[Minghui Net] A finales de 2008, mientras estaba ocupado preparando la boda de mi hijo, más de 4.000 plantas de pepino en un invernadero de 80 metros de largo, desarrollaron mildiu velloso, una enfermedad grave para estas plantas. Mis familiares me culparon por no cuidarlos bien y otras personas hacían comentarios sobre mí. Si arrancaba todas las plantas, sabía cuáles serían las consecuencias para nuestro sustento. Mi familia utilizó muchos remedios para solucionar el problema, pero fue en vano.

Desde hace mucho tiempo he desarrollado la costumbre de discutir acaloradamente frente a este tipo de dificultades, tanto dentro como fuera de mi familia. Esta vez estaba sorprendentemente tranquilo. Era como si el Maestro estuviera a mi lado. Mi primer pensamiento fue que eso no era un problema. En el camino de la cultivación las cosas buenas y malas son buenas. Los conflictos en la vida nos dan oportunidades para mejorar nuestro xinxing.

¿Qué debo hacer? ¿Tal vez hablar con las plantas del semillero? Recordando que el Maestro dijo que las plantas son seres vivos, les indiqué: "Yo no las culpo por estar como están. Como su dueño, no vigilé que estuvieran bien y las descuidé en el proceso de crecimiento y no atendí sus necesidades. Sinceramente ofrezco disculpas por ello. Lo siento mucho. Por favor, perdónenme por mi falta de cuidado”. Les dije de manera formal: "Su propietario es un practicante de Falun Gong. Falun Gong es el Gran Fa del universo. Todas las miríadas de cosas en el mundo deben asimilarse a DAFA. Espero que ambos podamos estar sanos con la protección del Fo".

Dije lo que tenía que decir e hice lo que tenía que hacer. No pensé mucho y mi corazón se sintió ligero y holgado. Lo que pasó después durante ese año fue lo mismo de siempre. Seguí todos los procedimientos convencionales para la siembra de las pequeñas plantas. Después de un mes, sonreí cuando vi que las plantas en el vivero eran de color verde brillante. Las saludé y las reconocí. Después de cosecharlas y venderlas, calculé los beneficios económicos. Comparándolos con los años anteriores, esta temporada fue la más exitosa.

Sabía profundamente que el Maestro me había asistido y me ayudó a iluminarme. Él me ayudó a soltar todos los apegos mundanos. Lo que es tuyo no se perderá y lo que no es tuyo, aunque lo persigas, no lo conseguirás.