(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa (también llamado Falun Gong) en mayo de 1999, y he tropezado de vez en cuando. Sin embargo, he perseverado, y me gustaría compartir algunas de mis experiencias a lo largo de mi viaje.

Mi relación predestinada con Dafa

Mi madre tenía bronquitis crónica. A menudo le faltaba el aire y tomaba medicamentos durante todo el año. Por lo tanto, no podía hacer ningún trabajo extenuante. Además, tenía artritis reumatoide, enfermedades ginecológicas y rinitis, así como graves congelaciones en las manos y los pies, que se repetían cada invierno. Desde que empezó a cultivarse en Falun Dafa en 1997, su salud mejoró. Dejó de tomar medicamentos. Debido a sus grandes cambios, mi padre también apoyó mucho su práctica.

Visité a mi madre en mayo de 1999. Me presentó Dafa y me dijo que se había recuperado de sus enfermedades. También fui testigo de sus cambios. Caminaba con rapidez y ligereza, y parecía feliz cuando hablaba conmigo.

Desde la infancia he adorado a Buda y a los seres divinos, y he creído en su existencia. Ellos no sufren ninguna enfermedad, ni tampoco penurias. En aquella época, mi salud era bastante precaria. Yo también padecía varias enfermedades, como rinitis alérgica, artritis reumatoide, agrandamiento bilateral de los pechos, bultos en los pechos que dolían al tocarlos, apendicitis crónica, incapacidad para comer alimentos fríos, inflamación ginecológica, faringitis crónica y muchas otras dolencias. Mis relaciones con mis colegas, mi gerente y mi marido eran muy tensas. Como resultado, sufría tanto en casa como en el trabajo. La vida era realmente dolorosa. Cuando mi madre me sugirió que hiciera los ejercicios de Falun Dafa, decidí intentarlo. Sin embargo, mi comprensión de Dafa era todavía perceptiva. Sólo sabía que Dafa era bueno y que el Maestro Li, el fundador de Falun Dafa, era compasivo. Pero, no fui diligente en mi cultivación.

Luego, cuando volví a casa, tuve que trabajar y cuidar de mi hijo. Además, a mi marido no le gustaba hacer las tareas domésticas, así que también tenía que ocuparme de toda la casa, y como resultado, estaba muy ocupada. Por lo tanto, rara vez tenía tiempo para estudiar el Fa, pero seguía haciendo los ejercicios.

Había pasado por una gran transformación física. Los bultos del pecho habían desaparecido y ya no sentía ningún dolor. Me recuperé de mi artritis reumatoide. Podía comer cualquier alimento crudo y frío. Mi inflamación ginecológica desapareció. y mi apendicitis crónica no volvió a aparecer. La rinitis alérgica que me había molestado durante muchos años se redujo considerablemente, y no tardó en desaparecer también. Cuando mi marido vio mis cambios físicos, me apoyó en mi cultivación. Por aquel entonces, estaba inmersa en la felicidad durante todo el día y estaba de buen humor todos los días. Sentía que mi vida tenía esperanza, y las dificultades que había tenido que soportar en el pasado ya no me molestaban.

Enfrentarse a la persecución

El 20 de julio de 1999, el exlíder del Partido Comunista Chino (PCCh), Jiang Zemin, y sus seguidores iniciaron la persecución de Falun Gong. Las mentiras abrumadoras inundaron los medios de comunicación de todo el país. Podía sentir que había comenzado otra persecución política. Sabía que la propaganda mostrada en la televisión y en los periódicos era mentira.

Cuando mi familia veía la televisión y se encontraba con propaganda que difamaba a Falun Gong, yo cambiaba de canal o apagaba el televisor. No quería que vieran esa propaganda que difama y calumnia a Falun Gong. Pero, mi marido tenía miedo del PCCh y no me dejaba aclarar los hechos a la gente. Me permitió practicar en casa, para mantener una buena salud. Con el tiempo, poco a poco me volví más y más laxa y rara vez estudiaba el Fa o hacía los ejercicios. Como no tenía practicantes cerca de mí con los que pudiera compartir, gradualmente volví al estado de no practicante y mi salud empezó a fallar.

Mi cuerpo, antes libre de enfermedades, empezó a mostrar de nuevo varios síntomas: volvieron a aparecer bultos duros en ambos pechos, y casi no me atrevía a tocarlos, pues me dolían mucho. La rinitis alérgica comenzó de nuevo. Como resultado, mi nariz estaba congestionada y me dolía debido a la inflamación de mi cavidad nasal. En Jinan, tuve que someterme a una operación de láser en la nariz en octubre de 2002. Después de la operación, tenía la nariz congestionada todo el tiempo. Además, después de un mes de medicinas chinas y occidentales, todavía no me había recuperado.

