Saludos al Benevolente Shifu. Saludos a todos los practicantes

Aprovecho este momento tan preciado y esta conferencia de intercambio de experiencias para compartir con Uds. una corta experiencia de antes y después de comenzar a cultivarme en Falun Dafa, que llevo practicando durante más de medio año.

1. En búsqueda del camino verdadero

Desde mi infancia creía profundamente que la realidad que nos rodea es ilusoria y tenía un sentimiento muy fuerte de que existen fenómenos que la gente común no podía explicar razonablemente y que efectivamente existen.

En mi época como estudiante, me interesé por el esoterismo, deseando encontrar el verdadero propósito de la vida. Leía mucha literatura de contenido espiritual, practicaba distintas vías de creencias espirituales, sin progreso ninguno. Con frecuencia, cuando estaba en otros espacios en mi conciencia, enviaba plegarias a los seres elevados, a quienes llamaba "amigos", con el deseo de que me enseñaran el verdadero sentido de ser un humano. En estos momentos, lloraba con frecuencia. Sentía que mis plegarias iban a ser escuchadas y a veces pensaba que un día tendría la oportunidad de conocer la verdad. En ese entonces, también intentaba aprender los ejercicios de Falun Dafa, con las instrucciones de la página web. En ese momento sólo sabía que los ejercicios de Falun Dafa proporcionaban energía. No sabía que pronto iba a encontrar un gran camino de cultivación, que llevaba buscando hacía mucho tiempo.

2. Decadencia de la moralidad

A medida que iba creciendo, empecé a perder cada vez más las señales del propósito de por qué estoy aquí. Como adolescente me dejé llevar por la decadencia de la moralidad humana. Comenzó a importarme mucho más el dinero y las cosas materiales. Iba a las discotecas, pasaba droga y hacía muchas cosas amorales, sin dudarlo ni un momento.Tenía muchísimas adicciones. Sin embargo, era más o menos consciente del lado bueno de mi ser, el cual sabía el motivo de mi venida al mundo y no me permitiría caer tan bajo. Cuantas más cosas malas hacía, más me daba cuenta de que eso no me llevaba a nada bueno, pero esas cosas eran más fuertes que yo y me sumieron más en el barro. Era adicto a las drogas.

De alguna manera, durante este peligroso período, me compré el libro de Zhuan Falun. Yo no sabía en ese entonces que el libro estaba relacionado con Falun Dafa y con los ejercicios, sobre los que había leído durante mi infancia, pero me pareció interesante, lo ordené y lo puse entre los otros libros en la estantería. Para mi sorpresa, el libro comenzó a brillar ligeramente, delicadamente, era precioso y tenía palabras de oro en la portada. Rápidamente me di cuenta de que los conocimientos de este libro cambiarían mi vida, y que esto es lo que yo realmente había estado buscando. Y de repente una interferencia severa por parte del mal comenzó, y usó mis apegos y mis malos conceptos que existían en mi cuerpo. Todo me arrastró y me alejó de leer Zhuan Falun. Pero un día me concentré a conciencia, sentado en silencio solo en mi cuarto y comencé a leer. Leí muy despacio y con cuidado, pero era difícil para mí entender el contenido. No podía concentrarme bastante, mis pensamientos y mente eran caóticos y me distraía todo el rato. Éste fue un momento vital. A pesar de todo, entendí que esto es lo que mi alma había estado buscando. Yo reforcé mis pensamientos rectos y envié un deseo sincero de dedicarme a la práctica y dejé el libro en su sitio, pero por el momento estas cosas malas eran todavía bastante fuertes.

3. La rectificación del cuerpo y mente

Después de enviar el deseo comencé a sentir los enormes cambios que ocurrieron dentro de mí, en mi cuerpo, en mi mente, en mi ambiente y en la realidad que me rodeaba. Yo sabía que tenía mucho yeli y cosas malas en mí, pero estaba tranquilo porque a pesar de todas estas cosas malas yo estaba salvado y Shifu cuidaba de mí. En varias ocasiones, cuando estaba en la escuela, o con amigos con quien a menudo me encontraba, sentía cómo giraba el Falun y veía su estructura, cómo giraba y ajustaba mi cuerpo. Entonces también sentí cómo mi cuerpo es un cosmos, cuyas partes una por una se regulan y purifican por la energía que el Falun transformaba. Pero a pesar de estos maravillosos cambios que experimenté y del campo de nuestro compasivo Shifu, mi apego a las drogas era muy fuerte.

Yo tenía una cualidad de iluminación muy pobre, pero sabía que debía despojarme de todos estos malos hábitos. Fue un tiempo muy duro para mí, sufría mucho y cometí muchos errores, pero todavía estaba decidido a limpiar mi cuerpo y comenzar la cultivación. Comencé a limpiarme desde el interior y no comí durante 8 días. Me llevó este tiempo limpiar mi cuerpo. Cada día que pasaba, sentía que una enorme cantidad de yeli era eliminado. Me sentí extraordinariamente ligero y de repente podía alcanzar un estado de tranquilidad inalterable, y la mayoría de los pensamientos caóticos dejaron de existir. Mi entendimiento y percepciones cambiaron. Cuando mi cuerpo fue purificado empecé a salir para encontrarme con gente. Muchos amigos no podían creer que tal cambio hubiera ocurrido en mí. Ellos, junto con mis padres, pensaron que aquellos eran cambios irreversibles causados por mi adicción. En aquel tiempo sufrí mucho. Ajusté mis relaciones predestinadas con cada uno que me encontraba y de esta manera pagué rápidamente por todos los hechos malos que hice en el pasado. Poco después, muchas capacidades emergieron en mí, pero todavía descuidaba el estudio del Fa y no me despojaba de mis apegos. Yo tenía un sentimiento de euforia intensa, me sentía mejor que los demás y a menudo usaba mis capacidades entre la gente común, y entre los amigos de mi antigua empresa. Esto era un error serio. En vez de enfatizar en el estudio del Fa, pasaba mi tiempo con gente cuyo mayor nexo era la droga.

