[Minghui.net] Shifu dijo:

“Si pones a Dafa en un lugar secundario y ubicas tus poderes divinos en un lugar importante, o por estar iluminado crees que este o ese entendimiento tuyo es correcto y hasta te consideras extraordinario y consideras que sobrepasas a Dafa, yo digo que ya has empezado a caer hacia abajo; entonces ya es peligroso y te volverás cada vez peor.”

Miré dentro y encontré el apego de pensar que era excepcional, aunque no había completado mi cultivación. Me di cuenta que muchos de los practicantes a mi alrededor también tenían el mismo apego. Algunos parecían tener comprensiones muy claras del Fa y podían incluso memorizarlo. Los practicantes jóvenes se quejaron de los más antiguos, pensando que eran muy importantes porque Shifu dijo que los practicantes de Dafa eran magníficos. Actuaron orgullosos y pensaron que otros practicantes no eran tan buenos como ellos. Después de mirar en el interior, llegué al entendimiento que resumo a continuación.

1. Comprendo que si hacemos cosas buenas, es porque aplicamos los requerimientos del Fa a nuestro nivel. Shifu dijo, “Ningún Fa es definitivo” (Zhuan Falun). A un nivel elevado, cualquier cosa que hagamos podría considerarse incorrecta. Practicantes que completen su cultivación comprenden la verdad en su nivel, pero esto puede no ser el nivel más alto. Si creemos que nuestros entendimientos son absolutamente correctos, corremos el peligro de pensar que somos excepcionales.

Por ejemplo, al principio no me gustaba compartir con otros practicantes, pero después cambié de opinión y sentí que era muy positivo compartir entendimientos con otros. Sin embargo, si hablábamos una y otra vez sobre las mismas ideas, algunas veces no era un uso adecuado de nuestro tiempo. De vez en cuando escogía un artículo de Minghui como tema principal para compartir, con el fin de evitar alguna discusión con aquellos que tuvieran diferentes entendimientos a los míos. Creo que tengo que mejorar mucho con esta actitud.

2 . Tengo el defecto de tratar de parecer mejor que  otra persona al hacer algo, y de destacar su debilidad para hacerme ver bien. Por ejemplo, un practicante dijo a otro, “Salvé más  de diez mil seres conscientes. ¿Cuántos has salvado tú?” El practicante supo que no lo estaba haciendo tan bien como este y no quería quedar mal. Respondió, “¿Y tú? Te peleaste con tu hermano pequeño. ¡Significa que no cultivaste bien tu xinxing!". Tengo el mismo apego.

Si llegaba a algún nuevo entendimiento, iba a compartirlo con otros como si nadie pudiera entenderlo mejor que yo. Creía que los practicantes que no eran buenos para hablar no eran tan diligentes como yo. Solía darme cuenta que estos practicantes que he despreciado en realidad aclararon la verdad de una manera muy eficaz y compasiva. Cuando fue mi turno para aclarar la verdad, tuve dificultad para empezar, u obligaba a otros a escuchar y no podía calmarme en absoluto. Solo estaba prestando atención a las cosas negativas de los demás, y no me di cuenta de sus cualidades. Lo que vi no era la verdad absoluta y no debí juzgarlos.

Otro apego se manifestó a través de juzgar a las personas basado en las apariencias externas. Siempre pensé que alguien que era atractivo y sin arrugas probablemente se cultivaba más diligentemente.

Otra practicante tenía esta misma noción. Un día, estaba enviando pensamientos rectos al lado de un practicante mayor con arrugas en su cara. Pensé: “¿Como puede este hombre haberse cultivado por tantos años? ¿Por qué tiene la cara llena de arrugas?”. Sin embargo nos enteramos, que este practicante mayor era en realidad una hermosa joven Bodhisattva. Esta practicante se dio cuenta: “No podemos decir como son las personas por sus apariencias. Nos puedes parecer muy enérgico, pero puedes no ser tan bueno como practicantes veteranos”. Todo se reduce a esta verdad: ¡Debemos cultivarnos diligentemente en lugar de juzgar quien es bueno o no!

Los apegos que tenía indicaban envidia. Miramos por encima a los demás. No trato amablemente a otros practicantes y no pude mirar dentro o escuchar los comentarios ofrecidos por otros practicantes. Hasta examiné los puntos fuertes de otros practicantes con una actitud muy crítica. Siempre quería encontrar alguna debilidad en otros en lugar de destacar sus virtudes. Si no podía encontrar ninguna debilidad, entonces comenzaba a admirarle y casi a adorarle.

De repente me iluminé al Fa de Shifu: "Mientras la envidia no se elimine, todos los corazones que la persona ha cultivado y refinado se vuelven muy frágiles". (Zhuan Falun) La envidia influenció negativamente en mis pensamientos rectos. Encontré que muchos practicantes a mi alrededor tenían el mismo apego. Por ejemplo, había dos practicantes que fueron arrestados y encarcelados. Uno fue torturado gravemente en su detención. El que fue maltratado pensó: ¿Por qué me dieron tantas patadas? ¿Por qué no la golpearon? ¿Qué tienes de maravillosa?” La otra practicante había tenido fuertes pensamientos rectos y no fue torturada por la policía.

Este apego es originado por el adoctrinamiento del totalitarismo absoluto del partido comunista chino.

Esta filosofía sostiene que todas las personas deben ser “iguales” y recibir las mismas recompensas y beneficios. Por ejemplo, dos personas se graduaron en la misma universidad, pero una no encontró un buen trabajo. La persona sin trabajo estaba muy envidiosa. Deberíamos comprender que la razón es solamente “el destino”. Todos tenemos diferentes habilidades y oportunidades. Debemos eliminar los apegos de envidia y de juzgar a los demás.

Lo anterior son mis entendimientos en mi actual nivel. Por favor señalen amablemente cualquier cosa inapropiada.

 

Versión en inglés:   http://clearwisdom.net/html/articles/2012/1/30/131046.html