Me preguntaba qué estaba pasando. ¿No era yo una practicante? ¿Por qué no podía retomar el estudio del Fa y hacer los ejercicios? Así que me decidí a dejar de tomar los medicamentos. También hice los ejercicios en casa todos los días. Al cabo de 10 días dejó de gotear la nariz y ya no sufría de rinitis. También desaparecieron los bultos en los senos. Volví a sentirme ligera. A partir de esa experiencia, supe que no dejaría Dafa por el resto de mi vida, ¡ya que Dafa me había dado una nueva vida!

Hacer avances cuando se enfrentan tres tribulaciones

Una vez, en el otoño de 2003, discutí con mi marido durante la comida porque me molestaba su comportamiento incivilizado. Sentía que era demasiado inculto. Me pregunté por qué me había casado con él. Me sentía muy agraviada y triste. Después de comer, empecé a sentir picores por todo el cuerpo. Cuando me rascaba, me salían bultos rojos. También me picaban los ojos, así que me los froté. Pronto se me hincharon los dos ojos y sentí que me iba a asfixiar. Cuando me sentía agitada, me sentaba en la cama con las piernas cruzadas en posición de loto. Pensaba que éste podía ser un estado previo a la muerte. Pero no tuve miedo de la muerte, ya que aunque muriera, he obtenido el Fa.

El Maestro dijo: "Hay un dicho de los antiguos: si uno oye el Fa por la mañana, puede morir por la tarde”, ("Fundiéndose en el Fa", Escrituras esenciales para mayor avance). Probablemente porque dejé ir el miedo a la muerte, pude calmarme. Mientras tanto, dejé de lado el resentimiento hacia mi marido. Media hora más tarde me sentía mejor. Pero mis ojos seguían hinchados. Mi marido se sorprendió al verme así y me exigió que fuera al hospital. Le dije: "No hace falta, ya estoy bien".

Al día siguiente me encontré con un médico. Se dio cuenta de que mis ojos seguían hinchados, así que le conté lo que había pasado el día anterior. Me dijo: "Eso es un estado alérgico agudo y es extremadamente peligroso; ¡podrías haber muerto! Eres demasiado arrogante". Me reafirmé en que estaba bien, mientras pensaba para mis adentros, tengo al Maestro que me cuida, ¡así que por supuesto que estaba bien!

Entonces, un día de 2004, cogí un autobús y fui la última en bajarme. Justo cuando subí a la acera, una bicicleta eléctrica se cayó a mi lado. Los objetos del porta equipajes de la bicicleta se desparramaron por el suelo y las ruedas me rozaron el pie derecho. Era muy peligroso. Todos los transeúntes decían que tenía mucha suerte. No sentí miedo, y fue tal como dijo el Maestro: "… no sentirás miedo...", (Tercera Lección, Zhuan Falun). Seguí agradeciendo al Maestro en el fondo, ya que creía que había pagado una deuda de vida.

En otra ocasión, iba en una bicicleta eléctrica por el lado izquierdo de un cruce en una zona rural. Otros ciclistas, que iban bastante despacio, estaban a mi derecha. Cuando estaba pasando por la intersección, giré la cabeza y vi un camión en el lado derecho de la carretera que cruzaba hacia la izquierda. Me sobresalté y esperé a avanzar rápidamente para evitar el camión, pero había otro ciclista a la derecha. En esta emergencia, acabé chocando con un cubo de basura en la intersección. El camión se detuvo a menos de dos metros de mí. Mientras el conductor salía del camión, me quejé de él en el fondo: ¿Cómo pudo conducir el camión así? ¿Por qué apareció tan de repente? No me dijo nada y sólo le dije que tuviera cuidado la próxima vez. Al ver que estaba bien, se marchó.

Me dolía mucho el pecho por la fuerza de la caída contra el manillar. Pensé que había saldado otra deuda, y me sentí sumamente agradecida con el Maestro. Sólo que mi xinxing no era lo suficientemente alto, así que seguía enfadada con el conductor. Así, el dolor de pecho duró unos meses. Con más estudio del Fa, llegué a entender el principio de " La deuda debe ser pagada”. (Tercera Lección, Zhuan Falun). Así dejé de lado el resentimiento hacia el conductor. Después de eso, mi dolor de pecho desapareció gradualmente.

Validación de Dafa en el trabajo

Trabajé en una gasolinera en el departamento de petróleo. El trabajo era muy sucio y agotador. Desde que empecé con la cultivación de Dafa, comprendí que, como practicante, uno tiene que ser una buena persona y considerado con los demás dondequiera que estemos. El lugar de trabajo también es un gran lugar para cultivarme.