Descuidé la cultivación y me puse una sobredosis de nuevo, cayendo hasta el fondo. Sabía que mi nivel había caído drásticamente, todo el gong que tenía en mi cuerpo había desaparecido, y muchos, muchos seres vivos en mi cuerpo habían muerto por no controlarme. Esta fue una sensación aterradora. Los seres en los mundos dentro de mi cuerpo se estaban muriendo uno tras otro, mis padres perdieron toda la esperanza y querían llevarme a un psiquiatra para tratarme. En este estado sentía que estaba realmente a punto de morir, yo rezaba por una última oportunidad, y la recibí. Estaba trabajando duro para reparar los daños que había causado. Me aislé del mundo exterior y empecé a estudiar el Fa con diligencia en mi casa. Leía el libro una vez tras otra, llegando a entender gradualmente por qué mi camino era como era. Cuando supe en qué consistía la cultivación y tuve un entendimiento básico de los principios del Fa, empecé a funcionar en la sociedad. Poco a poco fui renovando mis relaciones y conseguí un trabajo. Lentamente empecé a hacer los ejercicios y hacer del estudio del Fa una prioridad. Cuanto más estudiaba el Fa más profundo era mi entendimiento. Vi que la mayoría de las cosas que la gente hace no tiene sentido y que estamos viviendo en un realidad basada en la ilusión y comprendí que el verdadero objetivo de ser un humano es volver a nuestra esencia a través de la cultivación. No sabía nada sobre el ambiente de los cultivadores, no sabía sobre aclarar la verdad, ni sobre enviar pensamientos rectos, pero sentía que Shifu me enseñaba el camino y contacté con un practicante de mi ciudad. Desde ese entonces mi cultivación mejoró totalmente.

4. Verdadera cultivación y aclarar la verdad

Desde que comencé a conocer el ambiente de la cultivación, nunca más me he sentido solo porque sé que hay gente que piensa lo mismo que yo. Entendí la importancia que debemos dar a hacer las tres cosas y así las fui introduciendo en mi vida cotidiana. Al principio me encontré con muchos obstáculos a la hora de aclarar la verdad a la gente. También tenía un apego bastante fuerte al miedo. De forma gradual, a través de la lectura del Fa y observando a otros practicantes llegué a entender cómo hacerlo y a darme cuenta de la relación que existe entre estudiar el Fa y hacer las otras cosas que como practicantes debemos hacer.

Estudiar el Fa tiene un gran poder. Cuando no puedo equilibrar algo o tengo problemas, por medio del estudio del Fa llego a comprender por qué es así y cómo resolver estos problemas. También comprendí que muchos de los problemas que nos ocurren están causados por nosotros mismos. Una herramienta estupenda, que Shifu nos ha otorgado, es mirar en nuestro interior, gracias a lo cual podemos encontrar los apegos que nos restringen. Y si nos volvemos gradualmente indiferentes a ellos, dejarán de restringirnos y serán eliminados. Junto con un practicante de mi ciudad, repartimos folletos en los buzones por las afueras de la ciudad y en los distritos residenciales. Si nos encontramos a personas, les aclaramos los hechos directamente, si no, dejamos un folleto en su buzón. En la ciudad también nos reunimos para hacer los ejercicios en el parque. Practicamos detrás de pancartas informativas, repartiendo folletos y aclarando la verdad. Los viandantes normalmente nos prestan atención. Mucha gente expresa su interés en la práctica y regularmente condenan con toda seguridad al partido comunista chino. Siento en mi corazón cuán importante es aclarar la verdad y validar el Fa realmente. Intento hacerlo en cada momento favorable, aunque no siempre funciona perfectamente.

Shifu dijo las siguientes palabras, las cuales han echado profundas raíces en mi corazón (Traducción no oficial, Escrituras esenciales para mayor avance - Cultivación genuina)
"Caíste aquí de un mundo sagrado, puro e incomparablemente espléndido porque habías desarrollado apegos en ese nivel. Después de caer a un mundo que es, en comparación, el más sucio, en lugar de cultivarte para volver apresuradamente, no abandonas esas cosas sucias a las cuales te aferras en este mundo sucio, e incluso te desesperas por las pérdidas más triviales. ¿Sabías que para salvarte el Buda una vez mendigó comida entre la gente común? Hoy, abro la puerta completamente una vez más, y enseño este Dafa para salvarte. Nunca he sentido amargura por las numerosas dificultades que he sufrido. Entonces ¿qué tienes aún que no puedes abandonar? ¿Puedes llevarte al Cielo las cosas que en lo profundo de ti no puedes abandonar?"

Sé que debido a los apegos, no siempre podemos cumplir con los requisitos de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Esta es la razón por la que a través de una sólida cultivación, estudiando el Fa y siendo diligente y atento, los apegos y viejas fuerzas que los utilizan, no serán capaces de controlarnos.

5. Conclusión

Echando una mirada al pasado, puedo ver claramente la magnitud de cómo había caído mi moralidad y lo perdido que estaba. Sin embargo, he tenido este maravilloso honor y he obtenido el Fa, por lo que estoy absolutamente agradecido a Shifu. No quiero perder esta gloriosa oportunidad y aunque sé que aún hay un largo camino por delante, siento que siendo diligente y haciendo cuidadosamente lo que debo hacer, ayudaré a Shifu a salvar seres conscientes y me convertiré en un verdadero practicante.

Gracias Benevolente Shifu, Gracias estimados practicantes.

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