Características peligrosas del coronavirus de Wuhan

(Minghui.org) Radio Free Asia (RFA) divulgó el 13 de febrero una grabación de audio de una reunión interna del departamento de prevención de epidemias de Wuhan. Se escuchó a algunos funcionarios que tenían acceso a documentos confidenciales en la Comisión Nacional de Salud diciendo que una de las razones por las que esta epidemia de coronavirus es difícil de controlar es que algunos pacientes nunca mostraron síntomas típicos como fiebre antes de morir. Sin fiebre, esos pacientes no podían ser identificados y aislados, lo que facilitaba la propagación de la enfermedad.

La prestigiosa revista médica The Lancet publicó el 13 de febrero de 2020 un artículo titulado "Protecting health care workers from subclinical coronavirus infection" (Protección del personal sanitario contra la infección por coronavirus subclínico) en el que se describen tres características del coronavirus.

En el artículo se decía que "incluso alguien que no tiene los síntomas puede propagar el COVID-19 con gran facilidad", que "las medidas de protección convencionales, como las mascarillas faciales, no proporcionan una protección suficiente" y que "...los pacientes también pueden desprender grandes cantidades del virus e infectar a otros incluso después de recuperarse de la enfermedad aguda".

Difícil de controlar

Kwok-Yung Yuen, del Hospital de la Universidad de Hong Kong-Shenzhen, consideró que el coronavirus era más peligroso que el síndrome respiratorio agudo severo (SARS) en 2003. Uno de sus trabajos científicos publicados en The Lancet el 15 de febrero de 2020 destacaba la transmisión del virus dentro de las familias.

Con el título "Un grupo familiar con neumonía asociada con el nuevo coronavirus 2019 que indica la transmisión de persona a persona", el documento de Yuen estudió una familia de seis personas en Shenzhen que viajó a Wuhan y encontró que cinco de ellas (alrededor del 83%) estaban infectados con el coronavirus y que otro miembro de la familia que no viajó a Wuhan contrajo el virus después de tener contacto con los miembros infectados de la familia.

El Ministerio de Salud Pública de Ontario dijo el 14 de febrero que, aunque los dos primeros pacientes con coronavirus de la provincia habían sido dados de alta del hospital tras su recuperación, permanecían aislados ya que el virus COVID-19 todavía era detectable en sus cuerpos.

Después de que un hombre que desembarcó en Hong Kong del crucero Diamond Princess fue diagnosticado con el coronavirus hace dos semanas, el barco entró en cuarentena el 3 de febrero en el puerto japonés de Yokohama, cerca de Tokio. Hasta ahora, 454 de los 3.700 pasajeros y miembros de la tripulación han dado positivo en las pruebas del virus.

Katsunobu Kato, el ministro de salud de Japón, explicó: "Japón parece haber entrado en una nueva fase en la que la ruta de infección de varios casos nuevos no está clara".

Datos poco fiables de China

Barron's, una revista americana de finanzas y estadísticas, publicó recientemente un artículo titulado "Las cifras del Coronavirus en China no cuadran". "El número de muertes acumuladas reportadas es descrito por una simple fórmula matemática con una precisión muy alta", escribió Lisa Beilfuss, "Un 99,99% de variación casi perfecta es explicada por la ecuación". Los analistas de datos dicen que no es probable que un modelo de predicción tan casi perfecto se produzca de forma natural, lo que arroja dudas sobre la fiabilidad de las cifras que China está comunicando a la Organización Mundial de la Salud.

El artículo de Barron's citó a Melody Goodman, profesora asociada de bioestadística en la Escuela de Salud Pública Global de la Universidad de Nueva York, diciendo: "Nunca en mis años he visto un R-cuadrado de 0,99". Como profesional de la estadística, me hace cuestionar los datos". Dijo que los datos humanos reales nunca son perfectamente predecibles cuando se trata de algo como una epidemia, ya que hay innumerables maneras de que una persona pueda entrar en contacto con el virus. Por ejemplo, un R-cuadrado "realmente bueno", en términos de datos de salud pública, sería 0,7. "Algo como 0,99 me haría pensar que alguien está simulando datos. Significaría que ya sabes lo que va a suceder", añadió.

La embajada china en los Estados Unidos no respondió a la petición de Barron's de hacer una declaración. Sin embargo, después de que el artículo fue publicado el 13 de febrero, China informó el mismo día que los funcionarios de salud en el epicentro del brote encontraron un aumento en las nuevas infecciones después de cambiar la forma en que diagnosticaban la enfermedad.