(Minghui.org) Un jefe de policía trepó por la ventana de la habitación de la Sra. Yang Liyun alrededor de las 6 a. m. del 9 de agosto de 2019 y la arrestó.

En la ciudad de Sanhe, provincia de Hebei, la Sra. Yang de 50 años, fue atacada por su fe en Falun Dafa, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

Más de 20 policías procedieron a saquear la casa de la Sra. Yang sin una orden judicial y confiscaron sus libros de Falun Dafa.

Mientras su esposo y su hijo trabajan fuera de la ciudad, ella vive con su madre, que tiene más de 90 años. Fue arrestada a pesar de sus fuertes protestas de que necesitaba cuidar a su madre.

Los oficiales la arrastraron a una patrulla policial. Se resistió aferrándose al borde de la puerta del auto. Mientras los oficiales la empujaban dentro del auto, tres dedos en su mano izquierda resultaron gravemente heridos.

Luego fue llevada a la estación de policía de Liqizhuang, donde los oficiales la esposaron e interrogaron.

Cao Aibo, el jefe de policía, afirmó que habían descubierto una pancarta con información sobre Falun Dafa a lo largo del ferrocarril y sospecharon que fue la Sra. Yang quien la colocó. Amenazó con sentenciarla a prisión y dijo que no la dejaría ir fácilmente.

Cao también se jactó de haber enviado a uno de sus conocidos, el Sr. Ma Weishan, de 80 años, a cumplir una condena de prisión de cinco años por negarse a renunciar a Falun Dafa. Se jactó de no tener piedad cuando se trataba de perseguir a los practicantes de Falun Dafa.

Después de varias horas de interrogatorio y sus reiteradas solicitudes de regresar a casa para cuidar a su madre, la Sra. Yang fue liberada por la tarde.

Persecución pasada

Debido a que se negó a renunciar a Falun Dafa, la Sra. Yang ha sido objeto de reiteradas ataques por parte de las autoridades en los últimos 20 años.

Fue arrestada por primera vez el 12 de octubre de 2006 después de ser reportada por publicar información sobre Falun Dafa en áreas públicas.

La policía saqueó su casa y confiscó sus libros de Falun Dafa. Después de dos días en el centro de detención del condado de Dachang, fue transferida al centro de lavado de cerebro de Langfang, donde estuvo detenida durante un mes y una vez puesta en confinamiento solitario e intimidada por no renunciar a su fe, los oficiales extorsionaron a su familia con 500 yuanes antes de liberarla.

La Sra. Yang fue arrestada nuevamente el 20 de julio de 2008 por más de 20 oficiales. Fue interrogada, golpeada, maltratada verbalmente y monitoreada durante todo el día mientras estaba en el centro de detención de la ciudad de Sanhe.

Compartía una habitación pequeña con otras cuatro detenidas, y dormían, comían y hacían sus necesidades en el mismo diminuto lugar. Sin cama en la habitación, se vieron obligadas a dormir sobre el piso de concreto.

Siete días después, la policía le otorgó una sentencia de 1,5 años en el campo de trabajos forzados para mujeres de Shijiazhuang sin el debido proceso.

Debido a que ella y otras cuatro practicantes de Falun Dafa se negaron a usar uniformes de reclusas en noviembre de 2008 como una forma de protestar por la persecución, los guardias las esposaron a las cinco juntas y las pusieron en confinamiento solitario. Dondequiera que una fuera, las otras cuatro tenían que ir juntas.

Mientras tanto, los guardias las obligaron a sentarse en un taburete durante horas, las amenazaron y abusaron verbalmente de ellas.

Después de que se les permitió regresar a una celda regular en febrero de 2009, los guardias todavía las esposaron a las cinco juntas. También obligaron a las practicantes a usar suéteres y pantalones de invierno en el verano en una habitación que no tenía aire acondicionado ni siquiera un ventilador.

La familia de la Sra. Yang fue acosada por los oficiales y funcionarios del gobierno local el 21 de junio de 2012, cuando ella no estaba en casa. Los oficiales obligaron a su familia a firmar una declaración que difamaba a Falun Dafa amenazando con evitar que su hijo asistiera a la universidad.