Recuerdos imperecederos

[Minghui Net] Asistí a las conferencias de Shifu dos veces en 1994 y tuve oportunidades de estar cerca de Él. Siempre quise escribir sobre ello, pero tenía miedo de que no pudiera hacerlo bien. Fui obstaculizado. Esta noche estuve llorando después de terminar de leer "Recordando la benevolencia del Shifu", y finalmente tomé la decisión de escribir mis recuerdos que permanecerán conmigo para siempre.

El sábado 12 de junio de 1994 por la mañana, Shifu dio una conferencia de qigong en una sala de auditorio dentro de un gimnasio en la ciudad de Zhengzhou, provincia de Henan.

Conforme lo escuchaba podía sentir vivamente el campo de energía recto y compasivo de Shifu. Yo antes tenía sentimientos individualistas muy fuertes. Sólo las cosas nobles y puras podrían tocarme. Mientras estaba escuchando las conferencias me convencieron gradualmente de que había encontrado a mi Shifu que había estado buscando durante toda mi vida. Entonces tomé la decisión de que lo seguiría durante el resto de mi vida.

Después de las conferencias, todos los estudiantes se ponían de pie, haciendo un camino para Shifu. Yo estaba muy cerca del camino. Cuando pasó cerca de mí, parecía tan tranquilo, compasivo y solemne. Shifu no salió inmediatamente, sino que fue hacia las escaleras y retrocedió. Tenía una taza de té en sus manos y miró a todos compasivamente. Los estudiantes también lo miramos silenciosamente. El auditorio estaba en silencio. Todos nos sentíamos muy felices.

La última clase se dio la tarde del 10 de junio. Era para responder las preguntas de los estudiantes. Mientras enseñaba los ejercicios, Shifu caminada entre los estudiantes para corregir nuestros movimientos. De repente me sentí aturdido, siendo un poco incapaz de sentarme fácilmente. Cuando levanté la vista, Shifu estaba de pie a un metro delante de mí. Estaba mirándome. Yo había sufrido de una enfermedad gástrica desde que era joven. Sabía que Shifu estaba ayudándome a purificar mi cuerpo.

Esa noche en el tren de regreso a casa, lloré todo el camino. Shifu me salvó y me guió al camino de regreso a mi ser original y verdadero.

A fines de diciembre de 1994, superé toda clase de dificultades para ir a Guangzhou, puesto que Shifu estaría allí para dar una conferencia. No quedaba ninguna entrada. La conferencia de la tarde empezaría pronto. Todos los estudiantes y asistentes que no tenían entradas se reunieron fuera del gimnasio. Cuando Shifu salió del coche todos estábamos muy felices. Alguien nos dijo que Él quería que hiciésemos una cola y entrásemos uno a uno. Entonces vi a Shifu de pie afuera de la entrada, mirándonos compasivamente. Yo no podía dejar de llorar. Después de cinco minutos, entró. Escuché a alguien decir que Shifu quería que todos los estudiantes entraran, pero los patrocinadores del lugar de celebración rechazaron esa opción, debido a que ellos temieron perder dinero.

Miramos la transmisión simultánea de la conferencia en una sala pequeña. El domingo 26 de diciembre de 1994, se dieron tres clases sucesivamente por la mañana y dos clases por la tarde. Shifu vino durante el descanso. Todos los estudiantes se reunieron a su alrededor. No le dijimos nada después de hacerle varias preguntas. Todos lo mirábamos con un sentimiento de gran reverencia. Después salió, y el personal vino a explicar: "Shifu quería ver a todo el mundo y nos pidió que se los hiciéramos saber".

Tenía muchas preguntas que quería hacer a Shifu, pero mis preguntas desaparecieron cuando lo vi realmente. Los días eran cortos, pero su imagen y su virtud de pensar primero en los otros permanece en mi corazón. Ahora entiendo qué es realmente el Dafa que Shifu difundió en el mundo humano. Valoro Dafa mucho más. También valoro aquellos días cuando vi a Shifu. Siempre me animarán, recordándome no aflojar y animándome a hacer las tres cosas bien. Pienso que ésta es la mejor manera para compensarlo por todo.

Fecha de edición: 1/10/2006
Fecha del artículo original: 22/9/2006
Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2006/9/22/78241.html