(Minghui.org) Mi salud era muy mala antes de empezar a practicar Falun Dafa. Me dolía todo el cuerpo, y tenía la cara y la espalda hinchadas. A menudo me sentía mareada, como si el cielo estuviera girando, y no podía respirar en la noche. Apenas podía dormir. Según las pruebas del hospital, esto era causado por una enfermedad cardíaca. Me hospitalizaron varias veces y gasté mucho dinero, pero en realidad nada me ayudó.

Falun Dafa es maravilloso

En 1998, mis hermanas vinieron a visitarme. Se quedaron en mi casa durante una semana, pero no podía cocinar para ellas debido a mi mala salud. El día antes de irse, mi hermana menor dijo: "Creo que es hora de que practiques la cultivación". Me mostró los cinco ejercicios de Falun Dafa. No tenía un Zhuan Falun, solo algunas conferencias de Shifu y algunas experiencias de cultivación de los practicantes que compartieron artículos. Cuando salimos esa noche, ella se encontró con un practicante local de Falun Dafa y le pidió que me diera una copia de Zhuan Falun. Así que recibí el preciado libro.

Después de empezar a leer Dafa yo sola, mis enfermedades se curaron rápidamente. Me sentía con energía y pude trabajar. Cuando tenía tiempo, leía las conferencias de Shifu. Sentía que Dafa era bueno.

Después de varios intentos, finalmente encontré donde se reunían los practicantes del grupo local. Un día no pude abrir mi puesto de venta porque estaba lloviendo, así que fui allá. La puerta estaba cerrada con llave. Regresé a casa y me acosté. Pensé: Finalmente pude ir al estudio del Fa grupal, pero no había nadie.

Apenas cerré los ojos, vi un rayo de luz roja que llegaba hasta el infinito. Cuando abrí los ojos, se desvaneció gradualmente. Cuando cerré los ojos de nuevo, la escena reapareció. Esto sucedió un par de veces.

No entendía lo que estaba sucediendo, así que se lo conté a mi hermana. Ella dijo: "Estás predestinada a practicar Falun Dafa. Debes cultivarte con diligencia. De todos modos estás jubilada, y tu pensión mensual es suficiente para vivir, no necesitas trabajar en el puesto". Decidí cerrar mi pequeño negocio para poder ir a estudiar a Falun Dafa por las noches.

Después de practicar durante algún tiempo, Shifu me ayudó a eliminar el yeli. Me dolía la espalda y el pecho, vomitaba y tenía diarrea. No podía cuidar a mi nieto, así que lo envié a la casa de los suegros. Dos días después, cuando me visitaron, solo podía caminar sujetándome a la pared. Apenas podía levantar la cabeza cuando me tumbé en el sofá.

Esa noche, cuando mi familiar vino a verme de nuevo, me dijo que descansara. De repente me di cuenta que me trataban como si estuviera enferma. Le dije que no estaba enferma, que estaba eliminando el yeli. Le agradecí su preocupación y le dije que iba a estar bien. En el momento que dije eso, abrí los ojos y me senté. Ya no tenía náuseas ni mareos. Después, cuando me monté en la bicicleta me sentí muy ligera, era como si mis pies no tocaran los pedales.

Fui a la casa de mis suegros a recoger a mi nieto. Estaban asombrados porque pude ir. No me dejaron llevar al niño e insistieron en que descansara unos días más. Hablamos hasta las once de la noche y luego me fui a casa. Al día siguiente lavé la ropa y las mantas y no me sentía para nada cansada.

Aclarar la verdad en la escena de un accidente

Una tarde de invierno regresé en moto a casa. Estaba tratando de girar a la izquierda cuando un auto a toda velocidad me golpeó. Sentí un dolor agudo en el corazón, como si me hubieran cortado con un cuchillo. Inmediatamente pensé: "¡Shifu, por favor ayúdeme!". Repetí: "Falun Dafa es bueno. Verdad, Benevolencia y Toleranciaes bueno". Cuando me levanté, se había reunido una multitud.

Pensé, Shifu me protegió. Debo usar esta oportunidad para salvar a la gente. Les dije: "¿Vieron eso? ¡Mi moto se rompió en pedazos, pero estoy bien! Es porque soy una practicante de Falun Dafa. Todas las campañas de calumnias contra Falun Dafa en la televisión son falsas. Mírenme, tengo más de sesenta años. Miren mis manos y mi cuerpo —¡No estoy herida, ni siquiera un rasguño! Les pido que recuerden que 'Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno'". Algunos asintieron con la cabeza y dijeron que es cierto.

