Detalles respecto a la persecución de practicantes en la prisión Qianjin en Beijing

[Minghui Net] La prisión Qianjin en Beijing es una prisión inmensa, administrada por la sucursal de Qinghe del Buró de Gerencia de la Prisión de Beijing. Cualquier practicante hombre que sea residente permanente en Beijing, es detenido allí en caso de ser sentenciado a prisión.

Al presente, de 150 a 160 practicantes están detenidos en esta prisión. Entre ellos hay profesores y estudiantes de la universidad de Qinghua, trabajadores, campesinos, policías, y soldados. Después de llegar son encerrados en pequeñas celdas (tres metros de largo por un metro y medio de ancho, como 10 x 5 pies) y son monitoreados por criminales internos que se turnan las 24 horas del día. La policía también viene a interrogarlos e intenta "reformar" a los practicantes y preguntarles si admiten sus "crímenes".

La policía presiona a los practicantes y los somete bajo enorme presión. Por ejemplo, la policía les da dos opciones: Una, admitir sus "crímenes" y sus circunstancias se "relajarán" (eso es, después de atravesar sus "procedimientos", el practicante puede regresar a su celda), ó dos, no admitir sus "crímenes" sus circunstancias se volverán aún más severas. En este caso, ellos primero prolongan el tiempo del interrogatorio y les prohíben dormir a los practicantes, o sólo les permiten dormir entre una y dos horas. Le siguen el abuso verbal y los golpes. Ellos obligan a los practicantes a sentarse en una banca pequeña de sólo 12 centímetros (unas cinco pulgadas) de alto y les prohíben moverse, excepto para comer o ir al baño.

Desde el año 2000, docenas de practicantes han sido cruelmente abusados y maltratados. Entre 2000 y 2001, los malhechores usaron más de un bastón eléctrico a la vez para electrocutar a los practicantes que rechazaron ser "reformados". Muchos también golpean a al mismo tiempo a los practicantes. Las descargas eléctricas hicieron perder la conciencia a algunos practicantes, o quedaron discapacitados físicamente debido a los golpes. Zhang Fu, Jefe de la prisión, dirigió personalmente a la policía para que usaran los bastones eléctricos y aplicaran descargas a los practicantes, y también golpearan a quienes rechazaban ser "reformados". Más tarde lo despidieron de su puesto por apostar. A algunos de los practicantes se les hizo vestir chalecos de fuerza por iniciar una huelga de hambre de protesta.

Mientras la maldad en otras dimensiones es eliminada a gran escala, el ambiente mejora gradualmente. Pero los captores no dejaron de perseguir a practicantes ni un solo día. Desde 2003, la policía no ha golpeado públicamente a los practicantes. Ellos han incitado a criminales detenidos a golpear a los practicantes. Desde el mero castigo físico, la persecución ha escalado hasta incluir torturas mentales y físicas. Ellos usan coerción e incentivos para que criminales detenidos los castiguen corporalmente, insulten y maltraten a los practicantes. Esencialmente, los criminales obtienen beneficios si cooperan. Ellos no tienen que salir a hacer trabajo forzado, y sin embargo ganan más puntos y les reducen sus sentencias de prisión. Como resultado, muchos criminales internos pelean por que le den la tarea "lucrativa" de perseguir practicantes. Mientras más crueles y depravados sean los métodos que usan los criminales, mayor es la recompensa que reciben por parte de la policía.

La policía también obtiene créditos, recompensas y oportunidades de promoción por participar activamente en la persecución. Por eso, ellos cruelmente abusan, maltratan y torturan a practicantes.

Algunos practicantes continúan firmes y protestan por la persecución. Ellos declaran públicamente que sus declaraciones previas de haber sido "reformados" fueron en contra de su conciencia y no tienen validez. Estos practicantes son perseguidos nuevamente. No se permite que ninguna información de la prisión salga al exterior. Ninguno de los practicantes puede estudiar el Fa, excepto por el Fa que han memorizado previamente.

Este lugar es un ambiente terrible. Diariamente, el engaño, la desvergüenza, y la crueldad del PCCh es descaradamente obvio. La atmósfera de miedo y odio prolifera continuamente e infecta a todos.

Cao Lihua, jefe político del Noveno Equipo, y Chen Jun, líder del equipo medio, obtuvieron méritos por "reformar" exitosamente a algunos practicantes de Falun Gong. Muchos practicantes tienen que sufrir abusos y maltratos debido a estos dos individuos. Al presente los practicantes en la prisión están detenidos en el equipo uno, nueve y doce.

Jefe político del equipo uno: Liu Chenshan;
Jefe político del equipo nueve: Cao Lihua;
Jefe político del equipo doce: Chen Jun;
Vicejefe de la Prisión a cargo de la persecución a Falun Gong: Cheng Huijian.
Dirección: Estaciones postales de Chadian 106-1, 106-9, 106-12 de la línea Jingshan en el distrito Hangu de Tianjin, Código postal: 300481

(Versión en chino: http://minghui.ca/mh/articles/2006/2/27/121708.html)

Fecha de edición: 26/3/2006Fecha del artículo original: 11/3/2006