(Minghui.org) Tse-Min Chin (también conocida como Tammy Kawamura) creció en Taiwán y se mudó a Japón, después de casarse. Fundó la empresa de bolsos de alta gama TAMMY, en 2005. Además de dirigir la empresa, mantiene negocios inmobiliarios en Taiwán, China y Hawái, y gestiona un negocio de alquiler de apartamentos de lujo en Taiwán. En una entrevista reciente con Epoch Times, habló sobre cómo la pandemia cambió su opinión sobre China y sobre Falun Dafa.

El esposo de la señora Chin es presidente de los restaurantes japoneses Tentsusaikan Group. Sus restaurantes han venido perdiendo millones cada mes, desde que comenzó la pandemia. La señora Chin también canceló todos sus negocios inmobiliarios en China. A pesar de las pérdidas económicas, sostiene su propio punto de vista: “Quiero decir que nada es más importante que la vida y la salud”, afirma.

La pandemia le ha dado la oportunidad de darse cuenta de la perversidad del partido comunista chino (PCCh). “El PCCh persigue a personas en todo el mundo, no solo a Falun Dafa. Como el PCCh ocultó el brote del virus, la enfermedad dañó al mundo y se cobró la vida de personas en todas partes", señaló.

La señora Chin lamenta no haber creído antes a los practicantes de Falun Dafa. “Creo que todos le debemos una disculpa a Falun Dafa. En muchos lugares, como Taipéi 101, he visto a practicantes de Falun Dafa pidiéndole a la gente que comprendieran la verdad sobre la persecución [a Falun Dafa]. Pero los hechos de la persecución que escuché se encontraban demasiado lejos de nuestras vidas y más allá de la comprensión de la gente normal. No podía creer que fueran verdad. Así que, como mucha gente, me resultó algo indiferente y no condené los crímenes del PCCh. Hoy, nosotros también somos víctimas del PCCh. Es una dura lección. Quiero disculparme con los practicantes de Falun Dafa por no mostrarles la debida solidaridad y apoyo humanitario en aquel entonces”, añadió.

La señora Chin agregó que la lucha del pueblo de Hong Kong contra el régimen totalitario la volvió completamente lúcida. Le hizo admirar aún más el coraje y la determinación de los practicantes de Falun Dafa, ahora que conoce a lo que se han estado enfrentando. Le pide a los medios y gobiernos de todo el mundo que planten cara al PCCh. "Espero que, en el futuro, nuestra sociedad, incluida China, deje de verse amenazada por el PCCh y que la gente pueda vivir en libertad, en paz y sin miedo", matizó.

Como la señora Chin, mucha gente en Hong Kong está despertando a la tiranía del PCCh después de observar, desde el año pasado, la violencia policial y la corrupción del sistema legal. Se dieron cuenta de que lo que habían escuchado de los practicantes de Falun Dafa durante años era verdad. Algunos dejan comentarios en las redes sociales para mostrar su apoyo y disculparse por haber malinterpretado a Falun Dafa.

Durante el movimiento a favor de la democracia en Hong Kong del año pasado, las autoridades declararon una serie de muertes como producto de suicidios por ahogamiento o saltos desde edificios, en circunstancias sospechosas. Se recuerda a la gente que se utilizaron tácticas similares en la persecución a Falun Dafa en China después de julio de 1999, cuando el exlíder chino Jiang Zemin lanzó la persecución salvaje.

Para incitar a la gente y que odiara a Falun Dafa, el PCCh movilizó todos los medios fabricando mentiras, como la farsa de la autoinmolación de Tiananmen. Muchas personas fueron engañadas y guardaron silencio sobre la persecución. Muchos practicantes inocentes han sido detenidos y torturados e incluso han sido víctimas de la sustracción forzada de órganos.

El 26 de octubre de 2019, Fox News publicó un informe titulado "Sobrevivientes y víctimas de la impactante sustracción de órganos que aprueba y regula el estado en China", mencionando una sentencia del Tribunal de China que dice: "La sustracción forzada de órganos se ha llevado a cabo durante años y los practicantes de Falun Dafa han sido una y, probablemente, la principal fuente de suministro de órganos".

La señora Chen, vecina de Hong Kong, dijo que después de su experiencia personal con el movimiento prodemocracia de Hong Kong y reflexionando sobre los continuados esfuerzos que los practicantes de Falun Dafa han llevado a cabo a lo largo de los años, finalmente se dio cuenta de que “aquello que los practicantes de Falun Dafa decían, era la verdad".

Otro internauta publicó: “Los habitantes de Hong Kong no creían las denuncias de Falun Dafa, durante los últimos veinte años. Solo cuando las pésimas leyes nos han sido impuestas, una tras otra, nos hemos dado cuenta de que el PCCh puede convertir en legítima cualquier cosa ilegítima".