(Minghui.org) Me conmovió un artículo que leí en el sitio web de Minghui, titulado "Cultivar el Fa mediante la edición de artículos". Cuando leí que la madre de la autora dijo tranquilamente que no participaría en el Fahui de China en Minghui.org ese año, pensé: "¿Por qué esperó hasta perder la oportunidad?".
Cuando lo leí superficialmente, pensé que la madre dio la oportunidad de participar en el Fahui de China en Minghui.org a otros practicantes. Sin embargo, al pensar más en ello, vi que la madre perdió la oportunidad de participar por esperar y depender de otros. Cada Fahui concede a los practicantes seis semanas para preparar y presentar artículos de intercambio de experiencias.
La autora dijo que su madre había mejorado su xinxing al ayudar a sus compañeros a preparar los artículos. Dijo que "lleva ocho años haciéndolo". Me pregunté si sus compañeros practicantes eran capaces de escribir sus artículos de forma independiente.
Me sentí identificada con este artículo sobre Minghui porque yo también ayudé a otros practicantes a escribir artículos. Eso fue hace siete años. Me había mudado a una nueva área y noté que casi ninguno de los practicantes de allí enviaba artículos al Fahui de China en Minghui.org. Me sorprendió mucho que algunos discípulos de Dafa no participaran en la Conferencia del Fa. Eso parecía imposible. No lo creí.
Entonces, compartí mi pensamiento con un compañero practicante de allí, quien me llevó a un grupo local de estudio del Fa. Los practicantes de allí me preguntaron cómo escribir un artículo para compartir experiencias. Leí un artículo de Minghui mientras estaba en el estudio del Fa. Después, algunos practicantes se quedaron más tiempo para escribir artículos. Cuando terminaron, me llevé los artículos porque se acercaba la fecha límite. Al año siguiente, más practicantes prepararon activamente los artículos y los presentaron sin ayuda. Sin embargo, algunos practicantes no querían escribir un artículo, por mucho que yo intentara persuadirles.
Me di cuenta de que los que no escribían un artículo no tenían acceso al sitio web de Minghui, así que les animé a que aprendieran a acceder al sitio web. Un practicante de edad avanzada, que siempre sintió que no podía hacer nada, se compró un ordenador y aprendió a acceder al sitio web de Minghui. Cuando otros practicantes vieron esto, también hicieron lo mismo. Desde entonces, los practicantes hablan basándose en el Fa y comparten sus conocimientos y experiencias de cultivación en la página web de Minghui.
Este año, en la tarde del día en que había que compartir las experiencias, vi a una practicante y le pregunté si había enviado su artículo. Me dijo que se había enterado unos días antes de que yo lo mencionara. Le dije: "La radio Minghui lleva 18 días emitiendo esto. Tú escuchas la radio todos los días, así que ¿cómo no lo has oído?". Entonces me di cuenta de por qué no lo oía. Su hijo la ayudaba a grabar el programa todos los días, así que escuchaba lo que se descargaba. Su hijo también revisaba los correos electrónicos por ella. La razón por la que no podía acceder a Minghui era la misma que hace siete años, era problemática.
Tanto esta madre como la del artículo esperaban y dependían de sus hijos. No aprovechaban la oportunidad de mejorarse. Como resultado, dejaban remordimientos en sus caminos de cultivación. Los practicantes se ayudan mutuamente, lo cual es necesario, pero es diferente en la cultivación. Al principio, los practicantes ayudan a otros, ya que necesitan aprender a hacer cosas. Eso no es un problema. Sin embargo, después, si esto hace que algunos practicantes se apoyen en otros, no es bueno. Este es el mismo error que ocurre con los practicantes que han estado haciendo apoyo técnico para los proyectos de Dafa, lo que también bloquea el camino de cultivación de otros.
Algunos practicantes miraron dentro, y aunque no encontraron ningún apego, sus conflictos se resolvieron, porque el Maestro está con nosotros. Es lo mismo cuando preparamos artículos para compartir experiencias. Mientras tengamos el pensamiento en nuestro corazón de que queremos hacerlo, somos capaces de escribirlo, ya que el Maestro está con nosotros. Los que no saben escribir, pueden pedir a un compañero que lo haga, o pueden grabarlo y enviarlo a los practicantes que puedan transcribirlo. De este modo, no estarán pidiendo a un practicante que haga todo el trabajo por ellos.
En definitiva, siempre que un compañero pueda hacer algo, le animaremos a que lo haga él mismo. Si notamos que hay que corregir algo, podemos arreglarlo tranquilamente. Estoy dispuesta a enseñar cualquier habilidad técnica relacionada con la cultivación a los compañeros practicantes, ya que es parte de nuestra cultivación. En la cultivación no hay atajos. Todo lo que encontramos es un paso para mejorar. Solo cuando tratamos de mejorarnos activamente, no nos quedamos con las ganas.
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