[Minghui Net] Trabajo como médico en un hospital. Desde que comencé a practicar Falun Gong en febrero de 1999, he tenido muchas experiencias milagrosas. Quiero compartir con ustedes una de ellas.

Un día después de almuerzo, entré a trabajar al cuarto de guardia del hospital. Escuché a una niñita llorando afuera del pasillo del departamento de servicio ambulatorio. Seguí el sonido buscándola, vi a cuatro o cinco personas juntas paradas al costado de las escaleras y a una niñita en cuclillas apoyada en la pared. Parecía de unos diez años. Mientras lloraba, golpeaba su cabeza contra la pared. Dos personas trataron de que parara para que no se hiciera daño, mientras que el resto continuaba parada ahí también llorando. Inmediatamente me acerqué a ella, la ayudé a pararse y le pregunté: “¿Qué pasó? Estoy de guardia hoy. Si necesitas ayuda, por favor házmelo saber”. 

Dejó de llorar, pero sus ojos estaban hinchados y rojos. Me miraba con gran dolor. Peiné sus cabellos con mis dedos y pude notar que un gran pedazo de cabello se le había caído. Me sentí muy triste por ella y le pregunté: “¿Cuál es tu nombre?”. Ella respondió con voz ronca: “Soy Ermao”.  Luego una señora de mediana edad empezó a hablarme. Me dijo que la niñita era su hija y que vivían en un pequeño pueblo del campo. Ermao había sido recientemente diagnosticada de un tumor en el cerebro que estaba localizado en un área llena de nervios. Era muy riesgoso operarla, ya que podría quedar completamente paralizada debido a la cirugía. Cada vez que tenía un dolor de cabeza, no se podía controlar. Gritaba, lloraba incontrolablemente, se golpeaba contra la pared y se arrancaba los cabellos. Su madre no sabía qué hacer, por eso había llevado a Ermao al hospital, pensó que de repente el médico le podría recetar pastillas para dormir, para que ella pudiera calmarse. Pero los médicos le habían dicho que no tenía ninguna enfermedad mental y por eso no le podían dar pastillas para dormir.

Al mirarla pensé: “Si éste hospital no puede curarla, por qué no pedirle que trate otro método, de repente podría ocurrir un milagro”. Le dije a su madre: “Tengo una idea, quizás si la prueba, un milagro podría ocurrir”. Su madre respondió: “¿Qué gran idea?”. Le dije: “Haz que recite dos oraciones. Son muy fáciles de recordar, ven conmigo. Vamos a mi oficina”.

Llevé a Ermao al cuarto de guardia y saqué mi amuleto (1) de Dafa de mi cartera. Señalé las oraciones en el amuleto y pedí a Ermao que las leyera. Su madre dijo: “Me temo que no sabe leer. Tiene 17 años, pero debido a que tiene una severa deficiencia en la tiroides, es muy bajita y retrasada mental. No ha ido al colegio y solo aprendió 100 caracteres cuando fue a un colegio de educación especial. Ahora tiene un tumor en su cabeza. ¡Pobre niña!”.

Luego el padre de Ermao dijo: “Ermao dejó de llorar cuando te vio. ¡Quizás ustedes dos tienen una especial relación predestinada!”. Todos nos dimos cuenta en ese momento que efectivamente Ermao había dejado de llorar desde que la conocí. También me di cuenta que Ermao estaba ahí para ser conectada con Dafa. Señalé el amuleto y le dije: “Déjame enseñarte a leer Falun Dafa es bueno, Verdad – Benevolencia – Tolerancia es bueno”. Ella repitió las palabras con ceceo dos veces y luego muy feliz me dijo, “Gracias”. Todos los presentes se sintieron muy felices por ella.

Tomé lápiz y papel para enseñarle como escribir, “Falun Dafa es bueno”. Ella escribió dos veces sin equivocarse. Luego bajó el lápiz y me dijo: “¡Muchas gracias!”. Su padre dijo agradecido: “Hemos conocido a una deidad viviente hoy. Ella tenía mucho dolor, ahora casi de inmediato sonríe de alegría”. Les dije: “Ella tiene una relación predestinada con Dafa. Deben pedirle que escriba: "Falun Dafa es bueno" todos los días cuando regresen a casa. Les voy a dar un DVD del show de Shen Yun para que lo vean cuando regresen”.

Cuando saqué el DVD de Shen Yun del cajón, Ermao repentinamente se arrodilló en el piso mirándome y dijo: “¡Gracias!” Le respondí: “Deberías agradecerle al Maestro de Dafa”. Todos en la oficina estaban conmovidos. Su padre me preguntó mi nombre y número telefónico. También me quiso dar 200 yuanes, pero no los recibí. Le di al padre el DVD de Shen Yun y le dije: “Como practicantes de Falun Gong, no recibimos dinero. Ella ha sido bendecida hoy por nuestro Maestro. Si quieren agradecer, sólo cuenten a su familiares y amigos lo que ha sucedido hoy, déjenles saber que Falun Dafa es el Fa Buda”.

Cuando se fueron, me sentí tan conmovida que lágrimas cayeron por mis mejillas. El Maestro es muy compasivo. Le quitó un gran sufrimiento a Ermao en solo minutos. Ermao se recuperó completamente y regresó a casa feliz, como una nueva persona.

Muchos meses después, recibí una extraña llamada de alguien en otra ciudad. Una madre me preguntaba si yo había curando el tumor de una niñita. Pregunté cómo sabía de esto. Me contó que su hija estaba enferma y habían regresado a casa después de haber estado un tiempo en el hospital.  Fueron a la clínica de un famoso médico chino, y él les dijo que no podía curar el tumor de la niña, pero que conocía la historia de otra niña con la misma condición que había sido curada sin ninguna medicina, usando otro método. La señora y su hija habían visitado a Ermao en su casa. Me contó que Ermao estaba muy bien y que escribía todos los días en su casa “Falun Dafa es bueno”. La madre me dijo que quería que viera personalmente a su hija. Le dije: “No tienes que venir hasta acá. Sólo pide a tu hija que recite "Falun Dafa es bueno, Verdad – Benevolencia – Tolerancia es bueno" todos los días”. Ella estaba muy contenta y me dijo que le pediría a su hija que lo haga.

Nota: (1) Amuletos – En China, a veces los practicantes para clarificar la verdad dan a las personas algo muy pequeño para usar con una pequeña inscripción que les ayude a recordar la bondad de Dafa.