[Minghui Net] Comencé a practicar Falun Dafa a finales de 1998. Atravesé un corto periodo de cultivación personal antes de que la persecución del mal empezara en 1999. Mi entendimiento del Fa era muy superficial en ese momento, pero Verdad-Benevolencia-Tolerancia habían echado raíces profundas dentro de mí. Durante mi cultivación, siento profundamente que cuando cultivamos verdaderamente Dafa, el Maestro está siempre a nuestro lado.

Lo siguiente me ocurrió realmente:

Mi cuñado ha estado viviendo con su madre después de casarse porque no podía encontrar un lugar para él. En ese tiempo, mi suegra ya tenía 75 años y vivió con la familia de mi cuñado por largo tiempo. A medida que el tiempo transcurría, tuvo algunos conflictos con mi cuñada. Más tarde, ellas incluso no se hablaban. Al ver que mi suegra no tenía a nadie que cuidara de ella cuando estaba enferma, mi marido me preguntó si podría vivir con nosotros por un tiempo. Esto fue en el verano de 1999. Aunque nuestro sitio es pequeño, pensé que, siendo una cultivadora, es importante tener piedad filial, así que trajimos a mi suegra a nuestra casa. Ha estado viviendo con nosotros por 12 años. Ahora tiene 87 años y hemos convivido juntos en armonía.

Un domingo de 2003, mi cuñada vino a visitarnos. Mientras hablábamos, empecé a hablar poco a poco de los cambios en mí desde que empecé a cultivarme, cuán grande es el Maestro, cuán especial es la cultivación etc.  Ella escuchó en silencio y atentamente, y pude ver que confiaba en mí completamente. En ese momento, sentí que ella también fue purificada. Ese es el poder de Dafa. Después de escucharme y de ver cómo trataba a mi suegra, dijo: “Hermana, te cultivas muy bien. ¿Tienes un libro? ¡Quiero aprender Dafa!”.

Me sentí muy feliz al oír eso, pero también presentaba una gran prueba para mí. Desde el momento en que empezó la persecución, los libros de Dafa son muy escasos y preciosos y yo sólo tenía una copia de Zhuan Falun. Como lo leía constantemente, se había empezado a desgastar, así que lo había recompuesto usando una máquina en el trabajo. Al comienzo de la persecución hice una promesa al Maestro: “Maestro, aunque sólo tengo una copia de Zhuan Falun, ¡estoy determinada a cultivarme hasta el final!”. Debido a que mi cuñada quería tomar mi libro, ¡era difícil para mí dárselo a ella! No podía decidirme, así que le dije: “Sólo tengo este libro, pero tengo una serie de lecciones en vídeo y una serie en audio. ¿Qué tal si ves los vídeos o escuchas los audios primero?”.

Pero mi cuñada dijo en un tono irreprochable: “Hermana, no quiero vídeos, no quiero audios. ¡Sólo quiero este libro!”. Al oír esto, mi cerebro empezó a trabajar rápidamente, y me preguntaba si estaba siendo egoísta. ¿No es algo bueno que mi cuñada quiera aprender Dafa? ¿Por qué no podía darle el libro desinteresadamente? ¿No es la meta de nuestra cultivación convertirnos en personas desinteresadas? ¿Cómo es que no podía abandonar mi egoísmo en este momento crítico? Entonces, le dije calmadamente: “¡Está bien! Te daré este libro. ¡Debes atesorarlo y cultivarte bien!

Esa tarde cuando mi cuñada se fue, no pude evitar llorar cuando pensaba en que no tenía el libro. Le dije al Maestro en mi corazón: “Maestro, este es el primer día que no tengo Zhuan Falun para leer. Leeré otro libro de Dafa”. Abrí la estantería al lado de mi cama y saqué un libro. Era un libro grueso y pensé que podría ser Explicando el contenido de Falun Dafa. Abrí la primera página y me di cuenta con sorpresa de que era una copia nueva de Zhuan Falun. Además, tenía una cubierta blanca, justo como los otros libros de Dafa que tenía. ¡Qué milagro! Durante los últimos cinco años, he leído los libros de Dafa una y otra vez, pero nunca había visto este libro antes. Sabía que no tenía una segunda copia de Zhuan Falun.

Sentía que todas las partículas en cada nivel dentro de mi cuerpo estaban asombradas. Sospechaba que mis ojos me estaban engañando. Di la vuelta al libro de delante hacia atrás varias veces hasta que estuve segura de que era real. Lágrimas corrieron por mi cara incontroladamente. El Maestro había visto que quería estudiar el Fa y me dio un libro nuevo. El Maestro está a mi lado y me ayuda en cada momento. No puedo expresar mi gratitud con palabras.

Le conté mi historia a muchos compañeros practicantes. Este milagro nos ha inspirado a estudiar el Fa mejor, cultivarnos bien, aclarar la verdad, salvar gente, ser más diligentes, y hacerlo lo mejor posible para lograr nuestra sagrada misión de ayudar al Maestro en la rectificación del Fa.

He caminado mi sendero de cultivación durante 12 años. Durante este tiempo, he estado inmersa en la infinita compasión y misericordia del Maestro. Sé que el Maestro ha dado tanto a sus discípulos. También sé que todavía tengo muchos defectos y apegos. Sin embargo, creo firmemente que si creo en el Maestro y en el Fa, continúo estudiando bien el Fa y mirando dentro y me deshago de mis apegos, podré hacer las tres cosas racional y constantemente. Seré capaz de cumplir mis votos, alcanzar la consumación y regresar con el Maestro.

Por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.