Un joven practicante mira hacia dentro

[Minghui.Net] El tiempo vuela. Han pasado trece años y he crecido hasta ser un joven practicante de Falun Dafa del periodo de la rectificación del Fa. En mi sendero de cultivación, miré hacia dentro y localicé mis apegos cuando me encontré en conflictos con mis padres, compañeros de clase y profesores.

Un mañana llegué un poco más tarde de lo usual. Un muchacho se me acercó para acosarme diciéndome: "ayer me robaste dinero. ¡Devuélvemelo!" Lo ignoré y leí mi libro. El reclamó: "¡Apúrate! ¡Devuélvemelo!" No fui movido y continué leyendo. Él se cansó y se marchó. Cuando regresé a casa se lo conté a mi madre. Ella me alagó y me sentí muy bien.

Unos días más tarde, el mismo muchacho se me acercó de igual manera: "ayer me robaste dinero". Al principio no me conmoví, pero luego me irrité y repliqué: "¡No, no robé tu dinero!" El sonrió con astucia, como burlándose: "Sí, lo hiciste". Me puse ansioso y empecé a discutir: "No, ¡no lo hice! Ve y encuentra a la persona que lo hizo", grité molesto.

Mis amigos vinieron inmediatamente a calmarme. Uno de ellos dijo: "La vez pasada lo hiciste bien. ¿Por qué ahora no?" Me desperté inmediatamente. Eso es correcto. ¿Por que pasé la prueba la otra vez pero hoy no?

Busqué dentro de mí y me estremecí al recordar mi mentalidad la vez anterior. Cuando hablé con mi madre, tuve un gran impulso de fanatismo y de ostentación. Estuve pensando: "¡Mira, yo pasé la prueba! ¡Cuán maravilloso soy! Tengo tan buen carácter". Ese no fue un pensamiento valioso. Entonces ¿por qué no lo eliminé? ¿Por qué lo mantuve? La razón fue mi mentalidad de ostentar. Entonces pensé: "¿no fui muy lejos cuando discutí con ese muchacho? ¿Debo pedirle disculpas?"

La mañana siguiente, después de llegar a la escuela le dije al muchacho: "Ayer no debí gritarte. Eso no estuvo bien. Aunque tú me estabas acosando, no debí tratarte sin respeto". El sonrió y bajó su cabeza.

A través de este incidente, me di cuenta que mostrarse es muy dañino, porque esto puede desarrollar el apego al fanatismo o la persecución de la comodidad.

Actualmente, ningún apego humano es bueno. Están ahí para que nos libremos de ellos. Siempre que nos mantengamos cultivando, nos libraremos de ellos y mejoraremos nuestro carácter. Ya sea en casa o en la escuela, debemos usar cada oportunidad para mejorar nuestro carácter. Conflictos con padres, maestros o compañeros de clase son ocasiones esenciales de cultivación. En los conflictos, nosotros miramos adentro para encontrar nuestros apegos. Entonces nos liberamos de ellos y mejoramos nuestro carácter. Esta es la clave.

Cuando tenemos problemas con personas ordinarias, ¿por qué no buscar más profundo dentro de nosotros? ¿Por qué no mantener en mente las enseñanzas del Maestro? Si en la mente no mantenemos las enseñanzas del Maestro, no hay ley para guiarnos ¿Cómo se puede permitir eso? En un caso más serio, uno estará yendo por su propio camino y se rehusará a aceptar consejo alguno.

Versión en inglés disponible en: http://www.clearwisdom.net/html/articles/2010/4/30/116574.html