(Minghui.org) Durante semanas entre finales de febrero y marzo de 2020, una mujer de 70 años de edad de la ciudad de Lanzhou, en la provincia de Gansu, fue vigilada las 24 horas del día por su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el Partido Comunista de China desde 1999.

El 25 de febrero de 2020, los agentes irrumpieron en su casa, profesora jubilada de la universidad Northwest Normal, engañándola para que creyera que estaban allí para realizar un censo.

Los agentes afirmaron que vieron muchos materiales relacionados con Falun Gong colgados en las puertas de la gente del vecindario y sospecharon que ella los había colocado. Sin una orden de registro, saquearon su casa y confiscaron su ordenador, su impresora, sus libros de Falun Gong y algunos materiales relacionados.

A pesar de que ella trató de aclarar los hechos sobre Falun Gong a los oficiales, éstos no le escucharon. Un joven agente de unos 30 años respondió que el partido comunista chino era el mejor y que no creía que incurriría en una retribución kármica por haber participado en la persecución.

El mismo agente también le tomó las huellas dactilares, de las palmas de las manos y muestras de sangre por la fuerza. Antes de acosarla, había acosado a otros practicantes que vivían en el vecindario.

Antes de irse, la policía ordenó que firmara el acta del interrogatorio. Ella se negó.

El 27 de febrero, un agente volvió a su casa y la exigió que firmara el acta del interrogatorio o se enfrentaría a 5 días de detención. Ella se negó a abrir la puerta.

Entre el 29 de febrero y el 20 de marzo de 2020, los agentes la acosaron unas cuantas veces más. Ella notó que había gente fuera de su edificio de apartamentos las 24 horas del día para vigilarla durante esa época.