Las observaciones de un practicante sobre el estudio del Fa

(Minghui.org) Cuando colocas tu teléfono celular junto a ti, es más probable que lo mires más a menudo, y te obsesiones. Entonces, es posible que pases mucho tiempo con tu teléfono sin darte cuenta. Tanto contenido te atrae y te vuelves adicto. ¿No afectará esto en gran medida al tiempo que deberías pasar estudiando el Fa? ¿No es esto una interferencia que nos arrastra hacia abajo?

Esta es la interferencia más común y grave que les impide a los discípulos de Dafa estudiar el Fa, memorizar el Fa y ser diligentes en la cultivación. ¿No sería mejor poner el teléfono más lejos de ti para que solo respondas a las llamadas cuando lo escuches sonar?

Algunos practicantes lo hacen bien frente a la interferencia directa o a la coacción, resistiendo todo el hostigamiento y persecución con pensamientos y acciones rectas. Pero con demasiada frecuencia podemos caer en la trampa de la interferencia indirecta, llevándonos cada vez más lejos sin darnos cuenta.

Puede que aún recuerdes que en “Viaje al Oeste”, El demonio de hueso blanco cambió de forma varias veces para confundir al monje Tang. El Rey Mono usó su ojo celestial para identificar a todo tipo de demonios. Los practicantes de Falun Dafa tenemos que usar nuestro ojo de sabiduría para ver a través de las trampas de todo tipo de distracciones que tratan de alejarnos de la verdadera cultivación. En mi caso solo pude entrar en razón con la ayuda del Maestro. La lección es dolorosa y las consecuencias pueden ser desastrosas si no despiertas.

Comparto mi experiencia para advertir a otros practicantes. Si eres adicto a los mensajes del móvil, series de televisión, novelas románticas o redes sociales, etc. como yo solía ser, ¡ten cuidado! No te dejes engañar inconscientemente por el mal. Como dice un proverbio: “Es fácil subir al barco del ladrón, pero difícil bajar”.

Me gustaría concluir citando las palabras del Maestro:

“¡Despiértense! El camino más difícil ya lo han atravesado, que al final no se vuelque el barco en la zanja apestosa” (Otra vez un palo de advertencia).