Una advertencia: El toro hablador de Zhang Cheng

(Sabiduriapura.org)

A través de la historia china, los fenómenos extraños parecen ser más agudos al final de una dinastía en caos. Los extraños e inusuales fenómenos, son tomados a menudo como advertencias que los dioses hacen sobre las catástrofes.

Un periódico de la ciudad de Xining, en la provincia de Qinghai de China, publicó una noticia que relataba el caso de una familia local que compró una gardenia que podía hacer sonidos parecidos al de un grillo. Investigué en los registros históricos chinos y encontré una historia similar. Pero esta historia antigua no trataba sobre una flor parlante, sino acerca de un toro que hablaba. Tengo la esperanza de que esta historia inspirará a todos a reflexionar sobre la situación actual en China.

Esta antigua historia tuvo lugar en la Era Taian (5 de enero de 303 / 21 de febrero de 304 d.C.) durante el reinado del emperador Hui de la Dinastía Jin del Oeste. (El emperador Hui fue el segundo emperador de la Dinastía Jin del Oeste, en el período 265 / 316 d.C.).

Cierto día, mientras un oficial del gobierno llamado Zhang Cheng estaba fuera yendo en carruaje, el toro que tiraba del mismo repentinamente habló: “La Dinastía Jin está hecha un caos y llegando a su fin y yo me encuentro exhausto. ¿Por qué me hacen ustedes todavía empujar este carruaje?”. Zhang Cheng y sus ayudantes se horrorizaron de tal suceso. Zhang Cheng entonces ofreció algún alimento al toro para intentar calmarlo. “Iremos a casa ahora, no hables más, ¿está bien?” Así que Zhang Cheng abortó sus planes y regresó derecho para su casa. Después de que volvieron a casa el toro comenzó a hablar nuevamente antes que Zhang Cheng pudiese desatar al toro. “¿Qué sentido tiene regresar a casa tan pronto?”. Zhang Cheng se puso cada vez más temeroso y preocupado, pero no se atrevió a compartir esta entraña historia con nadie.

Cuando Zhang Cheng escuchó sobre un hombre del condado de Anlu, que tenía la capacidad de la adivinación, fue allí para hacerse una lectura. Éste hombre le dijo: “se aproxima una extrema calamidad que no sólo afectará a tu familia. Habrá una guerra, una guerra por la cual será reclamado todo el condado. Cuando Zhang Cheng regresó después de la adivinación, pudo ver al toro de pie y caminando sobre sus patas traseras como si fuera un ser humano, atrayendo a un montón de espectadores.

En el otoño de ese año, Zhang Chang dio comienzo a una rebelión en contra de la Dinastía Jin del Oeste y reclamó el señorío sobre Jiangxia. Zhang Chang se ganó el apoyo de mucha gente debido a sus mentiras de que reviviría a la Dinastía Han. Zhang Cheng y su hermano se unieron al ejército rebelde de Zhang Chang y se volvieron comandantes militares. De todas maneras, Zhang Chang pronto fue vencido. Más de la mitad de los residentes del condado de Zhang Cheng fueron asesinados o heridos severamente. Nadie de la casa de Zhang Cheng sobrevivió a la guerra civil.

Esta historia revela cómo todas las cosas son arregladas como un reflejo de la moralidad de las personas sobre la tierra. Así como veían los antiguos chinos, los actos buenos serán recompensados con lo bueno, mientras que las cosas perversas encontrarán su debida retribución, tales como guerras y calamidades. Las desgracias atraídas por los actos de la sociedad en su conjunto arrastran a todo en su camino. Si este es el caso, entonces la restauración de la moralidad es el único camino para prevenir las guerras y calamidades.

Fecha de edición: 3/3/2004
Fecha de artículo original: 3/3/2004
Categoría: Arte y cultura