[Minghui Net] En septiembre de 2012, los practicantes en el este de Taiwan establecieron una plataforma telefónica en Internet, así que ya no teníamos que pasar mucho tiempo viajando a un lugar determinado para realizar llamadas. La conveniencia de poder hacer llamadas utilizando el Internet, nos reunió a todos para formar un solo cuerpo. Al mismo tiempo, la plataforma ayudó a que otros veinte practicantes se unan a este proyecto.

Dos días después de crear la plataforma, nos dimos cuenta de que necesitábamos enfocarnos en Beijing. Mediante el intercambio de experiencias con otros practicantes del proyecto global, sabíamos que era importante centrarse en la limpieza de ese lugar central de la maldad. No queríamos perder esta preciosa oportunidad para salvar a la gente, así que decidimos trabajar y hacer todo lo posible para llamar a los números en Beijing. 

Ahora, mirando atrás, entiendo que no fue difícil establecer la plataforma. Lo más difícil fue hacer que el trabajo de la plataforma se haga todos los días y que los practicantes llamen constantemente. Los practicantes que participaron en el proyecto también se dieron cuenta de que los números publicados en la plataforma son responsabilidad de todos. Algunos de nosotros hacíamos llamadas en el día y otros hacían las llamadas en las noches, después de salir de su trabajo. Poco a poco, la plataforma se convirtió en un campo de pensamientos rectos, capaz de salvar a la gente. Creo que los que más se beneficiaron fuimos nosotros mismos. 

Una practicante de setenta años nos compartió que, cuando trabajaba por su cuenta, creía que no importaba con cuánta gente hablaba, mientras persistieraen hacer llamadas todos los días. Ahora se sentía responsable de los números publicados en la plataforma y estaba trabajando muy duro para asegurarse de marcar todos los números de la lista. También sentía que Shifu la estaba motivando a progresar con más diligencia. Esta practicante no sabía como escribir en una computadora y le pidió a su hijo que escriba todas las palabras que se necesitaban en un archivo guardado en el escritorio. Cuando llamaba en Internet, simplemente copiaba y pegaba las palabras que necesitaba para comunicarse con la otra persona. También enseñó este método a otros practicantes mayores que no sabían escribir en la computadora. Algunos practicantes consideraron que esta plataforma expandió los pensamientos rectos de esta señora así como su capacidad para salvar a la gente. Ella solía llevar un caso de rescate por día y llamaba a los números relacionados con el caso. Después de que se unió a la plataforma, ella podría tomar al menos seis casos de rescate todos los días. 

La plataforma es un lugar donde los practicantes pueden "compartir en el aprendizaje y compartir en la cultivación " ("Cultivación sólida", Hong Yin). Varios practicantes que habían dejado este proyecto para trabajar en otros proyectos o por motivos familiares regresaron nuevamente. Una pareja de esposos solía tomar rutinariamente los números de teléfono de un caso de rescate que se le había asignado y trataba de terminar las llamadas durante la semana. Ahora llaman todos los días a los números de al menos dos casos de persecución en Beijing. Uno de ellos hace las llamadas, mientras que el otro envía pensamientos rectos. Se han vuelto más asertivos en salvar a la gente.

Un practicante joven que trabajaba en un proyecto de medios de comunicación dijo que, aunque él no podía hacer llamadas todos los días, ver a otros haciendo llamadas le hacía sentir que pertenecía al campo de pensamientos rectos. De este modo, podía mantener sus pensamientos rectos constantemente. Un estudiante que regresó a la escuela después de las vacaciones de verano se quedó en la plataforma. Así, fue capaz de aprovechar todas las oportunidades que tuvo para llamar a los casos en Beijing. No aflojó por haber salido de su casa y vivir en un ambiente más relajado.

Las experiencias que compartieron los otros practicantes también nos ayudaron a todos a mejorar nuestro xinxing. Un practicante dijo que nuestros pensamientos son muy importantes. La base de nuestra actitud y mentalidad cuando salvamos a la gente es de una importancia crucial. Cada llamada implica elementos de cultivación. Las personas y los problemas que encontramos son los niveles y ámbitos que Shifu arregló para que alcancemos y son la manifestación de los significados de los principios del Fa en ese nivel.

Hacer llamadas ya no es sólo una misión que cumplir. Es ser verdaderamente compasivo con los demás y tener sinceramente la esperanza de que la otra persona pueda entender la verdad y salvarse. Creemos que si seguimos haciendo llamadas a Beijing con pensamientos rectos, estamos limpiando el mal que queda allí y salvamos a la gente.

De hecho, el campo en Beijing ha cambiado. Las personas a las que hemos aclarado la verdad y que antes nos maldecían, la mayoría de ellos escuchan ahora en silencio. Es sólo una cuestión de lo mucho que escuchan. Algunas personas son muy amables. Ellos nos escuchan en silencio y, después de que terminamos de hablar, nos dicen que hace mucho tiempo que han dejado el partido comunista chino (PCCh) y sus organizaciones afiliadas. Los practicantes en China hicieron un trabajo maravilloso. Algunas personas que nunca habían oído hablar de la persecución, al saber la verdad, recitaron con nosotros "Falun Dafa es bueno", "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" y siguieron dándonos las gracias por la llamada. Muchos de nosotros pudimos hablar con los funcionarios locales del PCCh y corregir su actitud hacia Falun Dafa. 

El proyecto del hacer llamadas a Beijing es el camino que Shifu arregló para nosotros hace mucho tiempo atrás, nos permitió ser más maduros y establecer nuestra poderosa virtud. Gracias Shifu.

 

Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2012/12/4/136519.html