El dueño del auto que me golpeó me sujetó la mano y gritó: "¿Está bien, señora?". Yo dije: "Estoy bien. Joven, tiene suerte, soy una practicante de Falun Dafa, así que no lo extorsionaré por dinero".

La policía de tránsito registró la escena y llamaron a un auto para que me llevara a casa. En el camino, le conté a la gente del auto que Falun Dafa es bueno, y que la persecución del PCCh está mal. Como habían sido testigos del extraordinario poder de Dafa, todos estuvieron de acuerdo con lo que dije y estuvieron de acuerdo con renunciar a todas las organizaciones del PCCh a las que pertenecían.

A la mañana siguiente, fui a la estación de policía de tránsito para resolver el accidente. Le dije a la policía: "Ustedes fueron los que se encargaron del accidente. Mi moto quedó destruida. Tengo sesenta años y no resulté herida. Saben por qué, ¿cierto?". Cuando sacudió la cabeza le expliqué que soy una practicante de Falun Dafa. Además aclaré la verdad y le hablé sobre la persecución.

También le dije a los policías: "Por favor, recuerden que 'Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno', y serán bendecidos". Todos estuvieron de acuerdo. El dueño del auto que me atropelló dijo: "Señora, estamos sorprendidos, creo todo lo que dijo".

En el proceso de lidiar con el accidente, seguí estrictamente las normas de un practicante. Me negué a aceptar dinero y le dije al dueño del auto que no lo demandaría. Al final, la policía de tránsito le dijo que me compensara por la motocicleta, y esto estaba cubierto por el seguro del propietario. Le dije al dueño del auto que los practicantes son amables y considerados con los demás. Estaba muy contento y conmovido.

Un familiar me dijo después que la policía de tránsito dijo que siempre es un dolor para ellos lidiar con las discusiones de la gente sobre los acuerdos de los accidentes, pero él quedó muy impresionado por mi comportamiento recto.

Durante mi caso, mucha gente aprendió lo maravilloso que es Falun Dafa, y que los practicantes son buenas personas.

Negando la persecución con pensamientos rectos

No recibí mucha educación, así que no soy muy elocuente. No sabía cómo hablarle a la gente de la persecución. Solo tenía el corazón para salvar a los seres conscientes. Por lo tanto, hago lo que sea y tanto como pueda, como encuadernar folletos, poner tapas de libros, etc. No elijo, porque creo que todo lo que hacemos valida Dafa.

Algunos practicantes me sugirieron que podría aprender a manejar una computadora e imprimir materiales. Decidí aprender. Poco a poco mi casa se convirtió en un sitio de producción de materiales, y funcionó sin problemas durante muchos años. Más tarde me denunciaron cuando hablé con la gente. La policía local saqueó mi casa y se llevó mis libros de Dafa, la computadora, los materiales impresos, algo de papel de impresión, dinero en efectivo, etc.

Cuando la policía preguntó: "¿Por qué tiene tantos materiales?". Dije: "Estos son para salvar a la gente". No cooperé en absoluto cuando me preguntaron sobre otras cosas o querían tomar fotos. Apenas se fueron, salí rápidamente de mi casa y le dije a otros practicantes que tuvieran cuidado.

Mi familia quería que me escondiera. Dije que estaba decidida a no seguir el camino dispuesto por las viejas fuerzas. Ante su insistencia, acepté salir de la casa temporalmente. Volví ocho o nueve días después. Mi marido tenía miedo de que me descubrieran, así que no me dejó hacer las tareas domésticas y me pidió que me escondiera en el cuarto de atrás. Todavía estaba un poco intranquila, así que hice lo que me pidió. Estudié Dafa y envié pensamientos rectos. Enviaba pensamientos rectos cada hora para eliminar el mal.

Después de un mes, las enseñanzas de Shifu me ayudaron de repente a entender: Soy una discípula de Dafa que camina por el sendero divino, ¿cómo puedo tener miedo de la gente malvada? Mi apego al miedo permitió que los elementos malvados hicieran estas cosas. Solo hay dos habitaciones en mi casa, ¿en dónde me puedo esconder? Cuando me di cuenta de esto, salí inmediatamente del cuarto de atrás.

La policía finalmente regresó. Me negué a cooperar con ellos. Mi marido les dijo: "Este asunto se acabó". Se fueron.

La policía no volvió. Sabía que era porque negué la persecución fundamentalmente. Shifu vio que yo eliminé el apego y cumplí con el requisito de Dafa —Él resolvió la situación.

¡Gracias, Shifu! ¡Con el cuidado de Shifu, he logrado superar todos estos obstáculos para llegar a donde estoy hoy!

(17.º Fahui de China en Minghui.org)