la gente común. Sólo cuando estés a punto renunciar a tu reputación, intereses y sentimientos, sentirás dolor”.

(“Cultivación genuina”, Escrituras esenciales para mayor avance)

A través de recitar este párrafo, encontré mi apego. Durante más de 30 años cultivé un huerto al lado de mi casa. Ofrecía verduras a toda mi familia y ganábamos varios miles de yuanes vendiendo verduras extra. Me apegué a este huerto y odiaba tener que abandonarlo para construir una nueva casa. Me di cuenta de que en realidad era mi apego al interés propio y al sentimentalismo. A medida que recitaba más el Fa, mi apego se eliminaba y ya no estaba triste. Me relajé y me sentí de nuevo feliz.

Mi familia contrató a 17 trabajadores para construir la casa. Me di cuenta de que era gente con relación predestinada  y que debía aclararles la verdad sobre Falun Gong. Primero envié pensamientos rectos para eliminar los factores malvados detrás de ellos. Luego hablé con ellos y les conté lo maravilloso de Dafa y los crímenes malvados cometidos por Jiang Zemin en perseguir a Falun Gong. Usé cada oportunidad para aclararles la verdad. Al final, todos ellos entendieron y renunciaron al partido comunista chino (PCCh) y a sus organizaciones afiliadas. Era un verano caluroso y la temperatura superaba los 32 grados cuando construimos la casa. Los trabajadores estaban empapados en sudor, así que les llevaba cada día agua helada y delicias congeladas. Estaban muy felices y agradecidos.

Después empecé a usar mi nevera para hacer agua helada. Sin embargo, la nevera dejó de funcionar. Miré dentro y busqué mis apegos humanos, pero no pude encontrarlos. Luego llamé al de mantenimiento y le pedí que me arreglara la nevera. Vinieron dos técnicos, y les conté los hechos sobre Falun Gong. Gritaban: “¡Falun Dafa es bueno!”. También renunciaron al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.

Un día fui a distribuir DVDs de Shen Yun. Me llevé más de 10 copias, pero al mediodía no había repartido ni una. Me sentí muy triste por los seres conscientes. Cuando traté de darle uno a un joven de unos 20 años, no lo aceptó, no importaba cómo se lo explicara. En aquel momento tenía el deseo sincero de salvarle. Finalmente, desde lo profundo de mi corazón le dije: “Joven, no te estoy pidiendo nada. Sinceramente espero que veas esta actuación y que tengas un futuro brillante”. El joven tomó el DVD con ambas manos y dijo repetidamente: “¡Gracias!” Empecé a llorar. Me iluminé a que cuando sinceramente deseamos lo mejor para los demás, su lado que sabe puede sentirlo. Shifu nos ha dado un camino para salvar seres conscientes. Solo necesitamos caminarlo.

Como Dafa dizi, necesitamos cultivar cada pensamiento y hecho,  y conducirnos según el Fa. Por otro lado no seremos capaces de cumplir con nuestras responsabilidades. Tenemos una gran misión y responsabilidad; vamos a avanzar diligentemente  cultivarnos para eliminar los apegos humanos, hacer bien las tres cosas, y volver a casa con Shifu.