[Minghui Net]Debido a que mi abuelo fue perseguido por el Partido Comunista Chino (PCCh) durante la Gran Revolución Cultural, mi padre no alberga ningún sentimiento positivo hacia el PCCh a pesar de que es miembro desde hace muchas décadas. Cuando mi padre acabó de leer Los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, abandonó el PCCh con alegría. Al principio le dije que era mejor usar un pseudónimo para renunciar, pero dijo que quería renunciar de manera oficial usando su nombre verdadero. Me alegré de oírlo. Al final, por razones de seguridad, lo ayudé a renunciar usando un pseudónimo.

El año pasado le di a mi padre una copia de Desintegrando la cultura del Partido. No me esperaba que se lo leyera con tanto detalle, pero lo leyó varias veces. Me dijo, Desintegrando la cultura del Partido está escrito con más detalle y más contenido que Los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista. A menudo durante aquella época exploraba con mi padre varios temas sobre el malvado partido. Quizás por su experiencia en persona con el PCCh, y porque ha leído Los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, y Desintegrando la cultura del Partido con más detalle que yo, a menudo tengo la sensación que el punto de vista de mi padre sobre el PCCh es más claro, más completo, y más profundo que el mío.

Me sorprendí y me alegré de ver los cambios de mi padre en los días posteriores. Cada vez que conversaba con alguien, enlazaba el tema de forma natural al análisis y la esencia del PCCh, y hasta lo que yo sé, nadie le ha ganado en una discusión sobre este tema. Lo que decía estaba bien fundado y convincente. Como no practicante, su aclaración de los hechos desde el ángulo de una tercera parte ha tenido mejor efecto que la mía. La salud de mi padre es buena. Antes estaba un poco delgado pero ha subido un poco de peso. Su estado mental también parece muy bueno. Creo que sus buenos actos han sido compensados.

En el pasado he intentado explicarle a una prima mía sobre la maldad del partido, pero siempre se había mostrado completamente indiferente. Hace algún tiempo cuando tuvo que arreglar algunos asuntos de contabilidad de la casa, se quedó trabada. Cuando volvimos a vernos, enlazó nuestra conversación naturalmente a los problemas actuales del sistema del PCCh. Cuando le hablé sobre la maldad del PCCh, pudo escucharlo todo, y disfrutó oyéndome. Al final comentó: El PCCh es tan vil. Claro que ya ha dejado la organización de la liga de juvenil del PCCh. Como mi padre, ahora ella aprovecha cada oportunidad para hablar con la gente sobre la maldad del PCCh. Durante el Año Nuevo chino, fui a visitar a mi tío a su casa. Cuando mi prima se enteró de mi visita, dijo: Hermano, no puedo convencer a mi padre a que renuncie al PCCh. Ven para aquí y charla con él un buen rato. Me alegré mucho de oír esto.

Intenté aclarar la verdad a mi tío. Al principio no se mostraba receptivo a los hechos. Pensé para mí que en vez de hablarle de manera general, quizás debería enfocarme sobre un solo punto y traspasar las barreras. Entonces empecé a contarle las historias que experimentó mi abuelo durante la Gran Revolución Cultural. Le dije: Si la salud del abuelo no hubiera sido tan afectada por la Gran Revolución Cultural, a lo mejor habría sobrevivido hasta el día de hoy. Al oír mis palabras mi tío empezó poco a poco a cambiar sus nociones. Puede que mis palabras le recordaran la experiencia dolorosa del arresto de su padre cuando era un niño pequeño. Nuestros puntos de vista se acercaban gradualmente. Aunque mi tío aún no ha renunciado al PCCh, me siento feliz porque ha cambiado de actitud.

Hace algún tiempo mi madre visitó la casa de mi hermana. Tengo un sobrino precioso que acaba de cumplir cuatro años. Mi madre le enseñó a recitar Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, y a cantar canciones de Dafa. Lo hizo estupendamente. Su voz era alta y clara. Un día cuando mi madre estaba leyendo el Fa, señaló la foto de Shifu y le dijo a mi sobrino: Maestro. De repente mi pequeño sobrino dijo Shifu, intentando deliberadamente corregir a mi madre. A mi madre le sorprendió mucho, pensando que en una edad tan tierna, cómo podía aprender a hablar así.

A lo largo de todos los años que hemos pasado, podía notar los cambios de cantidad y calidad en los seres conscientes. En el pasado pensaba ingenuamente que algún día los Fo y los Dao aparecerían de repente, y la rectificación del Fa se acabaría. Pero ahora, he llegado a entender claramente que todos los cambios en los seres conscientes se realizan mediante los esfuerzos y sacrificios constantes de los discípulos de Dafa. Vamos a trabajar más duro para llevar a más seres conscientes de vuelta a casa.