[Minghui Net] A través de la recomendación de un amigo mi esposa y yo comenzamos a practicar Falun Gong en 1998. Inmediatamente entendimos que Dafa es bueno, pero no sabíamos aún la profundidad del Fa. Cuando el partido comunista chino inició la persecución el 20 de julio de 1999, y difundió tantas mentiras sobre la práctica, por miedo dejamos de practicar.

Un día en abril de 2003 sentí como si estuviera subiéndome la fiebre. Fui al hospital local para que me pusieran una vacuna contra la gripe, pero no me sirvió de nada. Como empeoraba cada vez más fui al Hospital afiliado número 2 de la Escuela Médica de Harbin para que me hicieran una revisión, y después de que me vieron muchos médicos especialistas, me diagnosticaron finalmente un cáncer de pulmón en estado avanzado. El médico nos dijo que era demasiado tarde para una operación, y que me fuera a casa y me mentalizara para morirme.

Mi cuñado que es practicante le sugirió a mi esposa que intentara practicar Falun Gong. Así que, cada vez que tenía dolor, escuchaba las lecciones de Shifu. Después de hacer esto durante tres noches seguidas, pude sentarme en la cama, y no pasó mucho tiempo para que pudiera caminar y hacer los ejercicios. Me fui recuperando poco a poco y cada vez me sentía más fuerte. ¡En el otoño pude ir a recolectar comida de la granja! Mis amigos, familiares y vecinos se quedaron todos sorprendidos cuando les dije que me había recuperado gracias a la práctica de Falun Dafa.

Una tarde del invierno de 2007, cuando iba al trabajo en la moto, un camión que venía en dirección contraria se abalanzó sobre mí. Las luces del camión eran tan fuertes que no pude ver la carretera, y salté de la moto con el fin de evitar que el camión me arrollara. Me llevaron al hospital donde los médicos me dijeron que me había roto la clavícula y necesitaba operarme para que me implantaran un disco de acero. Me decían que lo tenía que tener ahí durante tres años, y los gastos médicos ascenderían a 7.000 yuanes aproximadamente. Incluso si me operaba, no tendría la posibilidad de trabajar más, así que decidí no hacerlo. Cuando llegué a casa comencé a hacer los ejercicios y a estudiar el Fa todos los días. En dos semanas me había recuperado completamente. La clavícula estaba como si nada hubiera pasado y volví a trabajar en la granja.

En el verano de 2009, cuando estuve trabajando en la capital de la provincia, algunos de los que fuimos a trabajar estábamos paseando por la ciudad cuando un autobús se me vino encima y me dio justo en el pecho. El impacto fue tan fuerte que me lanzó unos cinco metros más allá. El conductor estaba muy preocupado y pensó que me iba a morir. Cuando me llevaron al hospital mis colegas del trabajo me dijeron que le pidiera una compensación económica al conductor. Yo les dije: “Por favor, no se preocupen por mi. Soy un practicante de Falun Gong. Mi Shifu me protege”. Mientras esperábamos los resultados de las radiografías le dije al conductor: “Por favor, no se preocupe. No le voy a pedir que me dé nada”. Cuando el médico vino con los resultados, me dijo que todo estaba perfecto. Esta misma tarde me fui a mi casa.

 

Versión en inglés: http://clearwisdom.net/html/articles/2011/7/19/126837.html