Trabajamos por turnos. Cuando tomé el turno de día, ayudé a ocuparme de algunas tareas que debía hacer el turno de noche, para aliviar su carga. Mis compañeros de otros turnos también eran muy reacios a limpiar la oficina. Cuando estaba en el trabajo, lo limpiaba siempre, para que la gente pudiera tener un entorno de trabajo agradable y cómodo. No importaba si mis jefes estaban o no, yo trabajaba igualmente con diligencia. En mi trabajo diario, siempre que veía tareas pesadas, las hacía. Tampoco discutía con mis compañeros por cosas insignificantes. Cuando otros compañeros tenían problemas personales y no podían ir al trabajo, siempre los sustituía. Así que me llevaba muy bien con mis compañeros.

Mi actitud hacia el trabajo y mi dedicación han sido reconocidas y apoyadas por mis jefes. Algunos compañeros me decían: "Mientras estés tú, mi trabajo se hace". El hecho de que asumiera un papel de liderazgo en el trabajo motivaba a otros compañeros.

Era tal y como decía el Maestro:

"El propósito principal de nuestro xiulian de Falun Dafa es llevar a la gente hacia niveles altos, de ninguna manera pensamos en realizar este tipo de asunto, no obstante, Falun Dafa también puede generar un gran efecto al impulsar la civilización espiritual de la sociedad. Si cada uno busca dentro de su corazón y piensa en cómo conducirse bien por sí mismo, yo digo que entonces la sociedad se hará estable y el estándar moral de la humanidad se volverá a elevar". (Cuarta Lección, Zhuan Falun)

Más tarde, mis jefes se enteraron de que yo practicaba Dafa, y se dieron cuenta de que esa era la razón por la que me desempeñaba tan bien en el trabajo. Todos los empleados fueron testigos de ello. Un gerente dijo: "Si no practicaras Falun Dafa, te habría calificado como una empleada excelente". Al escuchar sus elogios, me quedé muy tranquila. Sonreí y le dije: "¡Gracias! Mientras conozca mi rendimiento, es suficiente. No me importa en absoluto cómo me califique".

Mi lugar de trabajo emitió una política de jubilación anticipada. Presenté mi solicitud, ya que estaba cualificada. Mi jefe intentó retenerme y me dijo: "Por favor, no te vayas. Realmente necesitamos gente como tú. Por favor, no te vayas, por favor".

Antes de dejar la empresa, quise aclarar los hechos a mi gerente. Pensé que, independientemente de las consecuencias, debía darle la oportunidad de salvarse. Así que le hablé sobre Falun Dafa, la persecución y la renuncia al PCCh. Efectivamente, renunció al PCCh.

En una ocasión, regresé a mi empresa y también ayudé a otros excolegas a renunciar al PCCh y a sus organizaciones juveniles, para que pudieran tener un futuro brillante.

Tratar bien a mi suegra

Mi suegro falleció en el año 2000. Mi suegra era una persona mayor de buen corazón. Tenía más de 90 años. Vivió con nosotros de 2001 a 2010. Cuando vino a quedarse con nosotros, la aprecié de verdad por haber criado con esfuerzo a mis hijos, sentí que era el momento de devolvérselo. En primer lugar, fui de compras para adquirir algunos conjuntos de ropa para ella.

Todas las mañanas y noches hervía agua caliente para lavar la cara y los pies de mi suegra, y también la bañaba con una esponja. Mi suegra tenía la espalda encorvada y un poco de sobrepeso, alrededor de 165 libras. Cada vez que la ayudaba a ducharse quedaba agotada. Aunque tenía un fuerte olor corporal, nunca me molestó. Especialmente sus pies tenían un fuerte olor, le apliqué jabón dos veces y le restregué los dedos de los pies uno por uno, y luego los limpié uno por uno con una toalla seca.

Debido a su avanzada edad, tenía miedo de que se cayera. Así que puse un orinal de cama en su habitación y cada mañana tenía que sacar el orinal, tirar la orina al inodoro, enjuagarlo y volver a ponerlo en su habitación.

Una vez, mi suegra se torció accidentalmente el tobillo. Enseguida se le hincharon el pie y el tobillo, y no podía moverse. Era muy doloroso. Inmediatamente, hice que la llevaran al hospital para que le tomaran una radiografía. El médico dijo que tenía una pequeña fractura y la mandó a casa. Cuando llegó a casa, le pedí que recitara sinceramente la frase "¡Falun Dafa es bueno! Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

Tenía los retratos del Maestro en casa. Le dije: "Este es el Buda más grande, por favor pídele que te salve. Por favor, pídele ayuda lo antes posible". Después de escuchar esto, juntó las manos frente a su pecho (un gesto de respeto), pidió sinceramente al Maestro que la ayudara y recitó la frase. Después de tres días, sin tomar ningun medicamento o inyección, su tobillo ya no estaba hinchado y empezó a moverse lentamente. Muy pronto, su pie se curó por completo.

Al ver que la trataba tan bien, mi suegra se sintió muy conmovida y no dejaba de elogiarme por haberla cuidado tan bien para que pudiera ser feliz. Quería decirle que había sido bendecida por el Maestro y Dafa, más que por mí.

Es costumbre que el primer día del Año Nuevo chino el equipo directivo del trabajo vaya a las unidades subordinadas para celebrar el Año Nuevo y lleve regalos a las familias de los empleados. Cuando vinieron, delante de mis supervisores, mi suegra me elogió y dijo que era una gran nuera. No podía ocultar su felicidad cuando hablaba.

Mi familia también se benefició de Dafa

Mi primo desarrolló un carcinoma nasofaríngeo en 2007. Se sometió a radioterapia y quimioterapia y quedó demacrado y su piel se volvió muy oscura. Su peso bajó a menos de 110 libras y sólo podía comer alimentos líquidos. Mi padre había encontrado un adivino para él, que dijo que no viviría más allá del año. Ese año, en verano, fui a visitar a mis padres. Mi padre me pidió que fuera a la ciudad de Chengdu para hablar con mi primo sobre Falun Dafa. Así lo hice, y mi primo creyó lo que le dije. Entonces le compré un reproductor de MP3 y descargué las grabaciones de las conferencias del Maestro para que las escuchara. Más tarde fui con mis tres hermanos a Chengdu a visitarlo. También le acompañamos en un viaje turístico a la montaña Ermei. En el camino, seguía escuchando las grabaciones y se recuperó del cáncer. Dafa le dio una nueva vida.

En 2009, la nuera mayor de mi primo desarrolló una anemia aplásica, que se conoce comúnmente como leucemia y es difícil de curar. Volvió a Chengdu y se quedó en casa de mi primo, ya que estaba muy cerca del Hospital Huaxi, donde iba a ser tratada. En ese momento, su cuerpo estaba hinchado y ella estaba muy deprimida. No veía ninguna esperanza de curarse y no quería hablar con nadie.

Ese verano, cuando visité a mis padres, fui a casa de mi primo. Al ver a la nuera de mi primo tan enferma, le aclaré los hechos. También traté de consolarla diciéndole que mientras creyera en Dafa, Dafa podría salvarla. Luego, le hablé de mi primo, que era un ejemplo perfecto. Gracias a mis esfuerzos, finalmente accedió a renunciar a la Liga de la Juventud Comunista y a los Jóvenes Pioneros. Le dije que si recitaba sinceramente "¡Falun Dafa es bueno! Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". El Maestro la protegería. También descargué las grabaciones de las conferencias del Maestro para ella. Ella siguió lo que le dije y se recuperó.

Cuando mi padre tuvo una fiesta de cumpleaños, mi primo vino a agradecerme por haberle dado a su nuera una cura que le salvó la vida. Le dije que fue mi Maestro quien la salvó, pues quien cree verdaderamente en Dafa se salvará.

Las bendiciones de mi hijo

Mi hijo vive conmigo. No importa que el PCCh haya intensificado su persecución y calumniado a Dafa, él me apoyó en todo momento. Aunque fui arrestada por la policía, él nunca tuvo ninguna queja sobre mí. Al tratar de despertar la conciencia de la gente, fui arrestada en 2019. Tenía permiso de la escuela y se quedó en casa. Cuando sus compañeros le pidieron que fuera a la comisaría para exigir mi liberación, lo hizo enseguida. Cuando llegó a la comisaría, ya me habían liberado, pero aun así, no se quejó.

El año pasado, tras el brote del virus PCCh (coronavirus), se quedó en casa y se encargó de cocinar para la familia. Siempre esperaba a almorzar conmigo después de que yo terminara de enviar pensamientos rectos. A veces, cuando mi ordenador daba problemas, siempre era él quien me ayudaba a resolverlos.

Después de que mi hijo obtuviera su título, le ofrecieron tres buenos trabajos. Al principio, trabajaba en una empresa estatal, y más tarde lo trasladaron a una agencia gubernamental con un sueldo decente. Creo que fue recompensado por reconocer a Dafa y apoyarme en mi cultivación.

Las cosas que he puesto sobre cómo mi familia y parientes se han beneficiado en Dafa son sólo la punta del iceberg. Estoy verdaderamente agradecida por la protección del Maestro hacia mí, mi familia inmediata y otros parientes.

El tiempo se está acabando para nuestra cultivación en la rectificación del Fa. Escucharé las enseñanzas del Maestro, me cultivaré bien, salvaré a más seres conscientes y asumiré mi misión histórica. Atesoraré por siempre mi relación predestinada con el Fa, cultivaré diligente y sólidamente, caminaré por la senda de regresar a mi ser original y verdadero, y seré un discípulo calificado del período de rectificación del Fa.

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